Max estaba muy agotado. La noche anterior había salido a divertirse, siendo una pésima idea. Simplemente no consideraba importante asistir a la escuela, no era necesario para él.
No cuando se es el hijo único de uno de los hombres más ricos del país.
Pero su padre, Christian, lo había retado varias veces debido a la cantidad de ausencias que tenia en Kingsley, la colegio privada al que asiste.
—Antes de irte, te recuerdo que esta noche tenemos una cena importante—Le dijo su padre, quien no desviaba la mirada del periódico.
—Si, como sea—Respondió el rubio restándole importancia.
Entonces Christian bajo el periódico y lo miró fijamente.
—Max, en verdad necesito que estes allí—Sonaba como un ruego.
El rubio realmente no podía llevarle la contraria a su padre cuando le hablaba cariñosamente.
—Estaré a tiempo, lo prometo—Respondió haciendo sonreír a su padre.
Max se apresuro a salir de casa. Mientras estaba en el elevador llamo a su amigo Lando para que fuera a recogerle, pero este no respondía.
Había contemplado dormir un rato en el camino, pero parecía que su plan no se iba a dar.
Frustrado, no tuvo más opción que tomar su propio auto y conducir hacia la escuela.
Cuando llego se puso unos lentes de sol para intentar disimular su mala cara.
En una de las mesas cerca del patio central vio a Sergio, quien estaba platicando alegremente con su grupo de amigos.
Max lo detestaba.
Ambos habían competido por ser el representante estudiantil. Y si bien no era su mayor sueño, ya que lo hacía por la atención que esto generaba entre sus compañeros, se molestó mucho cuando perdió ante el pelinegro.
"Todos lo ven como un chico bueno, un ejemplo a seguir" le dijo una vez su amigo Daniel.
El rubio no entendía porque lo miraban de diferente manera.
Todos parecían venerarlo de alguna manera. Además de que era el mejor amigo de Lewis, popular tanto con los chicos como con las chicas, era todo lo que un joven de su edad quisiera aspirar a ser.
Max vio a Sergio levantarse de su asiento, tomando sus libros en un brazo y caminando hacia su dirección.
La mente del rubio voló rápido.
"¿Viene hacia mí?" pensó "Quizá viene a presumir que volvió a ganar, otra vez"
Pero Sergio no podía estar más desinteresado.
El pelinegro había visto que su amigo Lewis iba entrando, así que se paró a saludarle.
Sin embargo, el rubio tenia otros planes. Este golpeo en el brazo del pelinegro cuando paso a su lado, haciendo que los libros se le cayeran al suelo.
—Lo siento, no te vi—Sergio comprendió que la voz del rubio no era en otro tono más que de burla.
El pelinegro se agacho a tomar sus cosas y luego volteo a verlo.
—No te preocupes, nos pasa a todos—Respondió mostrando su sonrisa más amigable, aunque por dentro tenía otros pensamientos.
Sergio no era tonto, y mucho menos patiño.
Conocía bien la rivalidad entre Lewis y Max, y como esto también lo arrastraba al conflicto.
Todos los chismes entre esos dos terminaban siempre en el mismo sitio: Good boys go bad.
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══ᴄʀᴀᴢʏ ᴅᴀʏꜱ ᴀɴᴅ ɴɪɢʜᴛꜱ══~ᶜʰᵉˢᵗᵃᵖᵖᵉⁿ
FanfictionMax pasa sus días bromeando con sus amigos durante su ultimo año escolar. Pero cuando el sol se oculta es conocido como el príncipe de la vida nocturna. Le gusta salir de fiesta y divertirse sin temor a las represalias. Su vida da un vuelco cuando r...