Me despierto y de repente recuerdo todo lo que pasó ayer. Parece como si me hubiese despertado de un sueño, pero está clarísimo que no lo fue porque se me están clavando los botones del vestido en la espalda. Es decir, que... he tenido una cita con Roni, he bailado con Roni,he cenado con Roni...¡Oh, Dios mío! ¡He tenido una cita con Roni! ¡Una princesa y un ladrón! No, no y no. No funcionaría ¿Verdad? Además, tengo que casarme con Peter ¿Dónde estará? Tengo que enamorarme de Peter, no de Ro-ni. Pero ya estoy enamorada de Roni ¿Una persona puede enamorarse de dos chicos? Da igual ¡A correr!
Así que me visto corriendo y bajo las escaleras buscando a Peter.
-¡Hola, Peter!- digo con una sonrisa.
-Hola, su alte... Nora- me contesta. Entonces me viene a la cabeza el dichoso "princesa"."Buenas noches, princesa", "no te preocupes, princesa", "a dormir princesa ", "princesa..."
- ¿Qué tal, Peter?- pongo una sonrisa nerviosa.
- Estoy bien, gracias- Claus me mira mientras desayuna extrañado por mi comportamiento.
- ¿Qué hay que preparar hoy de la boda? ¿Eh?
-El vals de los novios.
- Ah...- pienso en el baile de anoche, en el calor que sentí. De repente tengo frío- Tengo frío.
-Nora, no hace frío- me dice Claus con un tono desesperado.
-¿Estás enferma?- pregunta Peter.
-No, nononono ¿Cuál vals te gusta?
-¿A mí?- pregunta Peter. Asiento con la cabeza.
-No sé... Me gustan los antiguos- Me siento tan sola aquí... Por mucho que le pregunte a Peter jamás solucionaré nada. Es demasiado tarde. Ni siquiera quiero estar aquí. Corro hacia mi cuarto mientras me brotan las lágrimas.
Claus me ha seguido, así que le dejo pasar a mi cuarto.
- Nora ¿Qué te pasa?-
- ¡No puedo casarme con Peter!- digo mientras doy vueltas por mi cuarto.
- Creía que ya lo habías asumido.
- Sí, pero me he enamorado de otra persona. Oh, nonono, de otra persona- me llevo las manos a la cabeza.
- Pues le diremos a tu padre que cancele el compromiso.-Claus, no puedo casarme con la persona de la que me he enamorado. No es válido. Me he enamorado por fín, pero por fín no, porque no es válido.
-¿Está casado?
-¡No! ¡Es un plebeyo!
- ¡¿Qué?! ¿Y dónde te has enamorado de un plebeyo?
- Pues... aquí. Es que... es un ladrón.-¡¿QUÉ?! ¡Nora!
- Es que es muy amable a pesar de ser un ladrón. Y no sólo amable, es muchas más cosas. Es protector, cariñoso, espontáneo ¡Oh, Dios, no! ¡¿Por qué tiene que ser así?! Tratarme así.
- ¿Es el que robó en el baile?
-No, la autora del robo del baile fue su hermana, la chica con la que bailaste- Claus me abraza y de repente, veo una mano en la baranda del balcón.

ESTÁS LEYENDO
Princesa Nora
RomanceNora es una princesa del Renacimiento con una vida aburrida hasta que un ladrón irrumpe en su palacio y roba su tiara. Entretanto, su padre no tiene más remedio que prometerla con Peter, un distinguido duque guapo y educado que hace que los abanicos...