Academia Escorpiana

CAPÍTULO 12:

Va a hacerme pedazos... Pensó Sam.

Las manos de Caleb aferraron sus tobillos y el Ariano lo arrojó con todas sus fuerzas luego de darle la vuelta, procedió a correr hacia él y tras levantarlo con un par de patadas, con ambos puños lo volvió a tirar al suelo.

- ¡Eh, Sam, levántate! - Le dijo Caleb, alzándolo y volviéndolo a tirar. - ¡¿QUÉ TE PASA?! ¡¿MUY ASUSTADO PARA PELEAR?!

- ¡Esto es una exhibición de bullying! - Exclamó Bruno, el leonino, apoyándose indignado en las gradas. - ¡¿Nadie va a detener esto?!

- No es posible. - Dijo Jeff, líder de los Leoninos. - Sam debe defenderse por sì mismo. Si pierde el conocimiento o se da por vencido se detendrá el combate. - Suspiró mirando a Sergio, quien, impasible, observaba a Sam ser golpeado por Caleb. - Pero que se diera por vencido sería una deshonra para su academia.

- ¿Y eso por qué? - Inquirió Bruno.

- Has de saber por qué. Los Arianos y Escorpianos siempre están en constante rivalidad... Permitirse perder contra los carneros... - Suspiró Jeff. - Sergio no se lo perdonará, sabes lo testarudo y orgulloso que es.

Sam se puso de pie y se encontró con la mirada se Sergio, quien frunció el ceño. Sam tragò saliva.

Tengo que reconocerlo. Pensó. Contra Caleb...¡No tengo ninguna posibilidad!

Apretó las manos. Sergio no se lo perdonaría si se dejaba vencer. ¡Pero por favor, estaba representando a los Escorpianos! ¡No era Libra su academia ahora! ¡LO CUAL LE INDICABA QUE NO PODÍA USAR EL AIRE Y ESE ERA PRECISAMENTE EL ÚNICO ELEMENTO QUE CONTROLABA BIEN!

Caleb tomó posición de ataque y embistió hacia adelante. Algo en la mente de Sam hizo click y su cuerpo se movió hacia un costado, haciendo que Caleb se dé de lleno contra la pared de la arena.

- ¡OLÉEE! - Gritaron los aquarianos y leoninos.

Es cierto... pensó Sam, mientras Caleb volvía a ponerse de pie. ¡Puedo leer algunos de sus movimientos porque él es una cúspide y yo también! Lo cual... Esquivó otra embestida. Quiere decir que mi mitad libriana lee los movimientos de su mitad Aries que es opuesta y mi mitad Escorpio lee sus movimientos Tauro que son el mismo y tambié...

- ¡SAM, CUIDADO! - Gritó Sergio sin poder evitarlo.

Sam volteó y vio a Caleb arremetiendo hacia él con un cabezaso. Sam alzó una mano y detuvo, casi rompiendo los tendones de su muñeca, el golpe de Caleb.

- Por mi academia... - Gruñó el jóven Libra-Escorpio, sin alzar la vista. - Porque mi maestro que me desprecia cree en mí...

Miró a Caleb, quien abrió mucho los ojos por el terror. Esos ojos... ¡ESTE CHICO ERA UN MONSTRUO!

- ¡NO TE VOY A DEJAR GANAR!

Empujó a Caleb, quién dando una voltereta hacia atrás, aterrizó de pie.

Miró a Sam. Un aura azul negruzca empezó a salir de su cuerpo, y de esta se formaba un aguijón con cola. Era traspasable pero a la vez al chico en las manos le aparecía el mismo aura con forma de pinzas.

Caleb sonrió, y de él comenzó a salir un aura rojo sangre.

- Yo no pensaba ponerme así. - Dijo el Ariano-Tauro. - Pensé que no valía la pena...¡Pero qué más da! - Su mirada se tornó demencial. - ¡Vamos a divertirnos un poco!

Tomando cierta posición con manos y pies, logró formar su constelación de carnero con sus cuatro extremidades. En su cabeza el aura tomó forma de cuernos de carnero y patas del mismo.

Sergio abrió los ojos, muy asustado, y se acercó a Arian.

- ¡ESO ES CONTRA LAS REGLAS! - Gritó. - ¡Y ES UN ENTRENAMIENTO, DETÉN A ESE CHICO!

Arián se encogió de hombros.

- Sam se lo ha buscado solo. Además, él empezó.

Caleb reteocedió y luego embistió hacia adelante, usando sus cuernos y posicionando sus extremidades como patas de carnero.

Sam se mantuvo quieto y alzó su aguijón.

- ¡QUE ALGUIEN DETENGA ESTO AHORA! - Gritaba el público.

Una silueta muy rápida saltó en medio de ambos alumnos, deteniendo ambos ataques con las manos y el aura color tierra de una cabra se vislumbrò luminosamente. El lugar se llenó de una luz cegadora y de un grito incontrolable.

Sam cayó al suelo y Caleb también. Ambos carecían de aura.

Posteriormente, Rodrigo, líder de los Capricornianos, cayó de rodillas a unos metros de ellos.

Uno de sus brazos estaba quemado y el otro estaba casi deshecho.

-Veneno y fuego bélico... - Murmuró Fugán, aterrorizado. - ¡Oh,no!

Bajó rápidamente a la arena y se arrodilló ante Rodrigo.

- Papá... - Murmuró este. - Yo lo hice... Detuve los ataques y salvé a dos de las...

- Shh... ¡Cállate! - Ordenó Fugán. Rodrigo por poco cae al suelo de lo débil que estaba. Una mitad de su cuerpo comenzaba a deshacerse producto del veneno y la otra se comía por el fuego bélico. - Lo has hecho bien, hijo. Estoy orgulloso de ti.

El lugar entero se quedó en silencio. Los capricornianos miraron atentos a su jóvem maestro de veinticinco años, quien de un momento a otró dejó de respirar sin cerrar los ojos.

El lugar se volvió negro y se vislumbró la constelación de Capricornio. Una estrella ascendió hasta estar dentro de esta misma. Los sollozos de Fugán no tardaron en escucharse.

- Estoy muy orgulloso de ti... - Sollozó el cúspide.

Los demás maestros mantuvieron el silencio. Sergio apretó los puños.

- ¡Mierda!

El chico de quince años no podía manejar bien el elemento agua, el de su academia, Escorpio. Un niño se acercó a él, trotando, daba la impresión de ser un bebé cabra.

- Oye, - Le dijo. - ¿Cómo te llamas?

- Sergio. - Respondió el otro.- ¿Qué es lo que quieres?

- Yo pues nada, - Dijo el niño. - Me llamo Rodrigo, soy capricornio y tengo siete años. ¿Y tú?

Sergio lo miró.

- Me llamo Sergio, Escorpio, quince años.

- ¿Eres escorpio? ¡Eso suena divertido! Dicen que nuestros signos se llevan bien. ¿Quieres ser mi amigo? - Miró al suelo. - La verdad es que soy nuevo y no conosco a nadie...

Sergio sonrió. ¿Capricornio? Con razón ese niñato le había caído tan bien.

- Vale, pero no me molestes, que estoy entrenando.

El líder de los escorpianos se acercó a su alumno, el cual estaba inconsciente, y lo levantó sobre su espalda. Arián se acercó a hacer lo mismo con Caleb y Sergio le miró con los ojos brillantes de rabia y deseos de venganza.

- Esta muerte... - Gruñó quedamente. - ... La de mi mejor amigo es solo culpa tuya... Sam no lo hubiese atacado si no se sentía amenazado... Así somos los Escorpio. Yo te juro, Arián, por mi aguijón ¡Que no vas a salir libre de esta!

Volvió hacia sus alumnos.

- ¡Muévanse, mamarrachos! ¡Vámonos ya a la academia, este entrenamiento acabó!

Nota: ¿Aparece el capitulo completo? Porque a mí me sale en borrador que está escrito pero cuando lo quiero ver aolo sale la primera linea... avisenme por favor :'v