Save Me ➳ Park Jimin. |TERMINADA|

~ 2 ~

- Aquí es - me avisa mi padre deteniendo el coche.

Miré la casa que teníamos en frente y me sorprendí.

- Es enorme - dije asombrada.

- Los Park son gente adinerada - me comenta mi madre.

En ese momento el señor Park salió a recibirnos y nosotros bajamos del coche.

- Aigoo, ¡cuánto tiempo sin veros! - dice abrazando a mis padres.

- Es bueno verte, Park - dice mi padre y luego me mira - Oh, ella es _______ - me presenta.

- ¡_______! ¡Cuánto has crecido! - dice mirándome y con una gran sonrisa - Bueno, espero que te sientas cómoda en nuestra humilde casa -

¿Humilde? Se nota que no ha visto mi casa.

- Gracias, señor Park. Yo también lo espero - le dije y él me dedicó una sonrisa.

Mis padres se despidieron de mí y se marcharon.

- Pasa, pasa - me invitó el señor Park - mi esposa se está duchando y mi hijo vendrá más tarde -

Entré a la casa y era totalmente hermosa y lujosa.

- Puedes dejar tus cosas arriba; tu habitación es la que está junto a la de Jimin - me dijo el señor Park y yo asentí con la cabeza.

Subí las escaleras y al final del pasillo habían dos puertas. Una de ellas tenía un cartel de "No pasar", así que supuse que esa sería la de Jimin. Entré a la otra y definitivamente era la que me tocaba a mí.

Era genial, desde luego la mejor habitación que he tenido en mi vida, ¡hasta tenía una cama de dos plazas!.

Comencé a desempacar lo que traía en la maleta.

- _______ ¿puedo pasar? - pregunta una voz femenina desde la puerta de mi habitación.

- Claro, señora Park - le permito y ella entra.

Llevaba el cabello mojado, porque recién salía de ducharse.

- Que bueno volver a verte - me dice abrazándome.

¿Ésta familia es muy cariñosa o qué?

- Recuerdo cuando eras una pequeñina - sigue diciendo mientras me abraza, casi dejándome sin aire - mi Jimin te adoraba, y nosotros también -

- Yo también lo recuerdo - digo al no saber qué responderle.

La señora Park ríe.

- Bueno _______, espero que estés a gusto aquí. Oh, y dentro de veinte minutos baja que estará lista la cena - me dice y sale por la puerta.

Nuevamente sola, seguí ordenando mi ropa y colocándola en el armario.

Quizás estar en casa de los Park no sea tan malo.. o eso creía, hasta que él llegó.