Extra Ī.- Edificio de Justicia

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Antes de iniciar:
Esta letra Narra Katniss.
Esta letra Narra Peeta.
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-Katniss detente.- La voz de mi hermana grita por décima vez.

Ahora opta por detener mis manos, que siguen subiendo para tocar el pelo de la parte trasera de mi cabeza.

-Vas a despeinarte- dice molesta.

-No lo haré, solo quiero sentir como ha quedado.

-Tendrás que confiar en mi. Tu pelo esta bien.

No me queda más que creerle. Dejo las manos quietas para que ella siga en su tarea. No entiendo qué puede tardar tanto, el peinado lo hizo mi madre, Prim solo esta "adornándolo".

La puerta se abre y mi madre entra.
Sonríe y los ojos le brillan mientras extiende la bolsa que trae en las manos.

Prim aplaude, en mi estómago crece una sensación de mariposas.

-Desata el nudo, lo has puesto ladeado.
-No es verdad así va.

-Fíjate en el reflejo-digo señalándo el espejo que tengo enfrente.

-Quítate— se ve en el—, demonios sí esta chueco.

Dejo de prestarle atención, me asomo por la ventana. Dos mesas recargadas en la parte trasera de la casa. Ambas tienen muchas cosas encima, listas para ser llevadas a donde sea que se nos asigne.

Meto la mano en un bolsillo de mi pantalón y siento la pequeña caja.

Una sonrisa cruza mi rostro.

-No llores- pido a mi madre que opta por ponerse de espaldas para que no la vea.

Veo por fin mi reflejo y las ganas de brincar, justo como lo esta haciendo mi hermana, aparecen. Como no puedo lo único que hago es reírme.

Río de felicidad. Mi madre se acerca ya sin ocultar sus lagrimas y junto a mi hermana me abrazan de cada lado.

-Vamos.

-¿Siguen con eso?- dice mi madre mirándonos reprobatoria.
-Mira lo que causas, la gente no ha dejado de tocar a la puerta para ver si es verdad. ¡Que vergüenza!.

-Si te ocasionaba tal vergüenza pudiste no entretenerte 1 hora con cada uno explicándoles los detalles de la reunión que se ha organizado- responde mi padre que iba saliendo de su cuarto ya cambiado.

Él me ve y sonríe. Estoy junto a mis hermanos, el mayor llegó hace un momento junto a su esposa e hijo.

Mi madre entro reclamando pero después de la respuesta de mi padre ella salió murmurando entre dientes. No hubo día que no se quejara de mi decisión pero de igual forma se ha cambiado y esta lista para acompañarme.

-Vayamos pues, es la hora- dice mi padre.

En otro momento, si lo pienso, esto me hubiese causado vergüenza, pero lo que ahora siento es emoción, orgullo.

La gente me observa mientras hacemos el recorrido para llegar, algunos me felicitan, yo solo sonrió.

Hazelle me dio la espalda cuando aparecí caminando frente a su casa, no me habla; pero Rory y Posy sí.

El camino es rápido, no se si sea debido a la emoción, a los nervios o que se yo.
Veo a lo lejos gente deambulando en los escalones de la entrada al edificio de justicia y un nudo se aprieta en mi estomago. Trato de encontrarlo entre la gente pero a esta distancia y con tantas personas me es imposible.

En El Camino (Katniss y Peeta si no hubiesen ido a los juegos) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora