Capítulo 14

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Al día siguiente me levanto por el sonido de mi móvil.

<<Hoy no pienso ir a la Universidad ni de coña, no va a ir nadie.>>

<<¿Qué coño hice ayer? Solo me acuerdo del momento en el que Connor me dijo de me durmiera, en fin...>>

Voy corriendo a coger la llamada.

-¿Sí?

-Mariam, soy Jona, ven ya a la casa de Connor, ¡corre!

-¿Qué coño pasa?

Pero para cuando se lo pregunto ya había colgado.

<<Joder, joder, joder.>>

Me visto, me peino un poco y cojo mi coche lo más rápido que puedo. Menos mal que la localización de la casa de Connor todavía estaba señalada en el GPS, el cual nos dejamos encendido.

Faltan cinco minutos para llegar a su casa y estoy de lo más nerviosa. Cuando llego me encuentro a Connor con un brazo partido y con heridas por toda la cara tirado en el suelo.

-¡Jona! ¿Qué ha pasado?

-Vinieron unos chavales para pegarle una paliza, los vi lléndose al terminar de pegarle la paliza, creo que son de la universidad de al lado de la nuestra.

-¿Por qué? Y tú qué hacías, ¿no estabas con él?

-No lo sé, y, no, no estaba aquí; acabo de llegar. Y si te das cuenta se ha desmayado.

-¡Joder! No me había dado cuenta de los nervios. Ayudame a meterlo dentro.

Jonan le cogió del los brazos y yo de las piernas; y lo pusimos en el sofá.

-Ve a busvar un ventilador o algo que expulse aire y yo iré a por un trapo con agua.

-¡Enseguida sargento!

Tras media hora dandole aire y poniendole un trapo con agua en la cara, por fin se despierta.

-¿Qué cojones...?

-¡Connor!- decimos los dos al unísono mientras le abrazamos.

Connor hace un gesto de dolor y nos separamos al instante.

-¿Donde están esos cabrones?

-Se han pirado- dice Jona.

-Joder...- Connor intenta levantarse del sofá en un intento fallido.

-Mmm Connor deberías de curarte esas heridas- digo en un tono prudente- y después iremos a urgencias a que te arreglen ese brazo.

Connor se toquetea la cara para localizarlas mientras le ayudo a llevarlo al baño a que se limpie las heridas.

-Gracias Mariam, ya puedo yo solo.

-Esta bien.

Coge desinfectante y lo vierte en un algodón con dificultades.

-Anda déjame que te ayude- le digo mientras le quito el algodón de las manos.

-Gracias, este brazo me esta matando.

Le restriego el algodón pot toda la cara con cuidado intentando no hacerle mucho daño.

-Ay.

-Lo siento, ¿estas bien? No controlo mucho esto.

-Sí, para mí eres la enfermera más sexy que me ha curado.

En ese momento mis mejillas cogen un color rojizo al oír sus palabras.

-Anda vamos a urgencias- le digo mientras lo cojo de forma que su brazo bueno esta encima de mi hombro.

Jona me ayuda a subirlo al asiento de atrás de coche.
Conduzco lo más rápido posible hacia urgencias.
Cuando llegamos lo atienden inmediatamente y tras tres cuartos de hora ya le han escayolado el brazo.

-Gracias por cuidarme- nos dice a los dos.

-Nada- le decimos Jona y yo al unísino con una sonrisa.

Connor ya está mejor y puede mantenerse en pie. Para cuando llegamos a casa ya son las dos de la tarde, y les propongo algo.

-¿Que tal si os venís a mi habitación a comer? Y sí, Ashley está allí Jona- le respondo a Jonan leyendo sus pensamientos.

-Entonces, por mí, bien- dice Jona y nos reímos todos.

-Por mí estupendo- declara Connor.

Nos dirigimos para mi habitación después de ir a  urgencias.

Entro a casa y Ashley me ametralla a preguntas.

-¿Dónde cojones has...?¿Por qué Connor tiene un brazo escayolado y su cara esta llena de heridas?¿Qué coño ha pasado, Mariam?

-Me han pegado una paliza y estos dos me han salvado el culo- dice simplementrñe entrando al interior y sentandose en mi cama.

-¿Y por qué te han pegado la paliza?

-Bueno pues el caso es que hace una semana fui de botellón y me pasé un poco y le rompí la botella a uno en la cabeza porque eran unos capullos y nos estaban jodiendo la noche y han decidido devolvermela.

-Joder Connor- decimos los tres al unísono por la impresión debido a su agresividad cuando está ebrio.

-Bueno, voy a preparar la comida- dice Ashley.

Mientras Ashley estaba haciendo la comida nosotros esperábamos viendo cualquier cosa en la televisión. Yo sentada con Connor en mi cama y Jona en la de Ashley.

-¿Puedo firmarte?- le digo con timidez.

-Claro que sí.

Voy a por un rotulador permanente para firmarle y ponerle: "Para el mejor fiestero peleón."

-Me encanta- me dice con una sonrisa, la cual, se me contagia.


Planazo de noche, Connor y Jona se quedan a dormir.
He estado notando ligero comportamiento del amor de Connor hacia mí, me resulta raro, ya que sigo recordando a Jack.

<<Te puso los cuernos>>- me recuerda mi subsconciente.

Cuando recuerdo eso solo siento punzadas dolorosas en mi pecho, no logro comprender por qué hizo eso, nos queríamos demasiado, éramos perfectos, diez dedos enlazados a la perfección. Aunque, supongo que ya es hora de pasar página de una vez por todas.
No he hablado con el desde que lo dejamos, y si ahora mismo lo viera se me partería el corazón por el simple hecho de volver a ver esos ojos.

Cenamos una pizza de nata, la cual les encantó a los chicos, nosotras ya la habíamos comido antes y es oficialmente nuestra pizza favorita.

Vimos una película, Orgullo y prejuicio.

-Después de haber leido el libro y ver la película, reafirmo mi teoría de que prefuero el libro antes que la película- digo con un tono de desaprovación.

-Bueno, son cosas diferentes, aunque yo también prefiero los libros.

Después de eso todos nos fuimos a dormir, obviamente Connor y yo en la misma cama, por suerte o por desgracia, todavía no sé por qué opción decantarme.
Mientras todos dormían me puse a analizar:

<<Es rubio, con ojos verdes, está fuerte, a mi parecer es buena persona y me demuestra cierto amor hacia mí.
Por suerte, decido.>>

Empiezo a reírme sola por el análisis que acabo de hacer, el cual no tiene ningún sentido.

-¿Qué pasa?-me dice con voz soñolienta

-¡Nada!

-Duermete ya, anda, pequeña salvapalizas.

-Vaaaaale.


A la mañana siguiente me levanto, pero cuando me levanto me encuentro algo escrito en mi tobillo con rotulador permanente.
A continuación lo leo y me quedo algo impactada por lo que dice.






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