El Plan

Capítulo 88

Kate se despertó a eso de las cinco de la mañana después de haber dormido agitada durante unas pocas horas. Ella durmió profundamente y sin sueños por un tiempo después de que se durmió con los animales de peluche, pero luego se desperto sobresaltada por algo. Todavía estaba oscuro, así que sabía que no era hora de levantarse. Su reloj despertador dijo 03:11 am. Su primera inclinación, su primer pensamiento despierto fue preguntarse dónde estaba Rick, pero luego casi con la misma rapidez, recordó que estaba en su casa y que el estaba en su apartamento. Ya no vivían juntos. Y sorprendentemente, el pensamiento la llenó de algo de tristeza, como si algo no estuviera bien.

Pero entonces, aunque se durmió de nuevo, no fue lo mismo. Cuando se durmió la segunda vez, finalmente terminó soñando con el Marvin el peluche. Él le sonrió y ella estaba bailando en la arena con él, riendo y sonriendo. Rick estaba sentado en la silla de playa, observándola mientras bailaba, una sonrisa de aprecio en su rostro y una bebida afrutada con un paraguas en la mano. E incluso en su estado de sueño, sabía lo perfectamente ridículo que era: nunca sería sorprendida ni muerta bailando en la arena con un animal de peluche. Y si ella estaba bailando en la arena, entonces Rick maldito mejor estar bailando con ella! Pero porque era un sueño, ella estaba a lo largo de la carrera y realmente no podía hacer nada acerca de lo que su sueño-estado alter ego estaba haciendo, a pesar de lo estúpido que pueda haber sido.

Pero entonces ella abrazó a Marvin en su sueño, y todo fue al infierno de allí. Tan pronto como abrazó a Marvin, creció. Ella se apartó, y la sonrisa en su cara se puso un poco desquiciada. Y luego, mientras seguía creciendo, abrió la boca y se la tragó toda. Ella trató de luchar contra su salida, pero era como estar en una habitación acolchada de suave suavidad. Empezó a gritarle a Rick. Ella podía oírlo gritar, pero su voz sonaba apagada. Luego, mientras seguía tratando de luchar para salir, vio una mano que la alcanzaba. Sabía que era la mano de Rick, tratando de llegar hasta ella. Extendió la mano hacia ella, pero no pudo alcanzarla. Y mientras se esforzaba más, sus ojos se abrieron y ella se dio cuenta de que ya no estaba encerrada en una enorme y esponjosa concha de peluche, pero en realidad estaba en su propia cama, las mantas se retorcían a su alrededor.

Mientras miraba alrededor de la habitación, miró hacia abajo al verdadero y relleno Marvin que estaba sosteniendo, el de la adorable sonrisa torpe, pero el sueño volvió a ella en un instante y, con un grito, empujó a Marvin lejos de ella antes de que se convirtiera en trastorno también. Se acercó y bebió un poco de agua. ¡Dios, odiaba tener sueños extraños! ¿Una cáscara de concha psicopática, trastornada rellena, que espontáneamente se convirtió en un gigante come humanos? ¿Y por qué no pudo el estúpido sueño haber continuado el tiempo suficiente para que Rick pudiera salvarla, y lo último que recordaba era algo agradable? Oh, ella esperaba que la psicóloga departamental nunca obtuviera ese sueño o seguro que pasaría algún tiempo en el trabajo de escritorio

Finalmente se volvió a dormir, pero sólo después de asegurarse de que el Marvin relleno acabase en el cajón de su mesita de noche. Trató de ponerlo fuera del alcance de su cama, pero sus ojos seguían abiertos y lo encontraba mirándola fijamente. Así que lo puso en el cajón. Y entonces cerró con llave el cajón. Y mientras lo hacía, se sentía tonta. Mientras dejaba vagar su mente, se preguntó cómo sería la cama de su loft. Conociéndolo, y el tipo de persona que era, se dio cuenta de que su cama era probablemente enorme, y era muy probablemente una de las piezas más cómodas de muebles de dormitorio que existía en la faz del planeta. Y sabía que se sentiría aún mejor con Rick junto a ella, especialmente ahora que sabía lo que sentía después de la última semana. Bueno, a menos que él la babeara; que no era una sensación terriblemente agradable para despertar. Podría vivir sin la baba. Pero al imaginarse la comodidad potencial de la cama de Rick y estar junto a él de nuevo, y sabiendo que su desquiciado Marvin estaba encerrado en el cajón, finalmente pudo quedarse dormida. Y deseó todo el tiempo que Rick estuviera allí junto a ella.

Se despertó brevemente unas cuantas veces más, pero estaba tan agotada que se las arregló para volver a dormir con relativa facilidad. Finalmente, cuando despertó la última vez a las cinco de la madrugada, supo que el sueño se hacía por la noche porque su mente ya estaba despierta y girando, y era mejor que se levantara y fuera a la comisaria. Con suerte, Lanie llegaría temprano y tendría la oportunidad de hablar con ella. Y era hora de volver al trabajo. Al mundo real.

.

oooooooooooooooooooo 

.
En una parte diferente de la ciudad, Rick tenía sus propios problemas para dormir. La diferencia era que sabía desde el principio que sería diferente dormir -o tratar de dormir- sin su Kate a su lado. Sólo pensaba en las últimas dos semanas, cómo sus sentimientos habían cambiado tan dramáticamente. No, eso no era cierto. Sus sentimientos no cambiaron en absoluto. Sentimientos tan profundos no podrían desarrollarse en el lapso de dos semanas. Los sentimientos habían estado allí todo el tiempo, y la cercanía y varios eventos al azar finalmente los obligó a reconocer esos sentimientos. Y una vez que lo hicieron, todo acabó por convertirse en bolas de nieve. Y ahora que estaba en casa, y ella estaba en casa, y esos "hogares" no eran la misma casa, parecía que le faltaba algo.

Sabía que le faltaba algo. Perder una parte de sí mismo. Extrañándola. No habían discutido realmente cómo las cosas serían diferentes cuando llegaran a casa. Bueno, tenían, pero no mucho más allá del punto de que se verían más frecuentemente fuera de la estación. Estaba tan decidida a pensar en cosas ya preocuparse por ellas, y había tratado de calmarla por menospreciar las cosas. No quería sentarse allí y diseccionar cada minuto aspecto de cómo las cosas serían cuando llegaron a casa, cuando aún tenían tiempo de vacaciones a disfrutar. Y básicamente, eso estaba bien. Pero ahora, cuando se acostó en su cama, se dio cuenta de que había una forma en que quería que las cosas fueran diferentes ahora mismo.

La quería con él. No debería estar en una parte diferente de la ciudad, en una cama diferente. Tenía el anillo, y estaba seguro de que eventualmente la usaría y pronunciaría esa pequeña palabra de dos letras que comenzaba con una "S". Dijo que no la presionaría por un compromiso "oficial", y lo decía en serio. Pero mientras tanto, en este momento, no había razón para que no pudieran dar otro paso. Ya lo habían tomado durante la semana pasada; esto simplemente sería ... extendiendo las cosas. Esperemos que permanentemente. Necesitaba que se mudase al loft. Necesitaba que estubiera con él, con ellos. Y tenía que suceder pronto. Y mañana, iba a hacer algo al respecto.

Si vivía con él, estaría aquí ahora, y probablemente ambos estarían durmiendo, abrazados juntos, en lugar de estar fríos y solos y simplemente tratando de irse a dormir. Podrían despertar por la mañana juntos, compartir un beso perezoso de buenos días. Tal vez más, pensó con una sonrisa. O tal vez no; eso no importaba Estar juntos ... eso es lo que importaba. Y no estaban juntos si estaban separados. Y en ese pensamiento, se volvió los ojos hacia sí mismo, porque incluso tener un pensamiento tan elocuente como que, él sabía que debe estar cansado. Sabía que tenía que tratar de dormir un poco.

Y así se juró a sí mismo que mañana por la noche, no se quedaría dormido solo. De un modo u otro, tendría a Kate a su lado, en sus brazos. A él no le importaba dónde estaba ... su lugar, mientras estuvieran juntos. Así que sacó su teléfono y le envió un mensaje. - Mañana por la noche, Loft, toda la noche, juntos, sin argumentos. No esperaba una respuesta; esperaba que ya estaba durmiendo. Podía ver el mensaje cuando despertó. Se tiró y se volvió un poco más, finalmente, apilando algunas almohadas a ambos lados de él para que la cama no parecía tan grande ... y vacío. Y finalmente se quedó dormido, pero se quedó dormido abrazando una almohada con fuerza, tratando de usar su vívida imaginación para convencerse, al menos por esta noche, de que era Kate.