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CAPITULO 22: REENCUENTRO

Eli se quedó mirando la gran pared que tenía ante sus narices. Casi lo habían conseguido.
- ¡Eli, rápido, Eli, no nos podemos rendir ahora!- animaba Keira. Eli la miró, de pronto pensó en la situación, los lobos estaban cerca, corrían peligro.
- Sígueme, esta vez lo conseguiremos- dijo Eli convencida. Puso la mano en la pared derecha, y las dos comenzaron a correr. Pasado muchos pasadizos, un aullido sonó, los lobos estaban cerca.
- Nos alcanzarán- advirtió preocupada Keira.
-!Eres una pesimista!- exclamó Eli furiosa. Su amiga le lanzo un beso. Las dos pararon de correr, aún no habían encontrado la salida. No pararon de correr. Los gritos de sus amigos sonaban, cada vez más fuerte. Llegaron otra vez al ultimo pasadizo, sus amigos estaban en la entrada. Eli corrió con todas sus fuerzas, ya llegaron. Jana le dio un fuerte abrazo.

-Menos mal que estas bien, sino no se lo que hubiera hecho- le susurro al oído, Jana.

-¡Corre Keira, corre!- ella aun no había llegado, estaba agotada. Los lobos aparecieron, no pararon de correr. Keira ya había llegado, pero ahora el problema eran los lobos ya estaban llegando. Todos sacaron sus armas, listos para luchar. Eran tres lobos. Keira y Jordan comenzaron a luchar contra uno, no se les daba nada mal, pensó Eli. Thomas y Erik luchaban contra otro lobo , aunque a estos no se les daba tan bien. Eli esta asustada, su amiga y ella también luchaban. Todos luchaban, estaban muy cansados para seguir. Eli y Jana se tropezaron, el lobo salto para atacarlas, cuando de pronto un cuchillo impacto en una pata de este. Por la salida del laberinto aparecieron sus padres, corrían, listos para luchar. La madre de Jana y la de Eli se juntaron con ellas y lucharon contra el lobo. Cada adolescente luchaba junto a su padre, menos Thomas, que luchaba con el presidente. Cuando todos mataron a los lobos se dieron unos fuertes abrazos.  
- ¿Cómo nos habéis encontrado?- preguntó Keira conmocionada.
- Bueno, nosotros ya sabíamos lo del laberinto, y suponíamos que vosotros lo descubriríais- explicó Katherine,  la madre de Eli. Después de un rato, y todos puestos en situación,  el padre de Eli explicó:
- En el laboratorio de debajo de casa de Katherine, hay unos tubos, esos tubos son la cura contra el virus "zombi". Aunque no es seguro que funcione.
- Yo me los lleve, y...- Eli no pudo acabar, no se acordaba. Todo el mundo estaba callado, hasta que Erik solto:
- Me los diste a mi, pero los dejé, pesaban mucho- intentó excusarse avergonzado.
- No pasa nada, no hay que rendirse, tenemos que ir al buscarlos- dijo la madre de Jana.
-¡Hay que intentarlo!- exclamó Jordan. Todos gritaron alegres. Todos comenzaron a correr por el laberinto. Esta vez Eli no tenía miedo. Por primera vez en mucho tiempo se sintió a gusto,  miró a los lados y vio a todos sus amigos, familiares juntos. Llegaron a la plaza. Eli notó que faltaba alguien, su padre. De pronto la plaza entera empezó a temblar. Una gigantesca grieta apareció en medio de la plaza, dividiendo al grupo. En el lado para el laboratorio estaba el padre de Keira, Keira, Erik y Thomas. Y en el otro lado estaban Jana, Eli y sus madres, Jordan y la madre se Erik. Ahora estaban divididos, y no podían cruzar al otro lado.