[Secuela de Amor Prohibido]
[Completa]
Aome y Maximiliano tienen la felicidad que siempre desearon. Una vida de lujos, sus hijos, familia y sobre todo, su amor incondicional.
Parece perfecto.
¿Pero qué pasa cuando los fantasmas del pasado regres...
Sentía la garganta tan seca. Carraspeé y me limpie los ojos. Los sentía tan cansados y mi cuerpo hormigueaba de cansancio, de dolor.
La luz blanca y el olor fuerte entrando por mis fosas nasales me hicieron sentarme.
Volví a frotarme la mirada, quería remover la tela que me impedía ver con claridad. Unos ojos verdes me sonrieron.
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—¿Cómo te sientes? —me llevé las manos a la cabeza y sonreí.
—Viviré —conteste corriendo mis manos una arriba de la otra.
—No hubo cortes graves, solo fue una pequeña herida —dijo apenado.
Bajé mis ojos a mis piernas y removí la sábana. Me fije en el corte. Solo unas mariposas cubrían la piel.
—¿Austin? —fruncí el ceño tratando de recordar si había dicho su nombre correctamente.
Él se movió tomando una bolsa de plástico blanca, que yacía en una silla. Me la entregó y asintió con la mirada en mi.
—Sí, mi nombre es Austin —sus respuestas eran tan cortantes o más bien, frías.
Le recibí la bolsa, la abrí y me fije que era mi ropa. Él me sonrió y se cruzó de brazos.
—Por lo visto ya puedo irme.
Me deslice en la camilla y baje de esta para poder vestirme. Alce la barbilla y lo mire en una forma discreta, dándole a entender que se fuera para yo poder ponerme la ropa.
Él entendió pero se aclaró la garganta.
—Lo siento, ¿crees que puedas cambiarte en el baño?
—¿Por qué?
—Max me dijo que no te dejará sola. Aidan está aquí en el hospital y puede venir a joderte.
Ellos habían estado aquí. Abrí mis ojos. Tal vez estaban lastimados. Me preocupaba, pero también Aidan no me haría daño, al menos no lo creía, bueno, realmente a estas alturas ya no lo sabía.
—¿Y Max? —pregunté preocupada.
Torció la mirada y suspiró.
—Tuvo algo que hacer, pero todo estará bien.
No sabía si creerle, al final no sabía que había pasado con ellos.
—Aidan y él se agarraron a golpes, pero no supe que más pasó —le dije esperando que esto no se hubiera salido de control.
Él se frotó la barbilla.
—Aidan quedo mal y Max se fue antes de que esto escalara.
Ahora estaba más preocupada que antes.
—Ya veo. Solo espero que Max este bien.
Caminé al baño aún pensando en Maximiliano. Quería verlo, saber que estaba bien.
