La prima de Eadlyn [La heredera/La corona fanfic] TERMINADA

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Tengo toda la tarde libre. Al parecer hay una especie de reunión con ciudadanos de Illéa que vienen a tener una especie de dialogo-debate con Eadlyn, sobre problemas que están sufriendo. Al parecer, Marid Illéa está aquí. No me he enterado de nada de esto, es frustraste. No conozco a ese hombre en persona, pero Eadlyn podría, al menos, haberme comentado que iba a venir y tal. 

Decido pedirle a Loira que me traiga un té con miel y me encierro en mi habitación durante toda la tarde para poder terminar de leerme el libro de la aburrida historia Italiana. No es que odie la historia, sino que en este libro no te cuentan las cosas interesantes. 

Al día siguiente, Eadlyn viene a comentarme algo muy serio. De hecho es un tema que va a cambiarlo todo. 

- ¿Coronación?- pregunto, sin poder ocultar mi asombro. 

- Sé que puede parecer un cambio precipitado, pero estoy preparada y sabes lo mucho que necesitan mis padres esto- balbucea-. Me apoyas, ¿verdad? 

- ¡Por supuesto que sí, Eadlyn!- aseguro, agarrando sus manos entre las mías-. Siempre te voy a apoyar, ya sea como prima o como reina. 

- Gracias, Arabella- dice, apretando mis manos. 

El viernes por la noche tenemos el Report. Cuando tía America entra en el estudio todo el mundo rompe en aplausos y silbidos. Ella levanta la mano y saluda a todos de forma delicada. Me siento junto a Erik después de saludar a mis tíos y decirles lo contenta que estoy de volver a verlos por aquí. 

- Hoy no tengo que salir, ¿cierto?- le pregunto a Eadlyn cuando para por mi lado. 

- No, tranquila. Solo van a ser unos anuncios- me asegura- Aunque sonríe si enfoca la cámara. 

- Controlado- aseguro, levantando un pulgar. 

La tía America abre el Report asegurando a todos los ciudadanos que se encuentra bien. Después hay algunas noticias sobre actualizaciones que no me llaman realmente la atención. Al final, tío Maxon se traslada al podio instalado en el centro del escenario, mira a cámara y suspira. 

- Pueblo de Illéa- comienza con nerviosismo. Se detiene unos segundos para mirar a tía America y a Eadlyn. 

Cruzo los dedos sobre mi regazo y espero a que continue. 

- Querido pueblo de Illéa, esta noche me dirijo a vosotros para pediros clemencia. Ya hace veinte años que soy rey. Desde el primer día, he hecho todo lo que estaba en mi mano para resolver cualquier conflicto y mantener la paz en nuestro país. Hemos establecido nuevas alianzas, hemos roto con todas las prácticas sociales arcaicas y hemos intentado daros la oportunidad de tener una vida plena y feliz. Ahora os ruego que hagáis lo mismo por mi [...] Por lo tanto, después de pensarlo y discutirlo mucho, nuestra familia ha decidido que mi hija, la princesa Eadlyn Schreave, ascienda al trono. 

Hace una pausa para esperar las reacciones y suena un aplauso. Seguido de este todos los chicos de la Selección sentados en la fíla delante de mi se levantan y rompen en aplausos como locos. Hago los mismo y comienzo a aplaudir mientras sonrío de oreja a oreja. En realidad, quiero vitorear, llevarme los dedos a la boca y silbar como lo hace Kile... pero ser una futura princesa me impide que haga estas cosas frente a la cámara. 

- Ya hemos empezado a organizar la coronación- continua tío Maxon-, que tendrá lugar a finales de la semana que viene [...]

Todos volvemos a aplaudir cuando tío Maxon termina su discurso. Después el el turno de Eadlyn quien agradece a todos por el apoyo y advierte que quien gane La Selección se convertirá en rey consorte. 

Me salto la cena y decido que necesito golpear alguna pelotas. Por eso, me cambio a mi ropa de deporte y camino hasta la pista de tenis. Pongo en marcha la maquina lanza-pelotas y comienzo a golpearla una tras otra con la raqueta.