Donovan.

38

-¿Cómo has estado? Me lo he preguntado todas las mañanas.

-Sin ti nada está bien- mostró un gesto en el que de verdad me extrañaba, me gustó- Pero ya no vivo con mi madre, decidí vivir con Charz.

-Qué rebelde, te debería llamar Harley Quinn- reí en lo que me daba otro bocado.

-Harley es mucho más hermosa- me golpeó la espalda en forma de que decía tonterías, me producía una sonrisa.

-Lacey, primera vez que haces lo que quieres, estoy orgulloso de ti, siempre lo estoy.

-Me estás sonrojando, señorito Joker- sus mejillas tomaban poco a poco un rosado leve.

-¿Joker? No, yo nunca te maltrataría de la forma en la que él lo hace.

-Si voy a ser Harley, necesito a mi Joker. ¿Si?- se pegó a mi cuerpo, dándome un pequeño abrazo.

Aproveché el momento en poner mi cabeza encima de la suya.

-De acuerdo, lo seré. Todo por mi dulce reina.

Asintió para regalarme un beso- Oye, sé que esto que dire es complicado pero, nunca me hablaste acerca de que Joss- suspiró- que es tu hermano.

Mis manos se lastimaron en los metales cuando intenté hacerlas puño, y antes de causar una locura trague de mi saliva para aguantar un maldito palabreo hiriente.

-No es mi hermano.

-Donovan.

-Lacey no lo arruines y por última vez, no es mi maldito hermano.

Suspiró en grande, lo que significa que viene con sus sermones- Ya no tienes que ocultarlo. Quiero ayudarte, por eso fui con tu psiquiatra y le dije que me contara cada detalle que nunca hablamos.

-¿Entonces tú también me crees un enfermo mental? ¿El chico problemas?

-Eso no fue lo que dije, digo que quizás estés imaginando am, ¿qué tenías una hermana?

-Así que tú tampoco me crees- me separé un poco más de su lado, esto era realmente increíble.

-Donovan sólo digo...

-Rubia, ojos azules como los míos, le escribo cartas casi todo el tiempo. Soy como su admirador secreto. Por lo menos quiero que crea eso, hasta que sea mayor y pueda verla.

-¿Qué?- parpadeó rápido para fruncir las cejas.

-¿Se parecen esas características a la hermana del fenómeno, cierto? Bien, ahora quiero que saques una fotografía de mi bolsillo trasero.

Dudó al principio.

Sentí como su mano bajaba a mi bolsillo. Sacando lo que quería que viera, su boca estaba entre abierta, ¿cómo no se daba cuenta del dolor que me hacía sentir?

-Mi hermana, Doreen, ahí está. Aprece tal y como la ves. Luego de que se la llevara mi padre y viviera con su nueva familia. Joss no lo desaprovechó para olvidar sus recuerdos. Por ello opté por cambiarme el apellido, no llevaré nada de mi padre, soy Donovan Lawrence, no McCulkin. Lawrence y sólo Lawr...

-Te creo- no me espere eso- Lo que dije estuvo pésimo. No sé que estoy pensando, eres mi novio. Los psiquiatras nunca cambiaran son todos iguales, lo siento tanto- besó mi mejilla, regalándome un cálido abrazo.

Me desfogué en cierta parte, ella siempre se ha interesado en mí y lo ha demostrado. Es sólo que esta mierda de gente, estas esposas, el lugar en el que estoy, es un total estrés para la paciencia que tengo- No pasa nada, quiero olvidar esa conversación. Te amo, preciosa.

-También te amo, ¿cómo has estado tú?- cambió el tema, es un gran alivio para todos mis sentidos.

Ponía esa carita tan tierna y excitante, me tomaba la mejor atención que es algo que agrenzco mil veces en ella.

-Mal, pero me gusta cuando me despiertas a las cinco de la mañana, también cuando dices lo sexy que soy, extrañaba que levantes mis ánimos.

-Donovan, ¿estás bien?- dio risitas. Tocó mi frente y sacudí mi cabeza levemente, yo no tenía fiebre, ni nada.

-Sí, deja de poner esa cara como si estuviese delirando.

-Es que yo no he venido a las cinco de la mañana a verte.

Mi sonrisa se borró de la cara- ¿Qué?

No puedo creerlo- comencé a recordar- Esas veces que me daba caricias en las mejillas... que me decía ya falta poco para que saliera de aquí... y que discutíamos por cualquier cosa...  ¿Todo fue parte de mi imaginación en las celdas?

-¿Te encuentras bien?

-No, ahora me siento mal. Tú nunca viniste, lo imaginé. Mi mente jugó conmigo de una forma terrible, Lacey, no te vayas nunca. Quédate conmigo.

Miré ambos lados como un sabueso protegiendo a su presa.

-No sabes cuanto daría para sacarte- sus labios estuvieron a punto de conectarse conmigo.

Me interrumpió el mismo imbécil que me sacó de mi celda, dijo que la hora de visitas se había terminado. Es una pena que no se obedecer órdenes

-Sólo un minuto más- se lo pedí.

-Lo siento McCulkin, ya se acabó- me tomó de los brazos.

No creí que mi novia haría algo, lo hizo. Cada vez más me enorgullece.

-Oye cabeza de espárragos. No sé que es lo que te cuesta darnos un minuto, ojalá te botaran de este trabajo, además lo estás lastimando, no le toques lo brazos- Lay me llevó hacia ella pero él no me soltaría.

-Sí claro, señorita Brown, ¿cree que mi labor es un juego? Me haría bien que cierre la bo...

-Ese vocabulario no me gusta- sonreí a lo que note tensarse su cuerpo- Tengo dos manos atadas, pero igual podría quebrar cada uno de tus débiles huesos. Quiero decir, tenga respeto con mi novia podría volarte los ojos.

-¿Me está amenazando McCulkin?

-No, claro que no. Es un hecho que voy a hacer, si no tienes cuidado con tus palabras.

Me dejó sólo un minuto, enseguida se retiró dejandome ver su boca fruncida llena de enojo. Siguiendo con lo mío terminé lo que debía hacer.

La besé.

Ella tocó mis cabellos, y estrañaba todo esto. Lastima que no pueda tocarla y hacerle lo que quiero, estoy atado a un pedaso de mierda, pero esto es lo mejor de lo mejor, le mordí un labio con suavidad, y por último la hice reír al besar su cuello.

-¿Te veo mañana?

-Creo que no necesitas preguntarmelo.

Dicho eso me tengo ir. La cual me pesaba el cuerpo al aproximarme pero esas son las reglas. Apenas eran las seis de la tarde. Qué ridículo. Cuando estaba por atravesar la puerta y no volver a ver a Lacey hasta el día siguiente, ella me lanzó un beso volado, hice la seña de que lo atrapé y lo guardé conmigo.

Entré a mi celda y pensé como eran las cosas hasta ahora.

Lacey me olvidaba algún dolor o alguna pena que tuviese. Es la mujer perfecta, no me cansaré de decirlo. La encontré y no me dejaría. Estoy seguro que siente puro amor, no se imagina lo que daría por ella. Haría lo que sea para que no vuelva a desprenderse de mi cuerpo y nunca escuchar un adiós.
Es tan distinta pero la mejor para escuchar y entender. Amo este vodka, ella es mi vodka. Aparte de olvidarme la asquerosa persona que fui y que no pienso ser otra vez no dejaré que nadie se interponga en nuestro camino. No la puedo olvidar.
Sí Lacey, tu encontraste mi corazón lo hizo la persona quien no esperaba. Creí haberlo perdido y me equivoqué, necesitaba un amor que me saque de una jungla sin salida, estoy eternamente agradecido.

Te amo, pequeña Lay.

___________________________

Y llegamos al capítulo final!!!!!! Se viene el epílogo WIIIIII

Todo lo que crea que sucederá en el sgte episodio no olvide decírmelo, votar, comentar, y compartirlo con sus amistades!

Nos veremos pronto! Bai bai ♡♡