"My destiny"

Capitulo: 3

Pasaron un par de días. Una tarde, cuando regresaba a casa de una de sus clases particulares sonó su celular. Diana contestó mientras sacaba las llaves para entrar al departamento. Al otro lado escuchó una voz muy grave que dijo su nombre. Ella contestó: “Si, ella habla. En qué le puedo ayudar?”. La chica pensó que era alguien que necesitaba clases particulares. El señor se identificó, para luego mencionarle que la estaba llamando por su postulación a una agencia. Además le consultó si podía presentarse en una hora a una entrevista. La chica se sorprendió un poco pero aceptó. Esa hora fue de locura. Diana se bañó rápidamente, se secó el cabello e intentó recogerlo en un moño ordenado. Buscó alguna ropa que sirviera para la ocasión. Esto le tomó un poco de tiempo ya que no estaba entre sus planes ir a una entrevista, por lo cual no tenía nada listo. Optó por usar unos pantalones rectos negros y un suéter anaranjado de cashemira. Buscó su abrigo negro con piel y un pañuelo en los tonos del suéter para el cuello. Combinó unas botas de cuero marrón con un maletín en el mismo tono, en donde llevó toda su documentación de estudio y experiencia profesional.

Llegó a la hora exacta, eran las 5 de la tarde y Diana se encontraba de pie al frente de un inmenso edificio de vidrio. Estaba nerviosa, le sudaban mucho las manos. Decidió ocultar su nerviosismo, como siempre lo había hecho en situaciones como esa. Sonrío, se paró bien derecha, respiró profundo y entró al edificio con paso firme. Era su natural mecanismo de defensa para ocultar sus miedos. A la entrada, un guardia de inmediato la detuvo. La chica le explicó la razón por la cual estaba allí. El guardia la condujo donde había una recepcionista, quien le entregó una tarjeta de visita y le dio las indicaciones del lugar donde la estarían esperando. Caminó por un largo ey estrecho pasillo, hasta llegar a una sala muy amplia. La sorpresa de Diana fue tal cuando vio a alrededor de 20 chicas más esperando para la entrevista. Se molestó un poco porque ya sabía que debía esperar toda la tarde. Dudó un momento si permanecer ahí o devolverse a su casa. Pero finalmente decidió quedarse, al fin de cuentas ya estaba ahí y no tenía planes para la tarde.

Pasaron cerca de 2 horas. Diana ya comenzaba a cabecear. Estaba aburrida y con un poco de hambre. Cuando de pronto escuchó su nombre. Se puso de pie rápidamente y vio frente a ella una señorita quien le hizo un gesto para que la siguiera. La chica lo hizo. Entró a una oficina muy moderna donde había sentado un señor de regular edad quien le dio la bienvenida cordial pero fríamente. Le pidió tomar asiento. Estuvo con él cerca de 30 minutos. Hablaron de muchas cosas. Diana le contó de su anterior trabajo, de su experiencia profesional y de sus estudios actuales. Ella percibió que el señor estaba muy entusiasmado con lo que le contaba. Finalmente, él le preguntó por el grupo musical que él representaba, SS501. Diana fue sincera y le comentó que no los conocía, que ella llevaba un poco más de un mes en dicho país. El señor se extrañó que la chica no los conociera debido a que ellos eran ídolos en Corea y su rostro cambió, ya no se veía tan interesado. Él le contó un poco sobre la trayectoria de los chicos y en qué se necesitaría su apoyo, en caso que ella fuera la seleccionada.

Al fin había terminado la entrevista. Diana estaba exhausta y un poco desanimada, pensó que por no conocer a los SS501, pocas serían sus posibilidades de ser la elegida, aunque se conformó a sí misma meditando en que había sido honesta. Ya era de noche, por lo que tomó un taxi para llegar a su casa. Ya adentro, comió un bocadillo y se fue a dormir.

Diana llegó temprano a la universidad al día siguiente, tenía que entregar el informe tan importante que había redactado. La chica se encontró con Margarita y Lucía, quienes también habían preparado sus informes. Comenzó la clase, cada alumno debía presentarlo en no más de 20 minutos. La presentación de Diana fue impecable. De hecho, el profesor la felicitó. A Lucía y Margarita también les fue bastante bien. Fue una mañana muy estresante ya que todos los alumnos estaban muy nerviosos por las presentaciones. Al fin llegó la hora de almuerzo y las muchachas decidieron ir a comer juntas a un centro comercial cercano para celebrar que todo había salido bien con sus informes.

Estaban en la mitad del almuerzo cuando el celular de Diana sonó. La chica contestó. Margarita y Lucía veían que ella estaba muy sorprendida. Apenas colgó le preguntaron de qué se trataba. Diana, les contó que había aplicado para el trabajo que le había recomendado Margarita y que era la seleccionada, que el día lunes debía presentarse a las 13:30 hrs. para comenzar. Lucía la felicitó y Margarita no podía dejar de brincar y abrazarla. Parecía la más emocionada de las tres.

