→Sessions

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Los meses pasaban y Harley comenzaba a obsesionarse con el Joker, incluso cuando todos los demás psiquiatras de Arkham le decían que dejara de perder su tiempo con él, ella no se rendiría, ella estaba convencida de que podía ayudarlo. Según Harley, la manera en la que catalogaban al joker era errónea puesto que para todos él era un psicópata, homicida y despiadado hombre. En cierta parte era así, pero para ella, el joker también era un alma atormentada que estaba pidiendo desesperadamente la ayuda de alguien. Sólo un niño perdido que trataba de que el mundo se riera de sus travesuras, incluso si algunas sobrepasaban los limites.

Durante el tiempo que Harley pasaba con el joker, él siempre mencionaba a ese tal batman que resultaba desconocido para ella. A menudo él lo describía como una persona que trata de hacer su vida imposible. Harley pensó que sólo provenía de su imaginación, ya que aunque le tenía ahora algo de aprecio, sabía que seguía tratando con un psicópata. No podía creer del todo en él, pero sin darse cuenta, ya lo estaba haciendo.

Ahora se encontraban en la oficina de Harley, él poseía su camisa de fuerza como en cada sesión, pues era la única condición que los guardianes les ponían para tener privacidad en su oficina.

—Harley, me temo que ya te he contado toda mi triste vida... Pero yo aún no sé la tuya, cariño —Lo ultimo lo susurró, haciendo que a Harley se le pusieran los pelos de punta.

—Uhm... No hay mucho que saber de mí, Puddin —Sonrió inocentemente, fingiendo estar anotando algo para no tener que mirarlo. A ella no le agradaba mucho la idea de llamarlo de dicha manera, pues no era para nada profesional. Pero él parecía molestarse cada vez que ella lo llamaba sólo "joker" así que optó por comenzar a llamarlo así. Otras veces, lo llamaba Mr. J.

—Oh vamos, cariño —Él se echó a reír con sus estruendosas carajadas— Por supuesto que hay mucho que saber de ti, eres un misterio, eres misterio —Una sonrisa de lado apareció en la comisura de sus labios. Él sabía que Harley se ponía nerviosa cuando sonreía de esa manera. Ella no podía negar que sentía el calor en sus mejillas aumentar cada vez más.

—Bueno... Practique gimnasia la mayor parte de mi vida, por eso soy tan ágil —llevó un mechón de su cabello a su oreja—. Y en la secundaria, tuve que coquetearle a varios profesores para tener altas notas y obtener mi beca.

Las anteriores veces que Harley había contado esto se sentía realmente avergonzada por lo que tuvo que hacer, pero con él era diferente. Ella se sentía en confianza. Él levantó una ceja, parecía analizarla con la mirada.

—Harley, ¿Puedo hacerte una pregunta importante? —El joker se acercó más a Harley por sobre la mesa, ella contuvo la respiración mientras lo veía acercarse más. A este punto, comenzaba a tener cierto cosquilleo en su estómago. —¿Serías capaz de morir por mí? —Ella sin pensarlo dos veces iba a responder, pero él volvió a hablar—. Piensalo muy bien antes de responder, no quiero que después te arrepientas.

En ese momento, fue cuando comencé a caer lentamente sin darme cuenta siquiera.

Mad love » Harley & JokerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora