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Narra JiMin:

Definitivamente... Soy la novia en esta relación.

Recuerdo como YoonGi se declaró con un ramo de rosas blancas diciéndome que era homosexual y que me quería con toda su alma, era algo que no podría olvidar nunca. Su primer te quiero sincero.

Recuerdo también todos esos días en el instituto en los que algunos me llamaban gordo o obeso o pelota con patas y YoonGi me defendía mandándolos a todos a la mierda y pasar de ser el hermoso popular sin sentimientos al hermoso popular que mancha su historial con una pobre albóndiga con patas.

También puedo recordar todas esas veces que me había salvado en el baño del instituto vomitando y cortándome, cuando me consolaba y me hacía sentir único solo con las palabras que me decía.

Sin hacer mucha memoria no olvido esas veces que parecía una chica con la regla sin saber bien mis sentimientos. Cuando lloraba y reía y no sabía que hacer. Él siempre seguro de todo, hasta cuando me propuso ser novios.

¿Y cuándo me dijo de ser un matrimonio? Me propuso matrimonio de la manera más bonita que una persona podría hacerlo.

Pero eso se podría discutir, porque cuando me propuso matrimonio, yo ya le había comprado un anillo y es más, lo llevaba en el bolsillo cuando él me lo propuso. Al parecer fue más rápido que yo.

También me acuerdo de cuando salí del armario. El desprecio que me hicieron, los muchos insultos de su parte y las mil palabras horribles que nos dirigieron a mi y a mi futuro esposo, YoonGi.

Empezaron diciendo que era mentira, que YoonGi solo me había hecho confundirme y que solo era una tontería de un niño de 18 años, luego cuando me negué y dije todo lo que sentía me riñieron y dijeron cosas de YoonGi que nunca les perdonaré. Dijeron que YoonGi solo era un maldito niñato que no sabía que hacer para encontrar la felicidad e intento buscarla entrando en mi culo. Palabras textuales.

Pero cuando se dieron cuenta de que no me harían retractarme fue cuando empezaron a decir que no me reconocían, que para ellos solo era un simple niño que se hacía pasar por mí. Y luego, más tarde, dijeron que un monstruo me había abducido y que no era yo.

Mis padres nunca me apoyaron e incluso me echaron de casa. Me fui a vivir con JungKook y tiempo después con YoonGi.

Quien si me apoyó fue mi hermana Ailee que me entendió perfectamente, ella y su novio Lee Jong. Ellos eran una pareja hermosa. Él era un cantante muy bonito y conocido en países de Sur América, en España, y lugares como Corea del Norte y Corea del Sur. A pesar de la fama y de su apariencia, siempre había sido fiel y había tratado genial a mi hermanita. Se notaba a kilómetros que la amaba, se preocupaba más por ella que por su música y era muy atento con ella. Ambos estarían en mi boda apoyándome como siempre habían hecho.

Y estoy diciendo que parezco la novia de la relación porque yo aquí, 19 de enero de 2016, estoy llegando tarde a la boda y estoy entrando por la alfombra roja alargada que cubre medio suelo de la iglesia, donde, hace solo apenas algunas semanas, había sido el entierro de la madre de Taehyung.

Estaba nervioso, cogido del brazo de mi mejor amigo y padrino JungKook, que conseguía mantenerme firme y no desmayarme por los nervios. Levanté mi vista y fue como si nadie estuviese sentado en las bancas que me rodeaban, como si el cura que habíamos conseguido que nos casara por la iglesia se desvaneciese y como si el Taehyung y JungKook que nos apoyaban se evaporasen en su propia burbuja. 

Solo tenía ojos para el YoonGi trajeado que me esperaba en el altar, con una sonrisa que le cubría toda su hermosa cara y solo pude evitar pensar. Él es mío.

ESA boda ∞ VKooK (editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora