“Hola! Te puedo acompañar?”, dijo dulcemente la chica con una sonrisa en los labios. “Claro! Toma asiento.”, respondió él intentando ser cordial. No tenía muchos ánimos de hablar con Min Ki. Sabía que lo interrogaría por lo del rumor de su nueva novia. “Hace tiempo que no te veía. Extrañaba mucho lo bien que lo pasamos juntos durante la gira.”, añadió ella mirándolo con ojos melancólicos. “Ah, si.”, respondió él un tanto frío. “Podría pasar uno de estos días por tu casa y quizás vemos una película y conversamos un rato… Qué te parece?”, preguntó Min Ki ilusionada. “No!! O sea… No puedo, es que… estos días estaré muy ocupado… Si, si… Tengo muchos compromisos.”, se excusó el chico. “Es por lo de tu nueva novia, verdad?”, preguntó tristemente Min Ki. “Mira, Min Ki… Verás, yo estoy saliendo con una chica… y…”, respondió un poco turbado Hyun Joong, no quería lastimarla, al fin y al cabo algo de esperanzas le había dado durante el último tiempo. “Lo entiendo, pero… Te lo estoy diciendo sólo como una amiga.”, agregó ella cordialmente. “Ah, si. Pues quien sabe… Si nos podríamos juntar uno de estos días, quizás.”, dijo Hyun Joong un poco confundido aún. Min Ki sólo sonrió. Notó la incomodidad del muchacho. En eso, ambos notaron que Yang Mi venía acercándose con una amplia sonrisa en los labios. Hyun Joong se puso de inmediato de pie. “Nos vamos?”, preguntó Yang Mi. “Si, por supuesto. Nos vemos, Min Ki! Hasta luego!”, añadió finalmente el muchacho y seguidamente hizo una venia para luego retirarse con Yang Mi. Min Ki se quedó mirándolos a lo lejos, no podía entender por qué los dos se iban juntos, si sabía perfectamente que el chico no soportaba a la asistente.
Al llegar al auto, le abrió educadamente la puerta de este para que Yang Mi se sentara. Ella se acomodó dentro del auto. La chica no podía borrar la sonrisa de los labios. El muchacho, antes de subir al auto, sacó su teléfono y llamó a Diana. “Hola! No puedo hablar más en este momento pero… tengo que hacer unos trámites más para tener resultados… Si, es sobre eso mismo. En cuanto me desocupe de eso me voy a casa… OK! Bye!”, dijo escuetamente y luego cortó el teléfono. De inmediato se subió al auto.
Yang Mi vivía lejos de la agencia, por lo que tardaron cerca de 40 minutos en llegar a su apartamento. Hyun Joong estaba un poco cansado pero eso no le interesaba con tal de alcanzar su objetivo. Veía a Diana aburrida con la situación. Evidentemente la chica era de una personalidad que no le gustaba estar encerrada en un solo lugar y eso era lo que había hecho por casi dos semanas, se sentía una prófuga de la justicia. Hyun Joong sabía que la muchacha necesitaba caminar libremente por las calles, volver a trabajar y ocuparse en algo, es por eso que haría hasta lo imposible por devolverle su tranquilidad.
Al llegar, Yang Mi lo hizo pasara y le ofreció tomar asiento. Él obedeció en silencio mientras observaba el lugar. El apartamento era pequeño pero acogedor. Todo era de tonos marfil, desde las paredes hasta los sofás. La muchacha al entrar dejó su maletín sobre la mesa de centro y se excusó para pasar al tocador. Mientras él estaba sólo sentado en el sofá, su teléfono comenzó a sonar. Miró la pantalla de su teléfono y en el visor distinguió el nombre de su amigo Ji Heon. De inmediato contestó: “Hola! Que bueno tener noticias tuyas! Qué? Qué conseguiste la IP?... Genial!.... Ah, espera! Y… me la podrías dar ahora, es sólo que tengo una intuición!... Si, claro, por aquí tengo un lápiz!... Si, dime que yo apunto…. OK, mil gracias, amigo!!! Ah! A propósito, tú podrías averiguar algo si te doy un nombre, es que tengo algunas sospechas… Si, es Shin Yang Mi … Ok, Ok… Gracias! Hablamos luego! Adios!”, dijo Hyun Joong y luego guardó nuevamente su móvil.
En eso apareció nuevamente Yang Mi. “Te escuché hablar por teléfono… Era de la agencia?”, preguntó la muchacha. “Emmm… No, era… un amigo.”, respondió con evasivas el chico. “Ah!... Tomarías un té conmigo, no me demoro nada en prepararlo.”, ofreció dulcemente ella. “Mmmm… Bueno, pero… mientras tanto me prestarías tu laptop? Es que mi amigo me enviaría unos documentos urgentes por correo y necesito verlos.”, argumentó astutamente el líder. “Claro!”, contestó la chica mientras lo sacaba del bolso, lo encendíadía y se lo pasaba a Hyun Joong. Después de esto se metió en la cocina y despareció por unos minutos.
