MI TENTACIÓN(Fanfic Grey)

Capítulo 42

POV Christian

Sólo he ido a Grey house, por que tenía que firmar unos papeles, y eran importantes. Más tarde iré a reunirme con la enfermera, que está dispuesta a decir todo lo que sabe con respecto a Jack Hyde, pero ahora estoy aquí, afuera en el convento, quiero invitar a Anastasia almorzar,Gail anoche cuando me dijo que Ana sólo había venido por alojo, me aconsejó que empiece hacer las cosas bien. Y creo que tiene razón, sólo espero que acepte mi invitación

Salgo de mi audi, mis manos sudan ¿y si Ana ya no quiere verme? ¿ Y si se vino hasta aqui, para olvidarme? ¿Y si ahora decidió que quiere ser monja? Mierda tengo muchas preguntas, y necesito averiguar las respuestas...

Me acerco hasta el portón, observo que hay una monja en la entrada del convento. Ella se da cuenta que la estoy observando, y se dirige hasta donde estoy.

-Buenos días joven- dice amablemente

-Buenos días-

-Dígame ¿que necesita? ¿O desea entrar?- Pregunta

-Estoy buscando a Anastasia Steele-digo

-¿Annie? Ella está ocupada, pero la iré a buscar- ¿ Annie?

La monja se da la vuelta, y se va.

Miro el convento, ¿será aquí dónde se esconden las monjas?

Mi corazón empieza a martillar fuertemente en mi pecho, la espera se me hace eterna, sigo mirando los alrededores. Vuelvo a mirar hacia el convento, y ahi viene caminando a la culpable de que mí corazón cobre vida, de la forma que lo hace.

-¡Christian! ¿ Que haces aquí?- Pregunta emocionada

-Eh.... Vine a invitarte almorzar ¿acepta?- Joder nunca había estado tan nervioso, parezco un estúpido adolescente, esperando por su primera cita.

-¿Estás invitandome almorzar?- Musita

-Si, debemos hablar ¿no crees?-'

-Está bien, pero debo avisarle a la sor Erika-responde.

-Te espero entonces-

Anastasia regresa de nuevo al convento. Al menos ya aceptó almorzar conmigo, pero aún falta mucho para tenerlo en mi cama de nuevo...

-Todo listo-escucho la dulce voz de mi nena

Me volteo a verla, ella viene caminando hacia mí, por fortuna no lleva puesto esa ropa horrible, que llevaba cuando la conocí. Ella va vestida con unos jeans azules, blusa color salmón.

-¿Puedo besarte?- Pregunto cuando ella está junto a mí.

-Está bien-susurra.

Ya no aguanto más, y la tomo por la cintura, con una mano, y mi otra mano, la llevo a su mejilla, la obligo que me mire con sus hechizantes ojos azules, y yo la observo un instante y poseo sus deliciosos labios con mi boca. Anhelaba tanto esto, tenerla en mis brazos de nuevo, compartiendo un beso. Siento como si tuviera mariposas en mi panza. La amo demasiado, no quiero perderla.

Anastasia responde de inmediato, ella abre su boca, y yo aprovecho de invadir su boca.
Nuestras lenguas se reconocen de inmediato, sus manos entrelazan mi pelo. Tiro delicadamente su labio inferior con mis dientes, y vuelvo invadir su deliciosa boca. Mi amigo empieza ponerse duro.

Nos separamos por falta de aire.
Anastasia se sonroja, y mira hacia el convento, no hay ninguna monja mirándonos.

-Menudo espectáculo, que se hubieran llevado las monjas-digo burlón.

-¡Christian!-Gruñe molesta.

-Ya vamos-

Abro la puerta de mi audi, y Anastasia entra,cierro la puerta, rodeo el auto y entro al auto desde la otra puerta, me siento en el asiento del piloto.

-¿Quieres ir a comer a un lugar en especial?- Pregunto mientras enciendo el auto.

-Puede ser cualquier lugar- me regala una linda sonrisa. De esas que hace que mi corazón dé un brinco de alegría.

-Entonces ya sé dónde quiero llevarte- arranca el motor.

Por suerte le pedí a Andrea que haga un reservado en un lujuso restaurante. Quiero que mi nena este cómoda...

Anastasia sólo se dedicó en mirar la ventana, de vez en cuando la sorprendí observandome, y me sonreía. Creo que no está todo perdido.

POV ANASTASIA

Christian me ha traído en un lujoso y hermoso restaurante, me siento un poco abrumada por el lujo, pero la compañía de Christian, logra disiparlo.

-Buenas tardes, soy Christian Grey, y ella mi novia Anastasia Steele- dice Christian a un joven, creo que es el camarero.

-Bienvenidos, acompañenme. Le tenemos reservado su mesa.- Nos dicen.

El joven nos lleva hasta una mesa, que está más separadas que las demás.

Christian aparta una silla, para que yo me siente. Y luego se sienta en la otra silla.

-Una botella de Shiraz del Valle, de barossa-Ordena Christian

-Dos solomillo, al punto acompañado de salsa bearnesa, con verduras y papas fritas.- Añade.

-De inmediato señor- responde el camarero, y se va

Me quedo sorprendida, Christian sabe lo que le gusta, y no se anda con rodeo.

-Estás muy bonita- suelta de repente

-Gracias- digo cohibida.

-Y bien, Anastasia ¿por que te fuiste?- Pregunta.

Me pongo nerviosa de inmediato, y empiezo a jugar con mis dedos.

-Yo te pedí tiempo, y tú me saliste con una propuesta de matrimonio- susurro con timidez.

-Cuando llegue anoche a mi casa, y Gail me dijo que te habías ido, sentí como mi mundo se derrumbaba. Y sentí que no podía seguir viviendo, pero ella me aconsejó que haga las cosas bien- me quedo perpleja, ¿Tanto le importo? De repente me siento una mala persona por hacerlo sufrir, y se me hace un nudo en la garganta.

-No era mi intención hacerte sentir así, es que todo fue demasiado-digo tratando de controlar mis emociones, todo esto me supera.

-Ósea fue por mi culpa- dice con tristeza

-Christian por favor-digo al borde de las lágrimas.

-Pensé que esperarías a que te lleve a un sicólogo, y juntos curar nuestras heridas, nuestras sombras-

-¿Por que haces esto?- Pregunto reprimiendo mis lágrimas que amenazan con salir.

-Por que te amo Anastasia-dice, y siento cómo mi corazón quisiera estallar de alegría.

-Y yo te amo a ti Christian- confieso, sé que él camino no será fácil. Él tiene razón, debemos curar nuestras heridas.

El camarero llega con lo qué ordenó Christian, y ambos nos disponemos a disfrutar...