18 largo imbécil

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Después de bailar unas cuantas canciones nos detenemos, Londres es frio y aun así algunas gotas de sudor corren por mi rostro. Zayn camina hacia la mesa, mientras que yo opto por ir a comer un chocolate de la mesa de bocadillos. Aun no me encuentro con Estefany puesto que está compartiendo con su familia, más tarde hablare con ella. Me acerco a la mesa que está al lado de la urna de sobres. Miro los diferentes chocolates y dulces coreanos. Camino hacia el lado izquierdo y choco con alguien.

— Disculpe, fue mi error—digo.

Sigo escogiendo chocolates hasta que siento una mano en mi brazo que poco a poco aprieta su agarre. Dejo los chocolates en la mesa y respiro profundo.

— Maldita zorra. Eres una asquerosa desvergonzada, inmunda puta—susurran a mi oído.

Un nudo se hace en mi garganta. Alzo mi vista y ahí está Fred, el veneno que se filtró en sus palabras hizo que me sobresaltara un poco. No debo demostrar miedo, él es solo un humano más.

— Te pido que por favor me sueltes—gruño.

— ¿Cómo te atreves?—cuestiona—bailando de esa manera como lo hace una zorra, un maldita suripanta y en mis narices. ¡Eres una asquerosa prostituta!

Remuevo mi brazo con brusquedad, pero lo único que logro es que el afiance el agarre.

— Entiende imbécil, que tú y yo no somos nada, bien te recuerdo que te deje las malditas cosas claras—digo entre dientes, pues no quiero armar un escándalo.

— Solo para estar con ese remedo barato de turco, para eso, me imagino lo perra que te ves cuando a su cama te lleva, así como lo han hecho miles.

— Te lo advierto, suéltame Fred—amenazo.

Suelta una carcajada amarga y vuelve a su seriedad en segundos. Siento un hormigueo en mi brazo, señal de que no hay buena circulación. No quiero gritar, ni armar un escándalo, pero si es por salvar mi pellejo me tocara.

— Si no me sueltas voy a gritar—gruño

De un momento a otro un empujón basto hace que Fred caiga en la mesa de los dulces. Todas. Suelta mi brazo y yo de inmediato miro a mi salvador. Zayn luce enojado, su respiración es pesada y las venas de su cuello se acentúan. Los invitados se levantan de la mesa y ponen su atención sobre nosotros.

— Te lo dije imbécil que no me dolería patearle el trasero a alguien como tú—dice Zayn.

Yo me acerco a él y este de inmediato me recubre con su brazo izquierdo y con delicadeza soba donde Fred tenía su fuerte agarre. Aquel hombre rubio se levanta con una sonrisa en el rostro, jamás lo había visto de esa forma. Lanza el primer puñetazo y Zayn me empuja hacia un lado, para luego recibir todo el puño en la boca. A pesar de que no hizo que se moviera de su lugar, partió su labio. Este con la misma intensidad se lanza sobre el rubio y empieza a darle vario puños, y Fred como puede se defiende. Siento como si fueran horas, hasta que llegan los guardias de seguridad y los separan. Tengo vergüenza pues he metido la pata en el matrimonio de mi amiga. Estefany llega y me abraza, ella no sabe que Fred en varias ocasiones me golpeo, con el único que compartí esto fue Zayn.

— Yo lo siento—susurro.

— Ya Harmony... hay algo que no me has querido contar

Cepilla mi cabello con un gesto maternal y me reconforta un poco. Me separo de ella y observo a Zayn, tiene el labio partido y parte de su cara esta golpeada. Mientras tanto Fred grita miles de cosas y los guardias luchan para sacarlo de la escena. Zayn se acerca hasta nosotras y nos mira.

Everything that I need [ z.m.] #wattys2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora