Internado Grimore (Adelaida D'Angeles 1) -Editando-

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Capítulo 7: Dramas y más dramas.

-¿Qué sucede? -preguntó Molly, preocupada.

-Nada... Sólo que... -suspiré- No sé, no me gusta. No... No quiero involucrarme emocionalmente con ninguno, ¿sabes? Por que... bueno... tu sabes que pasa después... Y... Lucas me tiene como objetivo, ¿sabes? "Dormir con Adelaida D'Angeles". Bueno, no dormir, ya dormimos juntos... ¡No en el sentido que crees! Estábamos completamente vestidos y muy cansados... Pero, el primer día de colegio, que casualmente era su último primer día, él me pidió de... bueno... cojer -susurré lo último- Y yo lo rechacé, es decir ¿quién habría dicho si? Era mi primer día en un nuevo internado y él como muchos estaba borracho. Pero, luego de eso, se encaprichó conmigo. Escuché una conversación a escondidas de ellos en la que Xavier le decía que se consiga una chica para cojer y que no lo molesté a él, y Lucas le decía que él se la había robado. Y, la chica de la que hablaban, era yo. Estoy 100% segura porque no tardaron en mencionar mi nombre... Lucas le pidió que me deje pasar por su cama y, luego, sería toda para Xavier. ¿Cómo si fuera un objeto, me entiendes? Cómo... cómo si no tuviera sentimientos... pero..., pero los tengo.

-A Xavier mucho no lo conozco, pero ya sé cómo es Lucas Ripoe -rodó los ojos. -Te va a perseguir por siempre, hasta que lo consiga.

Parecía triste al decir lo último, pero yo me había quedado en la primera parte.

-¿Los conoces? -me extrañé.

-Voy al Internado Grimore con todos ustedes.

Un sentimiento de culpa me embargó. ¡Iba a mi mismo internado y no la había visto nunca! Aunque ¡soy nueva! Claro que, entre los miles de estudiantes, había millones que no conocía. Y más si ella es de otro año.

-¡Qué genial! -respondí, porque en serio lo era. -¡Nos veremos más! Alto, ¿quieres ser mi amiga, cierto? Ay, que humillante. ¿Por qué ayer reaccionaste así si ibas a mi mismo internado?

-Claro que quiero ser tu amiga, boba -contestó, riendo. -No sabía que ibas a Grimore, volví ayer de Alemania, mis vacaciones terminaron un poco tarde.

¿Así que era alemana? Al notar su piel pálida, sus ojos celestes y su cabello rubio, lo debería haber sabido. Claro que tenía procedencia alemana. O rusa. O de por allá. ¿Por qué me sorprendí tanto?

-¡Genial, entonces Maxon no es el único que va a empezar tarde! -reímos.

-Me pareció escuchar mi nombre, jovencitas -dijo una voz detrás nuestro.

Nos giramos para ver a Maxon sonriéndonos. Detrás, todavía en la caja, se encontraban Xavier y Lucas... ¿discutiendo? No pude evitar pensar si eso sería por mi también.

-Ya tenemos las habitaciones -anunció Maxon.

-Yo me tengo que ir...

-¿Irte? -pregunté. -Pero ¡si es de madrugada y estamos en la otra punta del pueblo!

-A parte, ya tienes habitación -agregó Maxon, pasándole una llave.

-Ustedes no tienen que...

-Claro que si -interrumpí. -Me salvaste de aparecer en los medios fuera del internado un sábado a la noche. ¿Sabes como habría enloquecido mi familia? Mereces esto y más, por favor, Molly, quédate.

Asintió en respuesta y yo chillé, contenta. Maxon también sonrió.

-¿Vamos, primito? -pregunté.