El fin de semana pasó rápido. Diana aprovechó el tiempo libre para ir a un centro comercial y comprar un poco de ropa nueva, más ejecutiva de lo que había llevado. Además, como ella era muy estudiosa, buscó en internet todo sobre los SS501. Intentó memorizarse los nombres de los chicos, sus rostros, sus trayectorias, etc. Estudió sobre ellos todo el día domingo.

Y el día lunes llegó. Tomó un taxi desde la universidad a la agencia, quedaba a unos 5 minutos. Nuevamente se encontró frente a ese imponente edificio. Pero ahora la acogida fue distinta. El guardia la saludó y la hizo pasar de inmediato. La chica recepcionista fue muy amable con ella y la llevó a la oficina de su nuevo jefe, quien la hizo pasar amablemente, mucho más amable que la última vez. Le comentó que había quedado muy impresionado por su CV y por su manejo de los idiomas. Que necesitarían el español porque ese era el nuevo mercado donde querían ingresar. Que le parecía mejor que no conociera al grupo ya que tendría una mirada mucho más objetiva al respecto. Le contó de sus horarios de trabajo, que serían de lunes a viernes a partir de las 13:30 hrs. y el horario de salida dependía del trabajo pendiente. Podía si bien desocuparse a las 16 hrs. o las 22 hrs. y que sólo en ocasiones especiales tendría que trabajar los fines de semana. Le comentó los puntos en que necesitaría su colaboración. Además, le pidió apoyo especialmente con uno de los 5 chicos, ya que él era el líder del grupo y generalmente lo solicitaban más que al resto, por lo que necesitaría que coordinara especialmente temas relacionados con él. En la tarde vendrían los chicos a practicar y es que la sala de ensayos de baile estaba en el 3er piso. En esa ocasión se los presentaría. Luego la llevó a la oficina que ella ocuparía. Era amplia y muy soleada. Ahí también habían tres chicas con respectivos escritorios. Ellas también cumplían labores administrativas en la agencia. 

Diana se sentía feliz. Tomó la lista de actividades que su nuevo jefe le había pedido y trabajó en ello toda la tarde. Era lo que ella sabía hacer y muy bien. La tarde pasó volando. De pronto llegó el jefe y le pidió venir con él a la sala de reuniones para conocer a los SS501.

Entró con su jefe a una sala muy amplia que tenía una mesa grande para reuniones en un lado y en el otro una sala de estar. Le pidió sentarse en la sala de estar para que fuera más informal ya que a los chicos no les gustaba tanto la formalidad. Conversaron un rato hasta que se abrió la puerta. Entraron 5 jovencitos muy altos y delgados. Todos bastante bien parecidos. La saludaron con una venia y tomaron asiento alrededor de ellos en los sillones. El jefe le pidió a la recepcionista traer té. Quien llegó de inmediato con el requerimiento y les sirvió a todos. Los chicos se presentaron. El primero fue Park Jung Min, a Diana le pareció muy hablador y bromista. Alguien muy cercano y cálido. Luego le siguió Kim Hyung Jun, quien era un chico muy coqueto y un excelente orador. Después habló Heo Young Saeng, un tipo bastante estiloso y al parecer muy sensible, le pareció alguien muy confiable. Le siguió Kim Kyu Jong, un muchacho bastante introvertido pero muy inteligente y profundo. El último fue Kim Hyun Joong, quien fue el único quien no miró a Diana a los ojos en ningún momento. A Diana le pareció alguien un poco indiferente pero triste. Eso sí, hubo algo que le llamó mucho la atención del chico, fueron sus labios, eran realmente bellos. De pronto, el jefe se puso de pie. Dijo que los dejaría solos un rato para que conversaran y se conocieran un poco más. 

Diana no estaba incomoda, a pesar de estar sola con 5 chicos famosos. Ella sabía cómo mantener siempre la compostura y ser cordial, aunque un poco fría. Los chicos fueron muy amables con ella, especialmente Hyung Jun quien le coqueteaba abiertamente a Diana todo el rato. De pronto sonó la puerta y entró una chica bajita y delgada, con el pelo lacio hasta la cintura. Se veía muy maquillada y vestía ropa un tanto excéntrica pero carísima. Llevaba un suéter rojo cortito, el cual dejaba ver un muy tonificado abdomen, y una falta negra muy corta. Tenía media negras y botas negras con grandes tacones. Llevaba un bolso rojo también que combinaba perfectamente con una boina del mismo color. Al entrar a la habitación no saludó a nadie, fue directamente donde Hyun Joong y le dijo: “A qué hora te vas a desocupar para que vamos a cenar, oppa?”, y seguidamente hizo intención de besarlo en la boca mientras se sentaba muy cerca de él, cosa que el chico repelió sosteniéndola abruptamente. La chica era Song Min Ki, la novia de Hyun Joong. Él bruscamente respondió: “Qué haces aquí? No ves que estoy ocupado? Vete y hablamos más rato. Min Ki contestó: “ Bueno, me llamas cuando te desocupes, te parece?”. Él asintió con un movimiento de cabeza, sin siquiera mirarla.