La prima de Eadlyn [La heredera/La corona fanfic] TERMINADA

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PRINCIPE DANTE (FOTO)

Dos días después me encuentro frente al espejo revisando por completo mi reflejo. Alguien, porque no conozco a la persona, se ha encargado de diseñarme un traje verde muy oscuro, casi negro, para la fiesta de hoy. La falda está confeccionada con muchas capas de tul y la parte del corpiño es una intrincada red de encaje que tapa mis brazos, estómago y pechos, pero que deja un escote en V bastante marcado. Mi piel es un gran contraste con el traje, puesto que parece mucho más pálida de lo habitual, aunque sigue siendo tan lisa como siempre. Loira se ha encargado de mi cabello y me ha realizado con uno de mis oscuros mechones una trenza que funciona como diadema, y el resto del pelo está suelto en suaves rizos. El maquillaje sigue siendo tan sutil como siempre, aunque mis labios están pintados de rojo y van a ser el centro de todas las miradas. 

- Estoy lista- le comunico a Loira, antes de suspirar y encaminarme hacia la puerta subida en mis altos tacones del mismo color que el traje que sobresalen por una raja casi central que parte el traje y deja al aire mi piernas mientras camino. Es algo provocativo, y es pero que no sea demasiado. 

Bajo las escaleras sujetando mi traje con mucho cuidado. Y cuando por fin llego al final de las escaleras veo a Eikko parado a la entrada del salón donde se celebra la fiesta. Y noto como mi pulso comienza a acelerarse. 

- Buenas noches, Eikko- saludo mientras me encamino hacia él. Él parpadea unas cuantas veces antes de contestar. 

- Buenas noches, Arabella- dice timidamente. 

Me doy cuenta de que nunca lo he visto tan elegante, no desde que he llegado, al menos. Se ha peinado de forma distinta, parece más alto, más imponente y guapo. 

- Estás muy guapo- admito sin darme cuenta. Me tapo la mano con la boca y me echo a reír-. Oh, vaya. ¿He dicho eso en voz alta?- pregunto mientras noto como mis mejillas se tornan rojas. 

- Sí- responde con una sonrisa mientras baja la mirada-. Gracias. No quería meter la pata. 

- Tranquilo, estás genial- lo tranquilizo. 

Tengo ganas de acercarme y la intención de hacerlo, justo antes de escuchar una voz. Esa voz. 

- Bella, il mio amore.- Me giro rapidamente para ver a Dante aparecer por el pasillo con un andar despreocupado-. Sei bellissima- me felicita. 

Dante va vestido con una traje de chaqueta que solo puede sentarle bien a alguien que proviene del mar Mediterráneo. Es algo informal, pero contrasta a la perfección con su piel bronceada por el sol, su pelo castaño y sus ojos color avellana. 

Cuando llega hasta mi me toma por las mejillas y me planta un rápido beso en los labios que me deja aturdida. 

- Dante- digo, completamente confundida-. Che ci fai qui?- pregunto tratando de desenterrar todo mi potencial con el idioma italiano. 

- Me han invitado a la fiesta- dice, con su acento italiano, mientras me toma la mano en la que tengo el anillo de compromiso, la alza y besa el dorso. Eso vuelve a descolocarme un poco. 

Demasiada cercanía para ser la segunda vez que nos vemos. 

- ¿Cuándo has llegado?- pregunto y busco con la mirada a Erik, pero ha desaparecido. Y eso, sorprendentemente, hace que me sienta algo triste. 

- Hace una hora- responde mientras me estudia con la mirada-. Si tratta di una sorpresa. 

- Da quanto tempo si rimane nel palazzo?- pregunto todavía tratando de asimilar que él está aquí. Porque... cuando él está presente la inminente boda se siente todavía más cerca.