El chico aprovechó ese instante para buscar la IP del laptop. Afortunadamente logró hacerlo y comenzó a compararlo con la secuencia de números que hace unos pocos instantes su amigo le había dictado.
Se quedó atónito al comprobar que coincidían en cada dígito. Sin decir nada cerró el computador y lo dejó sobre el sofá. Se puso rápidamente de pie y se acercó a la ventana. Necesitaba algo de aire puro para pensar más claro. Abrió la ventana hasta atrás y sacó la cabeza hacia afuera. Tomó una bocanada de aire y se metió nuevamente para quedarse perdido mirando el horizonte. No sabía cuál era la mejor forma de enfrentar la situación. Si desenmascararla ahí mismo o continuar el juego con cautela para así hacerla caer en su propio juego. “Tienes calor?”, dijo de pronto Yang Mi poniendo una mano sobre el hombro de él. Hyun Joong pegó un salto. No la había sentido acercarse ya que estaba perdido en sus pensamientos. “j aja ja… Te asusté! Ven a sentarte y te sirvo té.”, dijo ella sonriendo mientras ponía la bandeja sobre la mesa. De pronto, Hyun Joong extendió su mano y la sujetó fuertemente de un brazo mientras la miraba fijamente, estaba decidido a obligarla a confesar todo. La chica volvió la vista donde el muchacho y también se quedó mirándolo. “Qué pasa? Te sucede algo?”, preguntó ella un tanto extrañada, no entendía la reacción del muchacho. Hyun Joong no dijo nada, se dio cuenta de que si la enfrentaba ella de seguro lo negaría y por el momento no tenía pruebas suficientes para acusarla. “Oppa, qué pasa? Me estás haciendo daño?”, dijo alterada Yang Mi, mientras intentaba zafarse de él. En ese momento pareció como que el chico hubiera salido de su trance. “Perdón! No fue mi intención hacerte daño… Soy un estúpido! Si, por favor sírveme un poco de té.”, respondió él intentando parecer que nada ocurría. Seguidamente se fue a sentar al sofá y la muchacha lo siguió. Ahí sirvió dos tazas, las cuales dejó sobre la mesa. “Gracias”, dijo el intentando lucir amable. “Ah! Discúlpame, voy a mi habitación por los documentos que me habías dicho. Con permiso, ya vuelvo.”, dijo la muchacha y se volvió a poner de pie, desapareciendo por el fondo del pasillo que llegaba hasta su habitación.
Hyun Joong aprovechó el momento para sacar su teléfono y llamar a Diana. “Hola! Voy a hablar rápido, sólo escúchame! Estoy en casa de Yang Mi. Creo que ella es la autora de todo lo que te ocurrió.”, dijo en voz baja el muchacho. “Qué? Ella? Y estás en su casa ahora? Estás loco Hyun Joong? Llamemos ahora mismo a la policía y tú sal de ahí ahora mismo!!”, contestó Diana al otro lado del teléfono gritando. Sonaba demasiado impactada y preocupada. “Si, si. Lo haré apenas pueda. Estoy esperando que me entregue los documentos, necesitamos pruebas… Te cuento con más detalles en casa… Te amo!”, terminó diciendo en un susurro el muchacho y cortó el teléfono.
Para calmarse un poco, tomó la taza que estaba servida y de un solo trago se la bebió al seco. En eso, salió de la habitación Yang Mi con una carpeta en la mano. Se acercó a donde estaba el muchacho y se la dio en las manos. “Aquí está lo que querías. Puedes revisarlo con más calma, para que veas bien lo que sucedió”, dijo dulcemente la chica. Mientras escuchaba hablar a la muchacha, Hyun Joong comenzó a sentirse fatigado. Algo extraño le sucedía, las manos comenzaron a sudarle y un escalofrío lo recorría entero. Si bien el día no había estado tan agotador, lo atribuyó al stress causado por todo lo que había descubierto de Yang Mi. “Te sientes bien?”, preguntó Yang Mi al notar un cambio en el rostro del muchacho. “Si, sólo estoy cansado. No es nada más.”, contestó él mientras se echaba hacia atrás en el sofá y respiraba profundo, para intentar aliviarse. Lamentablemente, el malestar no pasó y comenzó a sentir que le dolía un poco el estómago. Además, estaba mareado y se le nublaba la vista. De pronto todo se volvió negro para Hyun Joong y perdió el conocimiento.

ESTÁS LEYENDO
"My destiny"
RomanceSinopsis: Diana, una chica latina, llega por casualidades de la vida a Corea del Sur, gracias a una beca de estudios, con el fin de comenzar una nueva vida. Allí conoce a una estrella del Kpop, Kim Hyun Joong, quien le ayudará a reencantarse con la...