Diana había guardado la peluca en su bolso cuando se la había quitado. La volvió sacar y se la acomodó nuevamente para que no la reconocieran mientras iban saliendo de la playa. De pronto se le arrancó otro estornudo a Diana. “Te resfriaste, mi princesa! Vamos rápido adentro!”, le dijo Hyun Joong mientras la cubría con sus brazos para intentar darle calor. Al entrar nuevamente a la mansión, Hyun Joong tomó su antifaz, que lo había dejado sobre una mesa y se lo dio a Diana. “Póntelo para que nadie te reconozca!”, dijo él y atravesó la pista de baile con la chica de la mano, para buscar a sus amigos. Al fin los divisó en una esquina. Al verlos acercarse a ellos, Kyu Jong y Hyung Jun se quedaron con la boca abierta mientras que Jung Min y Young Saeng se abalanzaron sobre ellos. “Hermano! No sabes cuanto me alegro!!!”, le dijo Jung Min mientras apretujaba entre sus brazos a Hyun Joong. “Jung Min, disculpa lo que te dije hace un rato atrás. Soy un estúpido. Tenías razón!”, le contestó sinceramente Hyun Joong, “Siempre la tengo!”, agregó Jung Min riendo y golpeándolo en la espalda. Young Saeng recibió a Diana con un gran abrazo también. “Qué bien que todo se aclaró. Yo lo sabía!”, dijo muy feliz. “Gracias de nuevo! Si no hubiera sido por ti, no se qué hubiera hecho.”, agregó conmovida Diana.
Luego se acercaron al resto del grupo. “Parece que estuvo buena esa reconciliación!! No te puedes quitar la sonrisa de los labios, hermano!”, añadió riendo Hyung Jun. El líder sólo sonrió y movió la cabeza, luego agregó: “Muchachos, quiero pedirles disculpas por todo lo que dije allá afuera. Especialmente a ti Diana, disculpame… Además, quiero darles a todos las gracias, principalmente a Young Saeng.”. terminó diciendo y todos se les unieron en un abrazo grupal. Después de eso, Hyun Joong con Diana se despidieron de los chicos y se retiraron de la fiesta.
“Te parece si vamos primero a buscar tus cosas y luego a mi casa? Te tienes que quedar conmigo, es el lugar más seguro para ti”, añadió firmemente el muchacho. Diana sólo acató las instrucciones. Al llegar al departamento de Susan, ambos entraron.
“Buenas noches, Sr. Kim”, dijo Susan al verlos entrar. Hyun Joong le respondió con una venia. “Hola, amiga! Vengo a buscar mis cosas. Ya está todo aclarado. Me voy a la casa de Hyun Joong. Gracias! Gracias por todo!!”, agregó Diana mientras abrazaba a Susan. “No me des las gracias! Somos amigas y esta siempre será tu casa también!”, le respondió cariñosamente Susan. “Si, muchas gracias por todo”, agregó también Hyun Joong. Luego de eso, se dirigieron a la habitación y el muchacho ayudó a Diana a empacar.
Al salir de la habitación, Hyun Joong traía las maletas de Diana. La chica sólo cargaba un pequeño bolso. Se había cambiado de ropa, llevaba puesta ropa deportiva y zapatillas y el pelo recogido en un moño. “Gracias nuevamente, amiga!”, dijo Diana despidiéndose de Susan. “Ya te lo dije. No tienes que darme las gracias! Para eso son las amigas, para apoyarse cuando se necesitan!”, contestó sonriendo Susan. “Ah! Casi lo olvido! Dejé mi laptop en un cajón. Voy por él y regreso”, añadió Diana y se metió en la habitación nuevamente. Sólo pasaron un par de segundos, cuando se sintió un fuerte golpe en la habitación. Hyun Joong y Susan se dieron una mirada rápida y corrieron a la habitación. Allí vieron a Diana tirada en el piso.
“Diana!! Amor, qué sucede? Reacciona!”, gritaba Hyun Joong mientras intentaba tomarla en brazos. “Qué! Qué le sucede? Diana!!”, exclamó Susan. Hyun Joong la levantó y la puso sobre la cama. Susan se acercó y comenzó a chequear sus signos vitales. “Pero… está ardiendo en fiebre!!”, dijo alterada Susan. El chico la cargó nuevamente en sus brazos. “Ahora mismo la llevaré a la clínica. Me ayudas con su bolso?”, añadió el mientras salía con ella en brazos de la habitación.
