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Las semanas fueron pasando sin tregua, cada vez quedaba menos para acabar el año y para salir por fin del establecimiento. Michael ni cuenta se dio cuando estaba ya parado junto a todos sus compañeros recibiendo un diploma, y apagando el fuego de la vela que iluminaría su camino desde ahora. La ceremonia terminó, todos salieron ordenados en busca de sus padres, Michael en cambio salió corriendo hacia el salón a buscar su poleron, luego volvió y se encontró con sus padres los cuales le abrazaron con fuerza felicitándole por haberse graduado, Michael les abrazó también con una sonrisa, estaba feliz.

— ¿Te vas a despedir o nos vamos no más? —Interrogó el padre, Michael sonrió negando, sólo quería irse de allí, después de todo él había dicho que saliendo de ese lugar no volvería a ver a nadie más, o esas eran sus intenciones.

— ¡No seas así! ¡Ve a despedirte como corresponde! Mira, allí está Luke, ve —Obligó la mujer, Michael caminó hasta él y simplemente se despidió con un apretón de mano.  

Quiso irse nuevamente pero llegó su profesor jefe a hablar con sus padres y sus amigos le llamaban para que se sacaran una foto grupal. Observaba a su al rededor como otros estudiantes lloraban, él en cambio no comprendía el porqué, él estaba feliz.

Mientras iban en el auto se percató de que pronto sería su cumpleaños, y la cuenta regresiva comenzaba.

A los veinticinco años, se suicidaría, eso lo había planeado desde que tenía catorce años más o menos.

[…]

El día sábado, Michael estaba tinturando el cabello de su madre en el patio trasero, de pronto por el pasillo de la casa apareció Luke con un piercing en el labio. El chico saludó a la madre y al joven, Michael quedó embobado con el arete.

—Creí que ya no volvería —Mencionó Michael refiriéndose al piercing de Luke, este se encogió de hombros.

—También yo, pero que va —Dijo encogiéndose de hombros— Tía ¿No le da miedo dejar su cabello en las garras de este chico?

—¡Cállate Luke! —Exclamó Michael, la mujer sonrió.

—No, él sabe hacer este tipo de cosas, además sabe que si queda mal estará castigado —Bromeó la mujer, Mike hizo un puchero y Luke sonrió.

MIKE IS A CAT 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora