Capítulo 7...Regresando a la realidad

12.3K 694 12
                                    

POV ALÍA

Salgo del hospital ante las recomendaciones del médico y la mirada de Anton. Sé que nadie me entiende ni nadie lo hará, yo no soy lo mejor de esta manada y lo peor de todo es que Anton no me cree, pero siendo sinceros como le explico lo que pasa conmigo.....ni siquiera el más loco de los locos lo entendería, como decirles que soy una clase de "posesión" de una loba loca y psicópata.

Entramos al vehículo y mientras el carro se mueve, miro como Anton maneja de nuevo a su casa.

En el trayecto, miro mis manos vendadas de blanco y niego con la cabeza. ¿Por qué después de tantos intentos fallidos, no muero? ¿Qué clase de ser sobrenatural soy, para no morir? . Capto la mirada de Anton en mí y eso me pone más nerviosa.

-Estaba pensando...y creo que sería bueno salir a conocer mi pueblo.

-¿Podre salir?

-Solo a que conozcas a la manada Alía, iré contigo.

-Emnnn ¿iremos hoy?

-Creo que es mejor que el día de hoy, descanses. Iremos mañana

-Bueno...- hablo triste.

-Bien, vamos.

Llegamos a la casa y Anton toma mi mano sin mi permiso cuando me ayuda a salir del auto, entramos a la casa y la mirada de sus padres y hermana recae en mí.

-Alía quería nos tenías muy preocupados.

Esquivo mi mirada ante la vergüenza que me causa verla y parece ser que mi acompañante lo nota.

-Iremos al cuarto madre.

Subo de la mano de Anton, ante la mirada de todos y aunque no lo digan, sé que para ellos soy algo extraño, soy la rara nuera que parece loca.

-Pasa - abre la puerta y puedo percatar de inmediato las pequeñas cámaras que se han puesto en la habitación << genial ahora estoy más que vigilada>>

-¿Quiere dormir un poco?

-Sí.

-Ven - me lleva a la cama y me acomoda la almohada.

Ya ahí, miro el lugar y nunca me percate que la cabecera de la habitación de Anton, tiene un especie de magia reflejada ahí, donde claramente se evidencia el universo, con movimiento, es como en las películas, se ven los planetas, las estrellas, asteroides y todo.

-¿Te gusta?

-Es....simplemente hermoso.

-Como tú - me sonrojo.

-No comprendo por qué lo hiciste- agarra una de mis manos vendadas - Pero ahora yo estoy aquí Alía, no tienes nada que temer. Me tienes a mí. - besa mi mano y continua con la otra, haciendo que mis ojos piquen por las lagrimas.

-Hey mi niña bonita, yo siempre estaré aquí. Siempre.

-Soy tan débil - lloro y no se en que momento su pecho fue mi abrigo, pero se siente tan bien que por un momento olvido mis problemas y me relajo con cada una de sus caricias, hasta que finalmente caigo dormida.


-Mi niña bonita.

-Mnnnn - me quejo.

-Preciosa.......despierta - acaricia mi brazo.

Abro mis ojos lentamente y me encuentro con la mirada de Anton.

-Hola

-Hola

-¿Quieres comer?

-No tengo hambre - miento.

-Debes comer, déjame y te ayudo.

Atrapada en ti®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora