Pyromaniac [SuKook]

09 Molesto

11:55pm

Un silencio atroz inundaba su cuarto. Yoon Gi se encontraba, de nuevo, tratando de escaparse.

El día anterior, la enfermera Son, le había pedido disculpas por la acusación. Le dijo que el niño le contó la verdad, que él no hizo nada malo.

Después de eso, Yoon Gi quiso ir a hablar con el chico ya que necesitaba una explicación de por qué hizo eso de tratar de ahogarse  y con quién había estado hablando en la fuente.

Era muy tarde como para que hubiese alguna enfermera. Tenía incluso controlado el horario de la rubia que lo cuidaba.

Abrió, haciendo uso de sus maniobras, la puerta. Se asomó cauteloso por el pasillo y después corrió a las escaleras para ir hasta el primer piso, donde había oído que el niño estaba instalado.

No sabía cuál era exactamente el cuarto del chico, pero inspeccionó todos, uno por uno; dando saltitos para ver por la ventanilla de las puertas.

Pasó por unos siete u ocho cuartos, hasta que dio con él.

Lo reconoció enseguida porque estaba sentado en la cama y movía sus labios como si hablara con alguien.

Usó su técnica para abrir y logró ingresar.

Cuando abrió lentamente la puerta, el niño se giró bruscamente hacia él, chocando así sus miradas.

—Hola...—susurró Yoon Gi, cerrando la puerta con cuidado—Jung Kook no dijo nada. Se quedó mirándolo un poco asustado, sin moverse de su lugar—Tranquilo, sólo quiero preguntarte algo.

El rubio se acercó hasta la cama, pero se quedó a una distancia prudente del otro, porque sabía que estaba incómodo.

—¿Por qué trataste de ahogarte?¿Querías morir?

El pelinegro movió sus ojos nervioso, pero nunca despegando la mirada del chico. Estaba esperando una aprobación para responder, pero él había desaparecido de repente.

—No...—dijo en voz baja.

—¿Y con quién hablabas?—frunció sus cejas—¿Eres como esa niña del tercer piso que dice que le hablan unos ponys?

—N-no sé de qué hablas, yo no oigo a ningún pony...

Yoon Gi dio unos pasos lentos hacia adelante y se quedó en frente del chico, muy cerca. Estaba molesto porque no entendía a ese tipo de niños que hablaban solos. Creía que lo único que querían era atención, nada más. Y ese pelinegro le parecía exactamente ese tipo de persona y no le gustaba nada.

—¿Sólo quieres llamar la atención?—le habló en un tono algo más desagradable—Me molestan los niños que hacen eso. Me molesta porque fingen y se excusan diciendo que alguien los obligó a hacer cosas...¿Tú eres así?

Jung Kook no sabía qué decirle porque le estaba dando miedo la forma en la que le hablaba. Él no fingía nada. Él veía y oía cosas que nadie más podía, y llamar la atención nunca fue su objetivo, porque eso era lo que menos quería. No soportaba las miradas sobre él, los susurros entre dientes diciendo que estaba loco, enfermo.

Le negó con la cabeza y luego bajó su mirada.

—Deja de mirarme así—le dijo Kook, apretando sus puños.

—¿Te molesta que te mire?

—¡Sí!—gritó.

Yoon Gi le tapó la boca con la mano, no quería que alguien fuera a descubrirlo. Si no, estaría en graves problemas.

—Cállate, si ven que me escapé estoy muerto.

Jung Kook trató de luchar con aquel niño y acabaron por forcejear sobre la cama, desacomodando las sábanas. Intentó clavarle los dientes en el brazo, pero el rubio no se dejaba agredir tan fácilmente. Lo abrazó con fuerza para inmovilizarlo, pero el niño no paraba de revolverse.

—Quédate quieto.

—Para, suéltame—le exigió con una tenue voz—.Me haces daño... Él te querrá golpear.

—¿Él?—Yoon Gi lo soltó y lo miró sin comprender—¿Quién es él?

—616—respondió Kook, empujándolo.