La pasmada de Yanira, son escritos sin sentido y que me la pasé de risa, se ve algo la cultura salvadoreña. A la larga no está ni finalizada, porque para qué.
En parte realizarla me ayudó a mejorar mis dibujos en digital.
Alexis llega a su casa y abre de un solo la puerta y se mete para ir al baño a surrar -esto necesitaba, surrar después de sufrir tantas ahuevadas- en su baño no hay papel higiénico, así que se pone el pantalón, sale del baño y va a recortar unas tiras de tela y así se limpia. Suena su celular 🎶yo soy tu amigo fiel ¡yo soy tu amigo fiel! 🎶🎵 mira que es de un número desconocido y lo ignora. Vuelven a llamar y lo cuelga, vuelven a llamar -puya que joden- contesta *somos nosotros y queremos saber qué ondas ¿ya la mataste? ¿Y lo qué te ibas a robar qué paso?* Alexis -mmm no sé… Siendo sincero no sé quiénes son- *No te hagas el pendejo que bien sabes que somos los pandilleros* Alexis -No caigo todavía- *Deja de hacerte. Puta pasámelo maje... mira Alexis “nombre de bicho malia” si sos culero y no la pudiste matar decinos de una vez, porque o si no la cosa se va a poner más yuca. Vos decidís* Alexis -ah sí, ahuevo, ya me acorde. Ajam, sí va- *deci pues ¿la mataste?- Alexis del miedo no responde por cinco segundos. *Ni modo, despedite de tu hermana* Alexis -¡cómo no! ¡Sí la maté!- *Va orale, ahora vamos a ver si es cierto* Alexis se ríe -Jaja puta ustedes bien saben que soy como un pitbull va, hasta mi nombre malia lo dice- *yo tuve un amigo llamado Alexis que lo mataron por pajero, ojalá no te pasé lo mismo* Alexis nervioso -Jaja puu juela qué mal por él va que sí jaja, yo pienso va Jaja, que aunque sea un poquito de compasión debieron de sentir Jaja, pero va, es opinión de cada uno Jaja, igual yo no te estoy metiendo casaca ¿vos pensas qué soy pajero? Me conoces bien poco papá- *Ojalá que el de abajo te oiga bicho marica* Alexis -¿y cómo piensan comprobar qué lo que digo es mentiras ah?- *ayy mono cerote pobresito de vos si no es verdad oís. Sólo eso te decimos, porque nosotros ya conocemos a esa bicha que supuestamente mataste* Alexis -ve y ¿cómo la conocen? Yo no les dije quién era- *a ya vez dundo* le cuelgan. Alexis sudando demasiado -puta ya la cague, ya me dieron ganas de ir a surrar de nuevo-
Yanira y Marcela con el taxi van pasando por las calles de San salvador.
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Yanira alegre -me siento como en Miami- Marcela -no fregues vos, nada que ver- Yanira -déjame soñar tía- Marcela -hablando en serio, es bien bonito aquí, ya vas a ver que la vas a pasar bien chivo y por veces pasearemos por Santa Tecla otro lugar bien bonito- Yanira -a mí me han dicho que por el paseo del Carmen es bien chulo- Marcela -sí, ahí hasta artistas llegan- el taxista de chute les dice -mmm sí, pero yo siento que ustedes un vergo de pisto van a gastar yendo al hotel y luego a Santa Tecla ¿no lo creen? Igual ta chivo Santa Tecla como siempre- Yanira -de eso no se preocupe, se encargará mi tía- Marcela -sí, yo pago todo- el taxista -a pus ustedes me caen rebien- se ríe. Marcela -¿viste Yanira? Aquí en San salvador el ambiente es diferente, súper bueno-
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Yanira -pues sí es bonito, pero no hará cambiar mi personalidad de pasmada- agacha su cabeza. El taxista -pus ¿usted por qué dice eso señorita?- Marcela -mire ella tiene baja autoestima, tal vez le pague un psicólogo pronto- el taxista -¡ay mija! Si es por lo que les dicen otros, pus ya qué, ignorelos que son ellos los pasmados y no usted, por no saber lo que le dicen- Marcela -ya vez Yanira, no les hagas caso- siguen pasando por las calles.
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César intenta levantarse de la cama, pero no tiene suficiente fuerza para lograrlo. Mira a la ventana y recuerda a Yanira con sus peinados raros, y le brillan los ojos con tristeza. -No quiero seguir así, quiero tenerla en mis brazos y nunca soltarla, que me perdonará y amarnos por siempre- mantiene una imagen de ella en su cabeza, que comienza a medio levantarse -debo de hablar con ella, solucionar las cosas- le duelen sus brazos, saca sus pies y se cae de la cama. -Debo de aclararle las cosas- se vuelve a levantar temblando y se quita los sueros, camina rápido para abrir la puerta e irse del hospital.Una doctora lo ve y le dice -¡Joven César! ¡Debería seguir reposando! – César molesto - ¿qué no me ve? Estoy bien- la doctora lo jala de los brazos, César -¡ah! Me duele, suelteme- la doctora molesta -¡tenes que seguir reposando! Ush- César - ¡suelteme! ¡Augh! – la doctora -bueno, entonces pediré ayuda a otros para que lo vuelvan a poner en su cama- César -me parece bien, vaya- la doctora -¡pero te tenes que quedar aquí! – César -se lo prometo- la doctora -mmm de acuerdo- la doctora va a llamar a otros doctores. César aprovecha para huir y camina lo más rápido que puede, hasta encontrar la salida. Algunos afuera del hospital se quedan extrañados al ver a un bicho corriendo en short y sin zapatos. Los doctores están asustados por qué no saben en dónde está Cesar. La doctora -¡pero él me prometió qué aquí se iba a quedar!-
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El doctor -deberás que ese bicho está re loco ¿cómo se va solo y en esas condiciones? - - ¡nuestro deber es salvarlo! ¡Así qué a buscarlo! - la doctora -te pelas Diego-
