22- te presento a...

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Rápidamente tomo a Zayn de la mano y lo arrastro conmigo hacia el ascensor. Por suerte el ascensor esta abajo, entramos y las puertas se cierran. Él empieza a reír mientras que mi cara solo refleja seriedad.

— ¿Qué pasa princesita?—pregunta.

— Es que...— pienso unos segundos y suelto una pequeña risa. Es algo tonto esto de los celos.

— ¿celosa?—pregunta.

— Algo así, pero es que es algo estúpido—respondo.

— Solo tengo ojos para ti—susurra.

Se acerca un poco a mí y con su mano derecha levanta mi barbilla y me da un pequeño beso. Las puertas del ascensor se abre y hay una pareja de ancianos observándonos. Nos separamos con rapidez y salimos de la escena. La habitación esta en frente, yo le entrego la bebe a Zayn y procedo a abrir. A los segundos de abrir la puerta un olor a colonia de bebe impregna mis fosas nasales. Todo luce limpio y reluciente, las sabanas de la cama son rojas y al lado hay una pequeña cuna. Tomo las dos maletas y las arrastro hacia adentro. Hay un televisor, tocador y un baño que se deja ver, ya que la puerta se encuentra abierta.

— Creo que me siento como en casa—dice Zayn entre risas.

— No hay que quejarse, todo está organizado y además que hay un estupendo olor que impregna el aire.

Suelto un bostezo y me estiro un poco. Cierro la puerta y me tiro en la cama, lo único que quiero es dormir y despertarme a medio día, pero no va poder ser así ya que Zayn quiere comprarle un regalo a su mamá. Observo detenidamente como él deja con suma delicadeza a la bebe en la cuna. Definitivamente el luce adorable cuando tiene a esa niña en brazos. Da unos pasos hacia la cama y se acuesta a mi lado, tiene ojeras, luce cansado. Poco a poco sus ojos se van cerrando hasta que queda dormido. Le doy beso en la mejilla y procedo a cambiar mi ropa por un pijama. Al estar lista apago las luces y me acuesto a su lado, pasados unos segundos siento como me rodea con su brazo derecho. Amanece y la claridad ataca mis ojos. Hace que me remueva un poco hasta que finalmente los abro. Miro hacia un lado y Zayn no está, solo estoy yo cubierta por las sabanas rojas. Me levanto y doy un salto al sentir el helado piso en las plantas de mis pies. Camino hacia el baño y me miro en el espejo, lavo mi cara y boca. Recojo mi cabello en un tomate y regreso hasta la cama. Al lado en el nochero se encuentra el control remoto, enciendo el televisor y lo primero que saltan son caricaturas así que las dejo. Zayn no debe estar muy lejos ya que ha dejado su chaqueta en la cama. La puerta se abre despacio y por ella se asoma Zayn, quien en un brazo trae a Irina y en el otro una bandeja repleta de comida. Me levanto y lo ayudo con la bandeja, la dejo en la cama y mi boca se hace agua al ver toda la comida.

— Buenos días princesita—susurra y me da un beso en la mejilla.

— Buenos días Zayn—contesto—me dejaste despertar sola—me quejo como una niña pequeña.

— Sí, pero creo que no fue mucho la diferencia... anoche olvidamos cerrar las cortinas y la luz me ha despertado al igual que Irina.

— Son tal para cual, aunque he despertado por la misma causa—confieso—gracias por traer el desayuno.

— La princesita se merece lo mejor.

Sin previo aviso me abalanzo sobre y le doy un beso, no tan apasionado como debería ser ya que Irina se encuentra en el medio, pero supongo que es mi forma de agradecerle, creo que ya encontrare algo más significativo. Procedemos a comer rápidamente ya que necesitamos que nos rinda el día. La única que falta por alistarse soy yo. Dejo reposar el desayuno unos minutos y entro a bañarme. Después de unos minutos de asearme salgo, seco mi cuerpo y voy hasta mi equipaje para sacar un overol blanco, un buzo negro y encima la chaqueta negra.

Everything that I need [ z.m.] #wattys2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora