29. Una tragedia

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*POV Celeste*

Ahora mismo, Logan y yo estamos caminando a mi precioso hogar, Logan camina alegremente mientras sonríe, y sin querer termina contagiándome su alegría, cosa que me causa bastante gracia, pues hasta hace unas horas estaba... algo rara, pero parece que con su carácter tan especial me he recuperado.

Logan se giró para verme, y debe ser que estaba muy seria o algo, porque pasó su brazo por mis hombros, y ambos sonreímos.

Logan siempre ha tenido algo particular (o al menos desde que lo conozco, que no es mucho tiempo) que hace que mis días sean únicos...

Bueno, finalmente llegamos los dos a mi casita, aunque yo no tenía mucha idea de qué es lo que íbamos a hacer exactamente.

Saqué mis llaves para abrir la puerta y le dije a Logan que pase, y el pasó junto a mí.

- ¡Ya llegué! - grité.

Hubo un silencio, algo extraño, puesto que en casa normalmente siempre hay ruido.

- Logan, por favor quédate aquí, si quieres deja tus cosas allá - señalé un rincón del salón – yo quiero verificar algo.

- Ok, yo espero.

Dejé mi mochila en el suelo y subí rápidamente, pues como ya dije antes, me parecía muy extraño que la casa estuviese en silencio, siempre hay aunque sea pequeños murmullos indicando que hay alguien en casa.

Mientras caminaba por la casa, iba llamando a todos, pero sin recibir respuesta. ¿Qué había pasado en mi ausencia? ¿O se habían ido a algún lado todos sin mí?

Ya estaba algo preocupada, abrí las puertas de los cuartos de mamá y papá, de Cris, y de Alex, y aparte de que estaban desordenados, no encontré a ninguno. ¡¿Qué había pasado?!

Bastante preocupada ya, fui al salón nuevamente, dónde Logan escuchaba música mientras asentía con la cabeza, aunque no conozco la canción que estaba escuchando, pero bueno.

- ¡Oye Celeste! ¿Hacemos el trabajo ya? - me dijo él.

- Eh... Bueno.

- ¡Ok, entonces empecemos de una vez!

Sacó unos cuadernos y unos papeles con cosas escritas, supongo que de los temas hechos en el bimestre, y sacó unas hojas de colores y otras de un material parecido a la de las revistas. ¡Sí que había previsto que yo aceptaría!

Estuvimos un rato haciendo la revista, que nos iba quedando bastante bonita, había descubierto que Logan tenía creatividad para estas cosas, pues se le daba bien decorar y ordenar información haciendo que quede bien.

Claro que no quité de mi cabeza que no había nadie en casa.

Habrá pasado... ¿Media hora? Hasta que recibiese una llamada de parte de Cristian. Yo me levanté y dejé a Logan decorando (se le veía divertido, se notaba que le gustaba lo que hacía) y contesté la llamada.

- ¿Sí? - respondí.

- Celeste, ¿Ya estás en casa? - su voz sonaba algo cortada (no por la señal)

- Sí, desde hace como una media hora y un poco más que llegué, ¿Qué ha pasado? ¿Por qué no había nadie cuando llegué, y no vuelven todavía?

- Por favor, no te alarmes, tienes que guardar la calma y venir al hospital al que siempre vamos cuanto antes.

¡¿Hospital?! ¡¿Quién...?!

- ¡¿Qué ha pasado?! - le grité alterada.

- Celeste...

- ¡Habla ya!

- Son mamá y papá los que están en el hospital... Tuvieron un... accidente. Axel y yo te necesitamos, por favor... ven.




Hasta el finalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora