Una hora después, Diana despertó y se dio cuenta que Federico se había quedado dormido junto con ella y ahora la tenía abrazada. Con un leve movimiento de su espalda, pudo zafarse de los brazos que la rodeaban y cuando iba a salir de encima de él, Fede la tomó nuevamente y la dejó en la posición en la que estaban al principio. Se miraron y él la besó con mucha dulzura.
FEDERICO: ¿Ya te quieres ir?
DIANA: Es muy tarde.
FEDERICO: Yo no te pregunté la hora, Diana.
DIANA: (Sonríe) Es verdad.
FEDERICO: ¿Te quieres ir?
DIANA: ¿Qué propones?
FEDERICO: Aún no conoces mi cama y no puedo esperar a que lo hagas.
DIANA: Muy tentador, señor periodista.
FEDERICO: (La ayuda a pararse y queda encantado con el “paisaje”. Se pone de pie y la atrae hacia su propio cuerpo) Eres realmente bellísima.
DIANA: Tú estás como quieres.
FEDERICO: Me alcanza con estar como me quieras tú.
DIANA: Estás justo y exactamente como me lo recetaron…
FEDERICO: ¿Un médico?
DIANA: No, mis fantasías…
FEDERICO: (La levanta con facilidad y se la lleva a la recámara) Fantasías que ya mismo empiezo a cumplirte. (La acuesta boca abajo y empieza a besarle la espalda)
DIANA: (Enloquecía de placer al sentir esa boca sobre su cuerpo) Eres increíble…
FEDERICO: (Se detiene al llegar al lugar en el que sintió la cicatriz y ve que parece como de una quemadura) Lo único increíble aquí, es lo que me provocas.
DIANA: (Sintió que Federico acariciaba con suavidad su cicatriz y pensó que debía dar alguna excusa) Una bengala mal utilizada en una Navidad…
FEDERICO: (Besa tiernamente la herida y la voltea, para ponerse encima de ella) Has logrado que mi cuerpo pierda el sentido. (Quedan boca a boca, respirando con dificultad a causa de las ganas que se traían de tener un segundo round)
DIANA: Lo mismo me pasa a mí.
Federico nuevamente “dispuesto”, abre las piernas de Diana a fuerza de besos y caricias y al quedar en posición, la penetra con celeridad y un deseo inusitado que parecía consumirlo al igual que a ella y el sexo supuestamente “casual”, se torna una entrega absoluta… Bien entrada la mañana, al despertar, Fede le ofrece darse un baño y allí, el round tres. Luego, se dispusieron a desayunar. Se miraban sin poder evitar sonreírse mutuamente.
DIANA: ¡Ya no me mires así!
FEDERICO: ¿Qué hago? Me tienes encantado.
DIANA: Y tú a mí, pero ya deja de mirarme así, porque tengo que irme y si sigues en esas, no me voy a poder retirar a mi misma de este departamento.
FEDERICO: ¿Retirarte a ti misma? Me gustó eso, suena a que te resistes.
DIANA: Suena correcto, me resisto.
FEDERICO: (Acerca la silla y la besa) Me resisto a que te vayas, así que por mi, está bien.
DIANA: (Se queja) Es que te dije que mi hermano llega hoy y tengo que ir a buscarlo al aeropuerto.
FEDERICO: Me dijiste que llega en la noche.
DIANA: Si.
FEDERICO: Apenas son las diez de la mañana, ¿cuál es el apuro? Mejor te quedas y me acompañas al cumpleaños mi hija.
DIANA: (Se sorprende) ¿Qué dices?
FEDERICO: (Se extraña ante la reacción) Que te quedes y más tarde vayas conmigo al cumpleaños de Lola.
DIANA: No creo que sea buena idea, Federico.
FEDERICO: ¿Por qué no?
DIANA: No quiero ser grosera, pero esto que pasó entre nosotros es…
FEDERICO: Sólo sexo, ya me lo dijiste y está más que perfecto para mi también, no te preocupes.
DIANA: ¿Y en plan de qué me vas a presentar?
FEDERICO: En plan de una amiga y, al fin, ¿eso qué importa? Me gusta pasar tiempo contigo, me haces reír y me encanta la forma en que ves la vida.
DIANA: No lo se.
FEDERICO: Por lo pronto, quédate a almorzar conmigo.
DIANA: ¿Qué piensas cocinar?
FEDERICO: ¿Te gusta la pasta?
DIANA: Me fascina la pasta.
FEDERICO: ¿Te parecen unos sorrentinos con salsa de hongos?
DIANA: ¿Y de postre?
FEDERICO: Hummm...… Eso va a ser lo mejor de todo. De postre estás tú.
DIANA: Acabas de convencerme…
FEDERICO: Me gustaría darte una probadita antes de almorzar…
Se empiezan a besar y, aprovechando la alfombra, terminan de nuevo en el suelo, para un desenfrenado y excitante CUARTO ROUND…
ESTÁS LEYENDO
Doble Vida
RomansSinopsis Diana es una mujer liberal, moderna y deshinibida que oculta un gran dolor detrás de una hermosa sonrisa. Toda la vida se ha preparado mental y físicamente para enfrentar al hombre que destruyó a su familia y acabar con él. Si bien ese es e...