45 | Felices vacaciones...
Me agarré a él en señal de protesta y alejándome de sus brazos, note sus ojos brillando sin necesidad, instándome a todo lo prohibido y lujurioso. Quizás mi deseo a negarme era lo que alteraba su excitación.
La respiración entrecortada de Justin era la única indicación de que esta situación no tenía control alguno. Y no parecía asustarme en lo absoluto.
Presionándome contra la puerta, se apretó contra mí añadiendo una nueva sensación: su boca en mis pezones. Me arquee hacia él, no solo deseosa de querer más sino por la electricidad que enviaba a todo mi cuerpo.
Comenzó una hábil succión, lametazo tras otro, mejor que el anterior.
— Justin... — protesté suavemente.
— Ponte en tu papel, pequeña — me advirtió, pellizcando levemente mis caderas.
— Si papi — gemí irritada de la situación.
Apretó mis nalgas en señal de aprobación. Un leve y tierno mordiscón me hicieron jadear y arañe sus hombros. Por primera vez sentía a mis pezones llenarse de sangre, hinchándose lentamente.
— Pero mira que lindo espectáculo. Listos y hermosos para papi — volvió a masajearlos.
Con la yema los retorció robándome un jadeo. Jamás los había sentido tan sensibles.
— ¿Ya estas mojada para mí? — me preguntó mientras rozaba su aliento contra mi abdomen.
— Si — respondí sintiendo mi labio inferior temblar.
Deslizo sus dedos por el valle de mi pechos hasta llegar a mi vientre, continuando por mi monte Venus y luego se sumergió en mi intimidad. Gemí contra su boca.
— ¿No te has divertido sin mí, no?
— No — tragué saliva, nerviosa. Pellizco levemente mi nalga — No papi, no lo hice.
Su pie frotó mi tobillo obligándome a abrir las piernas y lo hice, algo asustada. Arrastró sus dedos por mis hinchados y resbaladizos pliegues, jugueteando con la punta de su dedo pulgar. Esparció toda mi humedad por su dedos hasta llevárselos a la boca.
— Squisito il mio amore — pronunció en un fluido italiano contra mis labios.
Él parecía estar llevándome a un precipio, sin dejarme caer. Era asombroso. Sentía mis músculos duros pero suaves, por todos lados. Sus besos se volvieron lagos y con algún mordiscón en mis pechos.
Me llevaba a lo mas alto hasta que comencé a sentirme mareada, delirante de la tormentosa excitación. Notaba como el bulto detrás de su vaqueros crecía y mordí mis labios. Él estaba sufriendo.
— Espera, espera — lo detuve y me miro sorprendido — Si quieres hacerme disfrutar, debes hacerlo tu tambien.
— Disfrutaría comerme tu coño — sonrió ampliamente — Pero eso estoy reservándolo para un mejor momento.
— ¿Este no es un buen momento? — fruncí el ceño intentando tomar aire.
— Todo es un buen momento si estoy contigo o pensando en ti, que se vuelve las 24 horas de mi vida. Créeme que este es también un buen momento pero no se si confiar en el tiempo que tenemos.
Avanzó hacia mí para volver a deslizarse dentro de mi intimidad y frotar suavemente la palma de su mano dibujando tortuosos círculos. Cada aliento se volvía un jadeo mientras él soltaba pequeñas risitas en mi cuello y continuándome besandose.
Su bulto casi rozaba mi pierna y sentía pena por el monstruo, mientras explotaba de placer, él solo se estaba preocupando por mi.Cerré los ojos para no avergonzarme de decir lo siguiente;
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Vendetta {Justin Bieber + Español} #PGP2016
FanficBorra mi inocencia con tan solo una mirada. Desnúdame con el sabor de tus mentiras y ámame aun más en madrugadas. Él tenia un solo propósito en su vida; su banda de rock. Experto en jugar con las mujeres, se encontró fascinado por una. Cada beso si...