Este mundo despiadado

Capítulo 18: Impulso de la doble personalidad

—¿Hija? ¿Qué pasó con tu voz?—Le preguntó su padre, despertándose de repente.

—¿Eso a ti qué te importa, viejo? Yo lo que estoy es molesta. ¡Por tú culpa padezco de esta horrible enfermedad! ¡ES TU CULPA Y NADA MÁS TUYA!, ERES UN IRRESPONSABLE!—Exclamó bruscamente hacia César.

Este quedó completamente destrozado.

Stella estaba descontrolada, pero su doctor que estaba de guardia oyó todo el jaleo que se escuchaba en la habitación de la paciente.

—¿Qué pasa aquí?—El doctor pudo observar a César desmayado en el piso y a Stella, por su parte, desmayada en su cama. Su madre seguía durmiendo.

Al día siguiente, César le contó al doctor todo lo que había pasado aquella noche. Él se sentía muy mal. Muy culpable. El doctor lo llevó al Centro de Tratados Especiales para que lo examinaran y lo tranquilizaran, y además para estar seguro de que no había padecido de ningún trastorno mental. A Stella también la llevaron ahí. 

—Doctor, esto es algo inesperado.—Informó la enfermera, preocupada.

—¿Cuál es el problema?—Preguntó, intrigado.

—Hemos diagnosticado a la paciente Botherhood con : "El impulso de la doble personalidad"

El doctor se quedó simplemente atónito, este trastorno era destructivo para una paciente con tan solo catorce años de vida.

—Le hice algunas preguntas a Stella y me respondió honestamente. Este trastorno se puede originar a partir de la esquizofrenia. Ella padece las dos cosas.—Añadió la enfermera, muy triste.

Ellos de inmediato se lo informaron a los padres. 

—¿Hola Stella, cómo te encuentras?—La saludó el doctor.

—Doctor, vaya al punto.—Le ordenó Stella, cortante.

—Esto es muy duro para mí, querida Stella, pero además de la degeneración  espinocerebral, padeces de "el impulso de la doble personalidad" Es un trastorno mental muy destructivo a tu edad.

—Continue, por favor.—Stella permanecía neutra.

—Este trastorno se basa entre una combinación de revelaciones de sentimientos ocultos dentro del paciente, su verdadera o segunda personalidad. Se puede originar a raíz de la esquizofrenia,  trastorno mental que te hace ver alucinaciones visuales y te hace oír alucinaciones auditivas, entre otras cosas. Causa una fuerte depresión y....—El doctor comenzó a llorar.—Lo siento, no puedo continuar..

—El que tu crees que es el espíritu de "Yumi" todo este tiempo fue una alucinación. Todo lo que ella decía, las acciones que cometiste creyendo que estabas bajo el control de ella, en realidad  las hiciste por tu propia voluntad, sólo te basaste en ideas que en realidad no existían.—Informó la enfermera.

Stella se encontraba estaba confundida y aliviada...Pero, su esquizofrenia era tan fuerte que ni de eso se pudo dar cuenta.

—Además, hemos diagnosticado a la paciente con bronquitis. Nuestro equipo cree que fue a cause de una gripe muy intensa que no fue tratada cuando se debía, señorita Botherhood.

—Yo...Yo no sé que decir, enfermera...—Alejandra estaba impactada y muy triste.

—Yo sólo me alegro de que todo esto haya sido una mentira.—Dijo de repente Stella. Sé que la esquizofrenia—su voz se quebró— no tiene cura exactamente, para colmo.—Finalizó y rompió en llanto, de nuevo.

—Estás en lo correcto, Stella. También pudimos calcular que padecías de esta enfermedad incluso antes del incidente en el examen de Karate. Señorita Botherhood, no ocultará algo, ¿o sí?—Le preguntó la enfermera.

—Verá, enfermera, es algo duro para mi decirlo, pero...el jueves de la misma semana que el examen de Karate, a mi esposo le habían dado el día libre, así que decidió salir con unos amigos. Llegó a las 7 de la noche... todo borracho...—Alejandra se quebró un poco—...Lo que me pareció raro, pues él no bebe mucho.Stella estaba en la mesa de la sala, como siempre, haciendo su tarea. Yo me escondí entre las escaleras para ver qué hacía en ese estado...

FlashBack

—¿Papá, estás borracho?—Le preguntó Stella al verlo, con algo de miedo.

—¿Yo, borracho?—Preguntó César muy borracho.

—¡Papá, es obvio que estás borracho! ¿Cómo se te ocurre llegar así a casa? ¡Deberías avergonzarte!—Le exclamó Stella, muy molesta, clavándose en su cuaderno una vez más.

—¿Estás siendo insolente niña?—Le preguntó su padre.

Stella se paró, pues quería darle una cachetada a su padre de lo furiosa que estaba. César pudo ver lo que Stella intentaba hacer, y entonces...

—¡No seas insolente pequeña cría!—César partió la botella de whisky que traía con él, con mucha fuerza en la nuca de la pobre.

Fin del FlashBack

—Yo corrí de inmediato y le di una cachetada a César. La pobre Stella se desmayó, inclusó pensé que estaba muerta...pero gracias a Dios no fue así. Al día siguiente le conté todo a César, él estaba muy mal. Stella despertó y le contamos otra cosa. Yo sané muy poco sus cortadas...Fui tan estúpida que por la cabeza no se me pasó ir a llevarla al hospital...

—Yo tan sólo no puedo soportar tales palabras. Yo misma presentaré una denuncia en contra de ustedes por negligencia, ¿cómo pudieron ser tan irresponsables?—La enfermera dijo, disgustada.

Les recomiendo que se vayan dirigiendo a la estación policial de investigaciones penales competentes de aquí de la ciudad, pues yo me dirigiré hacia allá ahora para presentar mi denuncia.

Ambos padres estaban tan destrozados y se sentían tan avergonzados que no fueron capaces de intercambiar alguna palabra de despedida con su hija. Se retiraron en silencio los dos.

A causa de esto, evidentemente, Stella estaba aún peor.

—¿Señorita?—Dijo Stella, con una voz muy frágil.

—¿Sí, querida?—Respondió a su llamado.

—¿Me podría quedar a vivir en el hospital? Debido a las tantas condiciones, trastornos y enfermedades que padezco no tendría caso que me fuera a otro lugar. No quiero que nadie venga a visitarme, únicamente mi mejor amigo, Asrael.—Solicitó Stella, quien no pudo evitar derramar una sola lágrima.

—Seguro..—afirmó la enfermera un tanto decepcionada—más bien, pediré que te pongan a mi cuidado. Creo que será lo mejor, ya que soy quien mejor conoce tu historia.—Aseguró.