Atrapada en ti®

Capítulo 13...Destino.

-Bueno días niña linda.

-Mnnn - me remuevo entre las cobijas.

-Despierta preciosa.

-Tengo sueño.

-Despierta que te he traído el desayuno.

-Está bien - hablo levantándome de la cama.

-Ven - envuelve mi mano junto a la de él y me lleva a la pequeña mesita de nuestra habitación. - Te prepare algo para que comas. Dime hermosa ¿te gusta lo dulce?

-Sí, me gusta mucho.

-Entonces esto te encantara - dice indicándome los pancakes de la mesa. - Tiene salsa de nutella y fresas.

-Que rico.

-Comamos entonces.

Nos sentamos en la mesa y empezamos con el desayuno. Él me sirve el café y el jugo y sonríe mientras lo hace. - Eres muy bonita Alía, la mujer más hermosa que he visto. - me sonrojo y poniendo un mechón de cabello en mi oreja lo miro.

Coloco un poco de nutella en mi tostada y encima de eso las fresas picadas y como gustosa. Pero la mirada coqueta de ese hombre me despista de mi gran objetivo y veo como mira mi labio embarrado de chocolate.

-¿Qué? - digo sonriendo y nunca lo veo venir, cuando su lengua limpia mi labio y paso seguido me besa.

-No hay nada mejor que el sabor de tus besos. - sonrió.

-Excepto la Nutella - hablo feliz.

-Ni siquiera la nutella - dice antes de poner sus labios otra vez en mi boca.

....

-Ni crees que no se nota esa cara de haber tenido una buena noche.

-¿Qué?, eres la peor ¿Cómo dices eso?

-Dime si no has tenido una noche de sexo salvaje.

-¡¿Qué? ¡Claro que no!

-Amelia ¿eres virgen?

-No, no lo soy - hablo triste bajando la cabeza.

-Oye ¿Qué pasa? - me pregunta preocupada.

-Nada.... - desvió la mirada.

-Oye, ¿ es algo de Briana?

-Algo asi ...- susurro casi en silencio.

-Ella ...¿ella te ha obligado? - mis ojos se ponen llorosos y la veo. Ni siquiera sé que cara tengo ya que de inmediato abro los ojos y unas lágrimas salen de ahí. - ¡Oh Alía! - me abraza. - Perdóname de verdad yo no quise. Lo lamento de verdad.

-No pasa nada.

-Pasa mucho. Maldita mujer, es la peor.

Mi cuerpo se acalambra y ya se lo que viene. - ¿Qué dices de mi perra? - habla Briana.

-¿Alía? - pregunta Talía asustada.

-¿Qué decías de mí?

-Que eres una maldita. ¿Cómo le hiciste eso a Alía?

-Tú qué sabes niña, no me colmes la paciencia. No sabes de lo que soy capaz.

-Lo sé muy bien...

-Pero miren que tenemos aquí - susurra una voz a nuestra espalda y de repente una niña de uno 20 años junto a cuatro chicas más nos miran con odio.

-Dos mugrosas humanas - sigue otra.

-¿Qué quieren?

-Queremos que salgas de la manada. Todos están enojados al saber que su Luna es una simple mortal.

-¿Y? ¿Crees que me importa rubia?

-Debería, maldita.

-Largo de aquí - habla Briana enojada.

-No entendiste verdad, te queremos fuera de aquí. Anton merece a alguien como nosotros no una simple humana.

-¿Quieres pelear chica?