Princesa Nora

Capítulo 10

Estoy corriendo por las escaleras hacia mi cuarto. No me gusta la idea de ver a Roni moribundo. Mi corazón va a cien. Incluso llevo un bizcocho y un vaso de agua.

Llego a mi cuarto y abro la puerta de mi armario con la llave y... no hay nadie.

Me quedo sin palabras y entonces veo por la ventana a Roni tronchándose de risa en mi balcón.
Abro la ventana para que entre.

- Princesa, ¿Cuándo vas a ser consciente de que soy un ladrón?- mi cara es un poema -Ooh, gracias- me quita el pastel y lo muerde. Mira mi nuevo anillo.

-¿Estás comprometida? Claro, eso era lo que te preocupaba...- Roni coge mi mano y mira el anillo. Se me caen las lágrimas y no puedo evitarlo. Es verdad, estoy comprometida.

- Por desgracia soy una princesa rica y hoy... me han comprometido.

-¡¿Con quién?!

- Con un duque. Peter Abadie.

- Pero... si eres muy pequeña- Nunca he visto a Roni tan serio.

- No le amas, ¿Verdad?

-No. Es por vuestro bien. Soy la única hija del rey. Tengo que casarme con Peter y tener descendencia. Y me hubiese casado con un noble a quien amase.... si lo hubiera. Pero no lo hay. Ya he conocido a todos- mis lágrimas caen a borbotones delante de Roni. Estoy avergonzada pero ya no hay vuelta atrás.

- Nora... Estás demasiado triste- iba a preguntarle cómo sabía mi nombre, pero es un ladrón de verdad y... estoy demasiado triste.

Entonces me coge también la otra mano y las junta calentándolas con las suyas.

- No te preocupes, princesa, todo irá bien y yo te ayudaré en lo que pueda- Dios mío, Roni diciéndome ésto.

-¿Por qué lo haces?- me suelta las manos lentamente.

- Sólo tienes a tu padre y yo solo tengo a una persona también. Bueno, ahora también te tengo a tí.

- Oh...- Pienso en mi madre primero y luego en Roni ¿Ahora me tiene a mí? Es la primera vez que un plebeyo me dice algo así. Me sonrojo un poco por toda esa amabilidad.

- Pero ahora tienes que volver al baile muuy contenta, ¿Vale?

-Pero no te vayas. Espérame aquí.

- No me iré, princesa.

- Hasta luego, Roni.

- Hasta luego.