Hyun Joong acostó a la chica en el asiento trasero del auto para dejarla más cómoda. Condujo tan rápido que en menos de 10 minutos ya estaba en urgencias de la clínica.
“Espere aquí, Sr. Kim. En cuanto tengamos novedades le haremos saber.”, dijo un médico de delantal blanco mientras se llevaban a Diana. Hyun Joong se quedó de pie, sólo en esa enorme y silenciosa sala de espera. Caminó un momento de un lado a otro hasta que logró calmarse un poco y tomó asiento. Buscó su teléfono móvil y le envió un mensaje a Young Saeng. “No se qué le pasó a Diana. Se sintió mal y estoy con ella en urgencias en la clínica central. Te contó algo ella? Estaba enferma de algo. KHY.” . Luego se quedó sentado esperando.
“Sr. Kim! Pase por favor!”, escuchó de pronto una voz y abrió los ojos. Se dio cuenta que se había quedado dormido en la sala de espera. Rápidamente se puso de pie y siguió al doctor. Ambos entraron en una habitación donde Diana estaba acostada durmiendo, conectada a un par de mangueras. “Qué le sucede? Está bien?”, preguntó angustiado el muchacho. “No está tan bien. Según los estudios que le acabamos de hacer. Tiene un comienzo de neumonía. Debe permanecer un par de días acá para ver su evolución. Aunque no debiera complicarse, ella es una muchacha joven y reaccionará pronto al tratamiento. Ahora, está sedada para que baje la fiebre”, añadió el médico. Hyun Joong recordó lo que le había contado Young Saeng, que Diana esperaba todas las noches afuera de su casa para verlo y que la noche anterior, cuando la había encontrado estaba entera mojada. Sintió culpa ya que si ella estaba así ahora, era por él.
Después de eso, el médico se retiró. Hyun Joong se quedó en silencio mirando a la muchacha. Se acercó a ella y la besó en la frente. “Perdóname, Diana. Todo esto es culpa mía”, susurró mientras se le escapaba una lágrima. En ese instante vio que la puerta se abría. Eran los SS501 que habían venido a darle ánimos. Se quedaron acompañándolo un par de horas.
“Hermano, ya es tarde. Por qué no te vas a dormir a tu casa y vuelves mañana temprano?”, preguntó Hyung Jun al despedirse del líder. “No! Yo no me muevo de aquí!”, contestó tercamente el chico. Después de eso, el resto del grupo se despidió y se retiró. Hyun Joong se acurrucó en el sofá al lado de la cama de Diana, cerró los ojos y se durmió. Habían sido demasiadas emociones para tan sólo una noche.
“Mi niño bello! Dormiste toda la noche en ese sofá?”, escuchó de pronto entre sueños Hyun Joong la voz de Diana. Abrió los ojos apresuradamente y vió a la chica sentada en la cama. De inmediato se puso de pie y llegó al lado de ella. “Estas bien? Cómo te sientes, mi princesa?”, preguntó emocionado el chico. “Bien… qué hacemos aquí?”, preguntó ella. El chico la abrazó fuertemente y comenzó a llorar. “Perdóname! Ahora se lo mucho que me quieres… Pero no lo vuelvas a hacer!! Te enfermaste tanto por mi culpa… Si yo lo hubiera sabido antes…”, dijo sollozando el muchacho. Diana sólo acarició su cabello. “No te preocupes. Me siento mejor.”, añadió ella intentando darle ánimo.
Después de eso el médico fue a revisarla. La encontró bastante mejor y le indicó que en un par de días la darían de alta pero que debía permanecer en reposo y con medicamentos en casa. Así lo hicieron. Hyun Joong la llevó a su casa y se encargó personalmente de los cuidados de la muchacha por cerca de una semana. Cuando tenía actividades de la agencia, llamaba a Diana cada 1 hora para saber de su salud y recordarle de sus medicamentos. De esa forma, Diana se recuperó muy pronto.

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"My destiny"
Storie d'amoreSinopsis: Diana, una chica latina, llega por casualidades de la vida a Corea del Sur, gracias a una beca de estudios, con el fin de comenzar una nueva vida. Allí conoce a una estrella del Kpop, Kim Hyun Joong, quien le ayudará a reencantarse con la...