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Llegamos a la casa y me tiré en el sofá.

¿Estaba cansada? No físicamente, pero mentalmente estaba agobiada.

Jimin me miró serio y subió las escaleras hasta su habitación.

Me aburría como un hongo, pero me entró hambre y fui hasta la cocina para comer algo.

Opté por un trozo de pizza que milagrosamente había sobre la encimera.

- No te vayas a comer la pizza de la encimera - me grita Jimin desde arriba.

Rayos, casi.

Abrí el refrigerador y saqué un tarro de helado de cinco litros. Chocolate, vainilla y fresa ¡perfecto!.

- Tampoco el helado que hay en el refri - me vuelve a gritar Jimin desde arriba.

Aghs, buscaré otra cosa.

Abrí los estantes y encontré una caja de galletas de chispas de chocolate. Las saqué despacio y silenciosamente me dirigí...

- No vayas a tocar las galletas del estante - me grita nuevamente Jimin.

- ¿Hay algo en esta casa que pueda comer? - le grito desde la cocina.

Jimin bajó las escaleras. Tenía puesta otra ropa.

- No me grites - me dice.

- ¿Vas a algún sitio? - le pregunté al notar su cambio de atuendo.

- Tengo clase de boxeo - me dice y se dirige a la puerta.

- ¡Espera! - le grito y se detiene.

- ¿Qué quieres? - me pregunta.

- ¿Qué puedo comer? -

- Ah era eso.. bueno, hay un boniato en el refri, cómelo si quieres - me dice y se va.

¿Un boniato? Es broma, ¿no?.

Jimin se fue y quedé completamente sola... ¡Qué bien!

Agarré ese boniato y lo frité.

- Ñam, boniato frito, ñam ñam - comencé a cantar.

Cené ese boniato y subí a mi habitación. Corrí de aquí para allá y me metí en la ducha.

Salí de la ducha en ropa interior, para sentirme algo libre, de todos modos estaba sola.

Después de la refrescante ducha no sabía qué hacer.

Bueno, no sabía qué hacer.. hasta que pasé frente a la habitación de Jimin.

"No pasar" decía un cartel pegado a la puerta.

No podía no sentir curiosidad. Giré el picaporte de la puerta y lentamente entré.

- Que desordenado que es - pensé en alto.

La cama estaba sin hacer y había ropa por todos lados.

- ¿Y esto que es? - me pregunto levantando algo del suelo.

En seguida lo arrojé por los aires al darme cuenta de que eran unos calzoncillos.

Miré y sobre su armario había una caja roja, bastante bonita y llamó mi atención.

Me acerqué e hice puntitas de pie para poder alcanzarla.

Agarré la caja con una de mis manos pero se me resbaló y lo que había en su interior se desparramó por todos lados y la caja me cayó en la cabeza.

En ese momento me di cuenta de que tenía notas por todos lados.

¡La caja roja estaba llena de notas!. Abrí una de las notas y decía "Mi querida Strawberry, estoy perdidamente enamorado de ti.. ojalá algún día te des cuenta de ello.."

¿Strawberry? ¿Y esa quién es?.

Sin duda eran cartas de Jimin dirigidas a alguna chica.

- ¡¿Pero qué sucede aquí?! - me pregunta Jimin entrando de pronto a su habitación y encontrándome allí, leyendo aquellas notas.

Lo miré asustada y avergonzada.

- Yo.. yo.. no quise.. - trataba de explicarle, pero no sabía cómo.

En ese momento recordé que estaba en ropa interior. Jimin me miró con los ojos bien abiertos.

- Vete.. - susurró corriendo su mirada, para no verme.

¡Justo se me ocurre a mí no traer puesto el pijama!

Porque tonta se nace.

- Vete - insiste mirando hacia el suelo.

- Yo.. - traté de hablar.

- ¡QUE SALGAS DE AQUÍ! - me gritó furioso y yo salí corriendo de allí.

Cerró su puerta de un portazo y yo me encerré en mi habitación.

Maldita sea, ¿no tenía clases de boxeo?.

¿Por qué entré a su habitación?

No sé qué pensar. Aún nerviosa por lo ocurrido me tiré en mi cama.

Sumergida en mis pensamientos, me quedé dormida.


HELLO! Con el pésimo inglés de ChimChim!

¿Qué les está pareciendo el fic?

Gracias por todo su apoyo   c:

Save Me ➳ Park Jimin. |TERMINADA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora