Yanira durmió tranquila, pero César no. Se levanta bien de mañana y siente un malestar en el estómago. Él va a conectarse a facebook y le dice a Yanira que se aliste que él pasará en unos minutos a su casa. Yanira por suerte dejó encendido su celular y le suena la campanita de los mensajes y ve lo que César le puso. Levanta su mirada y sonríe, se siente muy feliz y se va arreglar. Se hace sus peinados locos de siempre con su ropa rara. Con miedo sale de su cuarto de puntitas. Abre la puerta suave y respira aire puro de la mañana, hace mucho frío que agarra su suéter y se lo pone. Se queda parada como por cinco minutos esperándolo y él llega con el carro de Raúl, es decir, de su supuesto papá. Baja muy rápido del auto y se raspa con la orilla del carro, luego la abraza suavemente y besa. Ella siente con sus besos un diferente afecto al que le sentía antes, lo ve a los ojos y mira que los tiene muy cansados y rojos. Sólo lo abraza fuerte y le dice -no te preocupes, yo creo en vos- él cierra los ojos lentamente y deja ir un nudo de su garganta, se relaja un poco más. La besa en su frente, la mira a los ojos con mucho aprecio y le dice -muchas gracias por ser tan especial conmigo- Yanira nota que no esta igual que los anteriores días, pero sabe que esa nueva personalidad que él tiene la llena más de felicidad y vida. Con sus manos lo toca en sus labios suavemente con ternura, su cara la deja ir a su pecho mientras escucha latir su corazón y le dice -nunca me dejes, nunca me engañes- César con mucha angustia y miedo comienza a sudar, le dice -¿engañarte? No digas eso, no, me haría mucho daño engañarte... No, no lo digas ni bromeando. Yo no te puedo engañar- cada vez se pone más nervioso y dice en su mente "estoy perdiendo la razón" sus labios se le caen, junto con sus ojos, por la culpa que siente y dice -no, no puedo seguir ocultandote el porque...- Yanira preocupada le dice -¿el por qué de qué? Decime- César le dice -el por qué estoy sintiendo esto con tanto miedo, tanto miedo a quererte, tanto miedo a ocultarte cosas- Yanira confundida -¿miedo? Pero miedo de eso, ¿por qué?- César se muerde sus labios y cierra sus ojos por unos momentos mientras le comienza a salir lágrimas, le dice -no, nada. Me gusta pasar con vos es sólo eso- Yanira le dice -¡no decime!- lo seca de sus lágrimas. César -sólo encuentro maravilloso que nos veamos cada día. Ven vamos al parque- la jala de una mano con cuidado y le abre la puerta de su auto, la lleva para el parque.
Ya están en un parque muy lindo.
César le sonríe -Yanira, quisiera conocerte aún más de lo que te conozco- Yanira lo agarra de la mano y le dice -claro que sí mi amor, ¿cómo en qué?- se sientan en una banca bonita. César -quisiera saber cómo te va con los bichos y las bichas en la escuela, con tus padres, etc- Yanira -mmm vergón, todos mongolos, pero vergón- César -quisiera que fueras sincera conmigo- Yanira riéndose -estaba bromeando. Pues mira, la verdad... No tan bien, pero me basta ser feliz con sólo verte- César la mira a los ojos por cinco segundos, luego mira el palo de cerezos. Le dice -sí, pero quiero que me lo contes más detalladamente- Yanira baja su mirada -es que... Te podes avergonzar- César la mira a los ojos -te juro que no- Yanira voltea a ver a la izquierda, derecha, frente y luego hacia abajo. César -decime, confía en mí-
*FLASH-BACK*
Yanira -bueno, es que no sé porque desde pequeña me han tratado de pasmada, o sea, si sé que he hecho estupideces, pero a cada una las han visto como que si fueran grandes errores... No sé si traeré tan mala vibra, y bueno soy bien distraída (se ríe) por ser así me he perdido muchas veces. Por ser la "pasmada" que muchos dicen, me han discriminado en cualquier faceta de mi vida, no han podido conocerme bien, porque no soy esa pasmada que todos creen conocer, yo sé muchas cosas de las que quizás más de alguno no sabe- se agarra de sus cachetes y dice -¿qué dije? Admiti que no soy una pasmada- sus ojos les brillan. César la agarra de una mano y se la pone en su cara, le dice -es que no sos pasmada, y por primera vez lo estás reconociendo. Por más difícil que te parezca, debes de tener buena autoestima para poder demostrarle a los demás quién sos en verdad- Yanira se pone helada y le dice -lo malo es que es difícil, porque toda mi vida se han dedicado en decirme cualquier cosa y yo por miedo no les digo nada- César -y por tu inseguridad, es que nadie te guarda respeto, por tu inseguridad te ven así, cuando no se han podido dar cuenta de la gran persona que sos- a Yanira se le comienzan a salir unas lágrimas, César la abraza y la soba de sus brazos -tranquila, todo estará bien, se feliz, no te compliques, se vos misma y sobre todo querete- César se da cuenta que le esta dando consejos, y sabe que eso no es común en él. Se pone rojo. Yanira se seca las lágrimas y le dice -bueno, yo ya te conté lo mio, ahora contame sobre tu vida- César triste -es que... Si te cuento de mi vida, quizás te haga sentir muy mal. Y no, yo quiero que estés feliz de verdad- Yanira -contame igual, vos sabes que yo aguanto lo que sea- César -no mi Yanira, no digas eso- Yanira interesada le dice -¡por favor César decime! Yo te he contado sobre mi vida- César se toca su cuello
*FLASH-BACK*
-Ok... Cuando tenía 10 años de edad, mis padres trabajaban en donde yo vivo, contrataban muchos meseros, llegaban más personas a disfrutar con su familia y a meterse a las piscinas, todo era muy chivo y bonito. Pero un día mis padres estaban discutiendo por la mañana y tenían que ir a pagar la casa a los bancos, la ultima vez que los vi, fue cuando se subieron al auto discutiendo por tonterías, más mi papá que trataba a mí mamá como una zorra... Mi papá arranco rápido su carro de la furia que tenía. Unas horas más tarde (se le salen las lágrimas) me anunciaron que mis padres habían muerto porque mi papá se estrello en un poste eléctrico. Yo me tire al piso y comencé a gritar ¡no! ¡No! ¡Mamá! ¡Papá! ¡No por qué! ¡Yo los amo! Con muchas lágrimas, sentí que iba a estar solo, ellos eran con los únicos que yo podía confiar, los únicos a los que les podía entregar amor sincero y confianza. Yo no volví a ser feliz y tampoco volví a confiar en alguien más, a los únicos que les pude brindar mi confianza fueron a mis padres y a Raúl (se ríe) "disque es mi papá del alma" en estos momentos ni siquiera le importa qué es lo que haga- Yanira está muy asustada, con los ojos muy abiertos y su boca. Lo mira a los ojos y le dice -lo siento, no sé que decirte... Yo quiero que seas feliz, así yo podré estar feliz- César llorando intenta tener una sonrisa en su rostro y le dice -Yanira, yo podré ser feliz si vos sos feliz- Yanira -¿sabes? Me podes incluir como una persona a la que le podes tener más confianza de la que le tuviste a tus padres o a Raúl ¡sabes por qué! (Se le aguda la voz) porque yo... Yo... (Se le baja el tono) ¡yo te amo! Y mi corazón desde ahora y por siempre se entrega para vos-
A César le comienzan a brillar los ojos y suspira, la mira a los ojos muchas veces y se le eriza la piel. Comienza a sentir un hormigueo en su estomago con mucha confusión "¿qué me está pasando?" "siento la necesidad de decirle que la quiero mucho y de besarla mucho"
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La Pasmada de Yanira
RomanceLa pasmada de Yanira, son escritos sin sentido y que me la pasé de risa, se ve algo la cultura salvadoreña. A la larga no está ni finalizada, porque para qué. En parte realizarla me ayudó a mejorar mis dibujos en digital.