CAPÍTULO 16

29 7 1
                                    

Incendio

Me desperté algo mareada todo mi cuerpo no paraba de quejarse, mis articulaciones dolían como nunca y unas extrañas cicatrices habían aparecido en mi espalda. Me encontraba en una camilla acolchada y blandita, muchísimos botes con yerbas escamas y uñas reposaban sobre una gran estantería, todo estaba bajo la penumbra y unos pocos rayos de luz se colaban por aquella extraña estructura.

Trasto - por fin te has despertado, llenas días inconsciente con un subidón de adrenalina y fiereza en el cuerpo, todos creían que te quedarías así para siempre pero ¡te he despertado!

Incendio - ho, gracias pero ¿que me paso para estar aquí?

Trasto - Cuenta la leyenda que los elegidos pueden invocar a sus bestias salvajes, seres fantásticos y muy poderosos, y tu te convertiste en el tuyo.

Incendio - y ¿que era exactamente?

Trasto - un lobo de fuego alado.

Incendio - un ¡que!

Trasto - un lobo de fuego alado, eso he dicho.

Una vez no hace mucho tiempo mi madre fue raptada y asesinada por lobos, me quede con mi padre y mi hermana mayor, fueron tiempos oscuros.

Un chico alto rubio y cachas, apareció por la puerta, llevaba su gema de color fuego al cuello y parecía haber vuelto de un largo vuelo ya que todavía le quedaban algunas escamas por el cuerpo.

Trasto - este es Infernó el anterior líder de la cabaña del fuego.

Infernó - Hola Incendio, todos los días he venido a visitarte y aseguraran de que estabas bien

Yo me sonroje, y me quede decepcionada porque Aquos no me había venido a visitar, como si pudiese leer mi mente me respondió.

Infernó - Aquos ha estado muy ocupado con su cabaña y sus practicas de magia y su transformación en su bestia salvaje, pero yo he estado visitando te todos los días.

Incendio - o es un alago por tu parte.

Infernó - Trasto ¿nos podrías dejar solos? Me gustaría hablar a Incendio a solas.

Trasto - claro me iré a informar a los demás.

Trasto desapareció por la puerta dejando a Infernó y a mi solos, aquel chico me atraía de una forma muy extraña y en mi interior broto un sentimiento que hacia mucho que no había sentido.

Se acercó a mi mientras metía las manos por la espalda para levantarme de la camilla mientras me susurraba al oido - te amo desde que llegaste aquí y mi corazón siempre ha estado ligado a ti-.

Después de aquello empujo mis labios hacia los suyos y nos besamos, savia que esto era algo que no debería estar haciendo pero continúe, y entonces, fue cuando una figura que hacia tiempo que no me fijaba en ella irrumpió en la habitación con una cara de espanto, odio, celos y una profunda tristeza en sus ojos.

Me aparte de Infernó y pude reconocer a aquella figura, era Aquos.

Llevaba una flor con cinco pétalos alargados y preciosos de un rojo intenso, vi como una lágrima se derramaba por su rostro y note como todas las lágrimas que había estafo almacenando se debatían por salir al exterior y desaparecer para no volver.

Aquos - ya veo que has cogido a otro, bien mejor os dejo, solos.

Aquella ultima palabra resonó en mi mente, -solos-, no podía levantarme de la camilla, todo mi cuerpo me decía que no pero mi corazón me empujaba a levantarme y correr tras el, para consolarle y amar a mi verdadero amor.

•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•

Este capitulo va dedicado a Crispí 13 que me dio la idea de este malentendido.
No diré nada mas ¿que creéis que les pasara?

Saga IRA DE DRAGONES, La Nueva EraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora