Después de 12 años Louis ha sabido como ser padre... más o menos; y se siente orgulloso de como la niña de 5 años que conoció ahora es una chica de 17. Sin embargo no puede evitar seguir tratando a su hija como si todavía fuera una niña.
Diversos ac...
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Tiempo. Una magnitud física que utilizamos para medir el pasar de los segundos, minutos, horas, días, meses, años... Y sinceramente...
...Había pasado tiempo. No tanto como desearía pero, el suficiente para ponerse a pensar de lo que había pasado a su alrededor durante esa fracción de tiempo.
Exactamente había pasado un mes y medio desde que Amber fue castigada por sus padres- o mejor dicho su padre Louis-. Un mes y medio desde que Marcus se había ido a vivir con los Tomlinson, pero que actualmente estaba rentando un apartamento cerca del instituto y con un trabajo de medio tiempo con el cual puede compaginar con sus estudios. Mes y medio desde que Dan no había vuelto a hablar con su hermano y se negaba a aceptar sus sentimientos por Amber. Y mes y medio desde que Nick les había comunicado que debía de marcharse al extranjero porque había recomendado por una universidad americana para su formación en derecho.
No obstante, todo no era drama y lágrimas.
Como Amber durante su ''encierro'' en su casa, empezó a practicar baloncesto puesto que en el jardín trasero de su casa podía encontrar una cancha de baloncesto que fue instalada cuando ella era pequeña. La verdad es que era realmente buena en el deporte, por lo que un día su mejor amiga le aconsejó que se uniera al equipo femenino del instituto.
—Deberías de unirte al equipo femenino, eres muy buena- le decía Kate a su amiga mientras ésta practicaba tiros de tres, y a medida que acertara una canasta se iba alejando del aro.
—No se yo Kate...- decía dubitativa.
—Oh...¡Venga!- le dijo ya un poco mas enfadada- ten un poco más de confianza de ti misma- le dijo con una sonrisa.
Por ese mismo motivo, por tener un poco mas de confianza en ella misma, se encontraba enfrente de las puertas del gimnasio para ver si podía entrar en el equipo. Estaba realmente nerviosa. ¿Y si le hacían una prueba y fallaba? Sería algo que no podría tolerar, y puede que sea una vergüenza para ella. Era una Tomlinson a fon de cuentas... el orgullo estaba muy presente.
Cogió aire por la nariz y lo botó por la boca. Estaba decidida. Aquel no era el momento para tirar la toalla. Agarró más fuerte las asas del bolso de deporte que llevaba colgando del hombro -por si la llegaban a admitir en el equipo- y abrió las puertas del gimnasio.
El sitio era enorme, y estaba dividido en dos partes. En una mitad de la cancha estaban entrenando el equipo masculino, y en la otra mitad el equipo femenino. Su vista se paseaba por toda la cancha y sus ojos no pudieron reparar en los sudorosos cuerpos masculinos que se encontraban a su izquierda.
Sacudiendo la cabeza con un ligero sonrojo al imaginarse a esos chicos con el pecho descubierto... se le rompían los esquemas en su cabeza; alzó la cabeza y se dirigió hacia el lado opuesto de la cancha hasta llegar al equipo femenino. Allí se encontraba una mujer de no mas de treinta años, alta, delgada, un intenso pelo rubio y unos ojos verdes como esmeraldas. La mujer al percatarse de la presencia de Amber, se acercó a ella.
—Hola, ¿puedo ayudarte en algo?- le dijo cordialmente aunque su rostro se mantenía serio.
—Am... yo...- sentía como le empezaban a sudar las manos , las cuales agarraban mas fuerte las asas que tenía entre ellas; y como se le trababa la lengua al hablar. ¿Esto que era? ¿Un examen? Sin comparación. En estos momentos Amber prefería mil veces estar en un examen de su peor asignatura, que estar ahí de pie delante de una mujer la cual era bastante intimidante.- Me preguntaba, si sería posible que pudiese entrar al equipo.
La mujer la miraba de arriba a abajo escrutándola detenidamente. No parecía que fuese débil, al contrario, podía notar un aura de una fuerza inimaginable, lo cual le causó un escalofrío por la espalda y que los pelos de la nuca se erizaran. Realmente podría ser un buen fichaje para el equipo. No es que sea malo, pero tampoco era excesivamente bueno.
Dando un suspiro asintió- Dime tu nombre, clase y en la posición con la que juegas. Tienes que tener en cuenta que hay jugadoras de segundo y tercer año como titulares que llevan más tiempo que tu, por lo que se te será difícil ser un titular, pero dependerá de tu evolución- le comentó mientras la chica asentía.
—Am... Soy Amber Tomlinson de la clase 2-C, y soy buena como alero y ala-pívot, aunque también puedo jugar en cualquier otra posición exceptuando la de pívot debido a mi altura- sentenció con una sonrisa nervisa.
—Jum...- la entrenadora puso sus dedos indice y pulgar en sus barbilla- No creo que seas mala jugando de pívot, pero si se vería debilitado nuestro poste bajo- contradijo- Bueno, como veras no te voy a admitir al equipo tan rápido, tendrás que hacer una prueba junto a otras chicas que de suerte hoy también han venido para entrar al equipo.
En realidad se lo esperaba. Sabía que no iba a ser fácil el entrar al equipo, pero no imposible.
Dirigiéndose a los vestuarios, se cambió de ropa a una más cómoda, se colocó los tenis para el baloncesto, y se amarró el pelo en una cola de caballo. Una vez lista se dirigió de nuevo a la cancha, la cual se había despejado para dejar paso al equipo femenino que disputaría un partido, mientras el equipo masculino se sentaban en las gradas para poder verlo
—¡A ver! ¡Escuchen todas!- alzó la voz la entrenadora- Como hemos visto, tenemos cinco nuevas novatas las cuales quieren ingresar en el equipo- dijo señalando a las nombradas- pero como sabéis, esto no es tan sencillo- comentó mientras una sonrisa malévola tiraba de sus labios- Os voy a evaluar mediante el partido que tendréis con las titulares, pero que sepáis que aunque ganéis, vuestra entrada al equipo no estará asegurada. ¡Eso es todo!- dijo para después ver como las novatas se reunían para hablar de alguna estrategia para utilizar contra sus rivales.- Esto va a ser emocionante...- dijo la entrenadora en un susurro mientras veía el aura que comenzaba a emanar de los diferente equipos.