Everything that I need [ z.m.] #wattys2017

35 Final

Decidimos que la luna de miel seria en Tailandia, pues tiene bastantes sitios para visitar, y además se conoce otra cultura y se sale de la rutina. Hermosos y mágicos lugares. Y además se nos ocurrió casarnos allá. Todo fue tan loco. Una segunda boda. Yo vestía un short jean de talle alto deshilado con un top corto y una gorra, mientras que él tenía una bermuda y una camisilla, además tenía dos semanas que no se afeitaba por lo que tenía una súper barba. Firmamos un papel, luego nos pusieron unos collares típicos de la cultura Tailandesa. Estábamos sentados en el piso, el hombre que hacia la ceremonia dijo unas palabras, de las cuales no entendimos nada, y después hizo un gesto para que nos diéramos un beso y ¡boom! Estábamos casados ante la religión de Tailandia. Luego nos fuimos a un banquete donde... bueno yo me anime a probar un escorpión frito (Debo decir que ese escorpión estaba exquisitamente crujiente)... pero Zayn, bueno el no quiso, solo probo hormigas. Luego fuimos al santuario de la verdad, donde nos subimos en elefante. Fué todo tan sensacional. Fuimos a todas las playas habidas y por haber. Tomamos tantas fotos. ¡Más de mil fotos!... fue una locura alucinante... Zayn se embriago con vino de arroz y duro un dia completo con resaca y vomitando mientras que yo me atragantaba con popiah, un royito de harina que tiene cerdo y vegetales, otra comida que ame fue el pad see ew... simplemente espectacular, son como una especie de fideos, con salsa de soya y otras cosas mas, simplemente delicioso... el pobre zayn lo único que hacia era tomar suero para bebes... le dije: amor no tomes tanto vino de arroz, puede ser fuerte... y el muy tranquilamente contesto: esto no es nada princesita... la noche es joven. Y asi fue como termino en cama y vomitando todo su ser.

Recorrimos gran parte de Asia como mochileros... hasta que llegamos a Europa y bajamos del avión directamente a la ciudad del amor: París, Francia. Mi hogar natal, respirar ese aroma a cruasanes, papas fritas, queso fundido... chocolate, vegetales al vapor... era fan de todo eso. Los niños corriendo de un lado a otro. Mi idioma. Era genial, muchas veces era tedioso tener que estar hablando en ingles todo el tiempo, no había nada como la lengua romance que manejábamos nosotros. Y bueno estando ahí... ¿porque no casarnos ante las leyes francesas? Y así fue como terminamos en una notaría firmando más documentos en donde se constaba de que éramos una pareja ante lo civil ¿algo loco no creen? Pero somos felices... casi medio año viajando y quedándonos en diferentes localidades y ciudad, es lo mejor... nos ahorramos muchísimo en festejar la boda a lo grande, y a cambio recibimos esto... creo que el secreto de la felicidad es viajar y conocer nuevas cosas.

Finalmente en Londres, llegamos a nuestra casa y nos despojamos de todo. Yo imprimí las fotos de nuestro viaje y las pegue en tablas de madera para luego colgarlas en la habitación. También coloqué algunas en la sala.

Me aparté el pelo de la cara con un suspiro y admire mi trabajo. Si duda el tiempo que paso al lado de Zayn no se puede cambiar con todo el dinero del mundo.

Me encontraba en casa con mamá, pues ella estaba algo sentimental ya que los chicos se habían marchado. Yo no me sentía muy bien, llevaba un par de horas vomitando todo lo que comia, hacia doce horas estaba asi... comia y vomitaba, además tenia mucho sueño e iba mucho al baño. Elisa sorientemente me pone una tasa de te de manzanilla en la barra, mientras que yo trato de relajarme un poco para que lo que he comido no salga disparado de mi estomago.

— ¿Por qué esa sonrisa?—le pregunto con la cara verde del malestar. Si se estaba burlando de mi, no era gracioso, me encontraba terrible jamas en mi vida me había sentido asi.

— Ay Harmony cariño—rie— ¿ya llego tu periodo?—interroga.

— No... creo que se cambio la fecha—contesto, pero mi voz tiembla.

— ¿Sabes? Eso eran los mismos síntomas que tenia cuando quede embarazada de Gerard. Los vómitos, las ganas de domir... todo eso, ahora te veo y me recuerda esa época—relata.