"My destiny"

Capitulo: 52

Diana entró de prisa a la agencia, no quería que nadie reparara en su rostro. En el pasillo estaba Dong Wook, quien notó algo extraño en la chica pero sólo se quedó observándola. Esperó que entrara a su oficina y luego la siguió. 

Diana dejó su bolso sobre el escritorio y se acercó a la ventana a mirar la calle. Se sentía muy triste por haber terminado con Hyun Joong pero sabía que era lo que él estaba buscando, ni siquiera había intentado impedirlo. Estaba segura de que esa era la opción correcta pero le desgarraba el alma. Sin desearlo se le arrancaron unas lágrimas de sus ojos, aunque intentó contenerlo velozamente. De pronto, sintió que alguien tocaba a la puerta y se limpió rápidamente el rostro.

“Adelante!”, gritó sin mucho ánimo. En eso, vio a Dong Wook aparecer por la puerta tímidamente. “Puedo pasar?”, preguntó el muchacho. “Si, claro! Toma asiento.”, lo invitó ella intentando parecer que nada ocurría. Dong Wook no se sentó. Se fue directo a donde estaba ella de pie al lado de la ventana, la miró fijamente con cara de preocupación. “Te pasa algo, verdad?”, dijo de pronto muy seguro de sus palabras. “No… es sólo…”, intentó argumentar ella pero su voz no sonó convincente, por lo que el chico la interrumpió. “Diana, no me mientas. Somos amigos y ya te conozco. Tu rostro habla por si sólo… Estuviste llorando, verdad?”, continuó él severamente. Diana le devolvió la mirada y en ese momento sintió que su mundo se derrumbaba, había intentado conservar la calma y no profundizar en lo que había recién ocurrido, pero ya no podía seguir haciéndolo. Las lágrimas comenzaron a brotar solas de sus ojos, una tras otra. No paraban de salir aunque ella no lo quisiera así. Se sentía vulnerable y débil. 

“Ven acá, pequeña!”, dijo Dong Wook mientras la acogía en sus brazos. La chica hundió su cabeza en el pecho del muchacho sin decir una palabra y se rindió al llanto, mientras él le acariciaba el cabello delicadamente. “Llora! No debes guardarte las cosas dentro, eso hace mal… Y se que tu estás acostumbrada a hacerlo. Desahógate, mi pequeña! continuó el dulcemente. Así se quedaron hasta que poco a poco, Diana comenzó a calmarse y dejó de llorar. De pronto, Dong Wook se echó hacía atrás para soltarse un poco de ella y acercó el brazo al escritorio, donde había una caja de pañuelos desechables. Sacó uno y comenzó a limpiarle las mejillas a Diana suavemente. Ella sólo lo observó en silencio. Él le sonrió bondadosamente, la tomó de la mano y la llevó al sofá para sentarse ahí los dos. “Pequeña, no hay nada en este mundo que no tenga solución… Nada, excepto la muerte. Y ese no es el caso!”, añadió él. “Es que creo que yo morí hoy… Hyun Joong y yo terminamos. Ya no nos casaremos!”, argumentó Diana con desesperación. “No quiero entrometerme, pero… no entiendo por qué terminaron. La última vez que los ví antes de que viajáramos se veían tan entusiasmados con los preparativos… sobre todo Hyun Joong. Qué tan grave puede haber ocurrido esta semana?”, preguntó él sin entender. “Ese es el problema, Dong Wook! No tengo idea!... Le he preguntado de todas las formas posibles qué le sucede pero insiste en que nada… Desde que volvimos de Japón es otra persona… Ya no me besa, ya no me abraza, ya no me acaricia, ya nada…”, explicó Diana acongojada. “Lo que dices es extraño, muy extraño… Y qué tal si yo hablo con él y le preguntó? Quizás podemos arreglar las cosas.”, agregó ilusionado Dong Wook. “No, esto ya no tiene solución. Hoy lo encaré de nuevo para preguntarle qué le sucedía, me dijo que quería aplazar el matrimonio, que quería irse al ejército lo antes posible… Te das cuenta de lo que eso significa? Que si siguiéramos juntos no nos volveríamos a ver dentro de 2 años… No parece que se quisiera escapar de mi?”, preguntó Diana. “Ahora que me lo explicas así… pues sí. Pareciera como que quisiera escapar de algo. Pero insisto, se veía tan ilusionado con todo lo del matrimonio el otro día, que me parece increíble! La verdad es que como ya te había comentado, yo conozco a Hyun Joong desde hace mucho tiempo, si bien nunca hemos sido amigos cercanos, si conocidos y tenemos una buena relación pero yo nunca lo había visto tan enamorado como lo había visto contigo… Talvés sería prudente esperar un poco y…”, argumentó el muchacho hasta que Diana lo interrumpió bruscamente. “No! Ya no hay nada que esperar. Él ya no se quiere casar conmigo y yo no lo voy a obligar. Se perfectamente cuando es momento de dar un paso al costado. Si él aún quisiera casarse conmigo me habría detenido hoy cuando le dije que terminaba con él y ya no habría matrimonio.”, agregó la chica desesperanzada. “Y… qué hizo él cuando tú le dijiste todo eso?”, preguntó Dong Wook. “Nada… Se quedó en silencio observando. No dijo nada…”, agregó finalmente Diana. Dong Wook la observó en silencio, no podía rebatirle eso. Ya que ambos sabían de que efectivamente si Hyun Joong no hubiera querido evitar el matrimonio la hubiera detenido. El silencio se hizo algo incómodo. “Bueno… pero tú eres una chica fuerte y muy inteligente. Si ya tomaste esa decisión yo te ayudaré y te apoyaré en todo! Cuando me necesites, sólo llámame!”, añadió repentinamente el muchacho y le sonrió dulcemente mientras tomaba una mano de la chica. “Gracias! No sabes cuánto necesitaba tus palabras y tu consuelo… Y ahora, el show debe continuar!”, dijo ella intentando devolverle una sonrisa y poniéndose de pie. Él la imitó. “Si! Me voy a arreglar… en un par de horas ya debemos partir a la estación televisiva… Y ánimo! No sabes cuanto te admiro… Eres la chica más valiente que jamás he conocido! Te quiero mucho!”, terminó diciendo el chico y le dio un fuerte abrazo. Después de eso se retiró.

Dong Wook se fue a la sala de ensayo, tenía clases de vocalización hasta el mediodía, en donde se iría junto con Diana y los SS501 a la estación televisiva. Él presentaría 2 canciones como parte del relanzamiento de su carrera al principio del programa especial de SS501 que se transmitiría, en el cuál los chicos cantarían todos sus éxitos, además de entrevistas, juegos y concursos interactivos con el público. 

Después de finalizar el ensayo, Dong Wook se fue a la cafetería, almorzaría allí antes de irse con los demás al show. Cuando iba entrando, notó que Hyun Joong estaba sentado sólo en una mesa cerca de la ventana, bebiendo un café. No lo dudó y se acercó a hacerle compañía. “Hola! Te puedo acompañar o esperas a Diana?”, preguntó el chico intentando probar a Hyun Joong. “No! No espero a nadie.”, respondió serio Hyun Joong. “Estás bebiendo café? No que no bebías café, sólo té?”, preguntó de pronto Dong Wook. Hyun Joong se sorprendió con la pregunta y lo miró a los ojos. Se acababa de dar cuenta que estaba bebiendo café. “Es cierto! Bebo café sólo cuando estoy preocupado!”, respondió el chico volviendo a mirar por la ventana. Dong Wook se quedó en silencio por unos minutos.

“Te sientes bien?”, preguntó Dong Wook de pronto. Hyun Joong continuó con la vista perdida en la ventana. “La verdad… No! Estoy pésimo!... Mi vida se acabó hoy, no se cómo voy a seguir mañana. La verdad, no tengo idea.”, respondió resignado el chico. Sus ojos comenzaron a entristecerse cada vez más. En ese momento miró a Dong Wook a los ojos. “Te puedo pedir un favor?”, preguntó suavemente Hyun Joong. “Claro, hermano dime! Si yo puedo hacer algo por ti, sólo dímelo!”, respondió el muchacho. “Cuida a Diana por mí! Haz que se enamore de ti y házla feliz! Dale todo lo que yo no voy a poder darle…”, añadió Hyun Joong hasta que su voz se quebró y un par de lágrimas se deslizaron por sus mejillas, pero él rápido las detuvo con sus dedos. “Tú eres un buen tipo y se que sientes algo por Diana… reconozco esa mirada, es la misma que yo tenía cuando la conocí! Harías eso por mí?”, continuó diciendo amargamente el líder. “Pero… Hyun Joong, estás loco? Qué sucedió? Cómo me pides algo así? Yo…”, argumentó absolutamente desencajado Dong Wook. “Ya no nos casaremos… Se acabó todo entre nosotros dos! Pero… yo quiero que ella sea feliz, no quiero que sufra.”, respondió Hyun Joong. “Pero cómo que no quieres que sufra? Entonces… por qué ya no se van a casar? Si quieres que ella sea feliz, lucha por ella y házla feliz! Qué puede ser tan grave para echar todo por la borda?!”, insistió el muchacho. “Puedo confiar en ti?”, preguntó Hyun Joong. Dong Wook sólo asintió con la cabeza. “Haber dejado embarazada a otra chica… eso es tan grave!”, respondió avergonzado Hyun Joong. Dong Wook abrió sus ojos de par en par y se quedó mudo. “Ella no lo sabe… Si, dime que soy un cobarde! Si lo soy, pero… no me atrevo a decírselo. No quiero verla sufrir!”, continuó el chico. “Pero… en algún momento se va a enterar y será peor no saberlo de ti mismo… Va a sufrir mucho más! Cómo no te das cuenta!”, respondió Dong Wook, quien había salido un poco de su asombro pero se veía muy molesto. “Estos últimos días he sido frío con ella, es cierto… No sabes como deseo tomarla entre mis brazos y… y hacerla mía nuevamente, pero mi conciencia no me lo permite… No puedo! Quizás es lo mejor! Así ella se desilusiona de mí y cuando se entere, ya no le dolerá tanto… Por eso he hecho las cosas así.”, intentó excusarse el muchacho. “Pero… te metiste con otra chica cuando ya estabas con Diana?”, preguntó inquieto Dong Wook. “No!! Desde que conocí a Diana, no ha habido otra mujer para mí! Es mi ex novia.”, respondió Hyun Joong. “Pero… entonces las cosas podrían tener solución…”, intentó buscar una solución Dong Wook. “No! Diana no lo aceptaría… Yo la conozco. Además no sería de un hombre dejar a su hijo que se críe a la deriva. Ya tomé una decisión. Me casaré con mi ex novia para que ese niño, mi hijo, tenga todo lo que necesite. Pero, me iré al ejército ahora, así puedo pensar bien las cosas. Podré madurar más y tendré dos años para olvidar al único amor de mi vida…”, dijo entristecido Hyun Joong. “Por eso te pido que cuides de Diana. Yo quiero que sea feliz y siento que quizás tú eres el indicado…”, continuó argumentando Hyun Joong. “Eso no te lo puedo prometer… El amor es algo que no se manda. Ella te ama a ti y por más de que a mi me encantaría que ella llegara a sentir algún día siquiera la mitad de lo que siente por ti… Eso sólo el destino lo sabe!”, añadió tristemente Dong Wook. En ese momento vieron aparecer al jefe, quien venía directo a ellos. “Chicos! Apúrense que en 1 hora nos vamos! Si no han comido, háganlo ahora mismo!”, dijo el jefe. “Tiene un minuto? Necesito hablar algo muy importante con Ud.”, dijo Hyun Joong. “Si, vamos!”, respondió el hombre. “Hyun Joong, espera!”, dijo de pronto Dong Wook. El chico volteó y lo miró mientras el jefe se adelantaba. “Ahora, te puedo pedir yo un favor?”, Hyun Joong lo miró intrigado. “Habla hoy con Diana y cuéntale toda la verdad. Si la amas tanto como dices, que se entere por ti.”, terminó diciendo el chico. “Ok, te lo prometo. Hoy hablaré con ella.”, terminó diciendo y se retiró. Dong Wook se quedó sólo en la cafetería.