Desde El Mañana

Capítulo 24

Narra Noodle

Como si hubiese cerrado mis ojos durante un segundo, los abrí percatándome de la intensa luz que entraba por mi ventana. Había amanecido, era otro día. Pero este día tenía uno cuota de incertidumbre. Después de lo que pasó ayer es difícil tener certeza de lo que sucederá con nosotros.

Me levanté desganada a preparar algo para el desayuno. Casi sin mirar abrí la puerta de mi cuarto, y al dar un paso mi pie chocó con algo. Cuando vi lo que era no supe qué hacer.

-¿M...mis cosas? – pregunté en voz alta mientras abría la funda de guitarra que estaba sobre aquella caja – ¡Mi guitarra! – pensé con los ojos empapados en lágrimas.

"Cuando creí que habías muerto, volvimos a los Kong Studios. Estaba todo destruido. Aun así, yo rescaté varias cosas tuyas y las puse en una caja, que hasta el día de hoy debe estar en casa de mis padres cuando me fui a vivir allá un tiempo después del accidente..."

- 2D – pensé - ¡TOO-CHI! – grité por el pasillo. Me importó una mierda que Murdoc estuviera durmiendo en el cuarto de al lado. 2D estaba en casa, no podía ser otra cosa.

Subí por las escaleras haciendo un alboroto con mis pisadas. Una vez arriba vi que la puerta estaba abierta. Estaba tan emocionada que eso no me importó en lo absoluto y entré corriendo sin preguntar. Lo único que quería era abalanzarme sobre él por haber traído mis cosas.

Para mi sorpresa cuando entré no había nadie. Sólo que la cama estaba deshecha. Me senté en ella un minuto y pude sentir la calidez de Too-chi.

-Aún está tibia – pensé – No debe estar muy lejos.

De pronto suena la cadena del retrete del baño de 2D. Con eso me quedó más que claro que estaba ahí. Luego se abrió la puerta del baño, y sentí que entraría a la habitación. Yo me quedé sentada, y antes de verlo entrar salté a sus brazos.

-¡TOO-CHI! – dije abalanzándome sobre él.

¡Noods! – gritó asustado mientras me sostenía como podía.

¡Gracias, Too-chi! – dije dando un beso en su mejilla.

Algo me inquietó. Él estaba un poco húmedo.

-Ahmm... Noods – dijo muy sonrojado – Me alegro mucho de verte – sonrió – P...pero ¿Podrías esperar a que vista primero?

-¡VISTA! – pensé -¡¿Está desnudo?! – me sonrojé mucho y cerré mis ojos con fuerza.

-N... no es lo que piensas, Noods – dijo nervioso – N... no estoy desnudo. Sólo ten cuidado de no pasar a llevar la toalla cuando te bajes. Porque si se cae, ahí si lo estaría – rió nervioso.

-L... lo siento, 2D – dije bajándome con mucho cuidado de sus brazos con mis ojos cerrados – No quería...

-No te preocupes, Noods. Al parecer te gustó la sorpresa que te dejé abajo... Aaah, y puedes abrir los ojos, no te preocupes – río y lo vi.

Estaba cubierto por una toalla. Traté de no mirarlo mucho. Aun así no pude evitar verlo de reojo prestando atención en los detalles. Su delgado y anguloso torso húmedo, su cabello mojado y él con una sonrisa nerviosa muy sonrojado. Era evidente, casi lo veo sin ropa. ¡Qué vergüenza! Pensaba, mientras a la vez mi corazón latía con fuerza y sentía cada vez más intenso el calor en mis mejillas. Probablemente tenía toda mi cara roja.

-S... sí, Too-chi. Me encantó – sonreí.

-¿Estás bien? – preguntó preocupado – Digo, por lo que ocurrió ayer. En cuanto supe regresé...