"Cambiando el destino"

Capítulo 11: "Revelación"

Los reyes entraron dentro del castillo junto al par de jóvenes y tomaron asiento. Los reyes se sentaron juntos, mientras Gokú se sentaba en uno de los muebles solo al igual que Vegueta lo hacia en otro mueble.

Los reyes miraban impresionados al joven cabello de flama, mientras Gokú no comprendía que es lo que estaba sucediendo en esos momentos.

¡Discúlpenme que me haya atrevido a venir así¡ pero hace poco me acabo de enterar de mis verdaderos orígenes al ver la foto que publicaron en una revista, decía Vegueta.

Pero una foto no es suficiente para probar ser hijo de mis padres, dijo Gokú con tristeza interrumpiendo al joven cabello de flama.

Crees que mi parecido con el rey es casualidad, tú que te autoproclamas su hijo no te pareces nada a ninguno de mis dos padres, pero si a este hombre, dijo Vegueta entregándole a Gokú y los reyes una foto que tomo del álbum del que creyó su abuelo, en donde aparecían Bardock, Gine y Gohan.

Gokú miraba atónito la foto al igual que los reyes que al mirar la foto levantaron la vista y se encontraron con la mirada entristecida del jovencito de cabello alborotado al que tuvieron a su lado durante 18 años como a un hijo.

Ese hombre que ves allí y esa mujer son tus padres, el hombre mayor que esta junto a ellos es tu abuelo, se llama Gohan y tus padres se llaman Bardock y Gine, ellos están muertos, solo te queda tu abuelo, dijo con frialdad Vegueta.

¿Cómo pudo suceder algo así?, dijo consternado ante la revelación el rey.

En realidad no fue culpa de ellos si no de una negligencia en el hospital, si no hubiese sido por este compromiso que decidieron publicar en una revista seguiríamos en el engaño, dijo Vegueta.

¿Una negligencia?, dijo la reina.

Si madre, nos cambiaron al nacer por error, su madre lo tuvo el mismo día que tú a mi, no se que paso en esa sala, solo sé que dos mujeres tuvieron el mismo día en la misma sala de operación a sus respectivos bebes, una era una mujer plebeya que murió el mismo día que trajo al mundo a su hijo pues minutos antes sufrió un accidente de bus donde murió su esposo y la otra era la reina de la Capital Este, los motivos por los que fuiste a un hospital no los conozco, solo sé que en ese lugar me cambiaron mi destino y me hicieron vivir durante 18 años como un miserable, mientras otro disfrutaba de todo lo mío dijo con rabia Vegueta.

Gokú al escuchar la revelación empezó a derramar lágrimas de tristeza al saber que nunca podrá conocer a sus verdaderos padres. ¿En dónde vive mi abuelo?, dijo el joven de cabello alborotado con la voz entrecortada.

En la Capital Central, dijo Vegueta.

Jardín:

Los últimos invitados y periodistas se retiraban sin comprender el motivo de la cancelación del evento.

Mientras tanto una bella jovencita pelinegra se encontraba parada con la mirada llena de tristeza mirando hacia la puerta principal del castillo.

No entiendo que paso, decía intrigado el gigantesco rey.

Esto debe ser un mal sueño, decía la joven princesa sollozando.

Pues no lo es hija, o tuvieron dos hijos a la vez o Gokú no es hijo del rey como dice ese joven y de ser así, tampoco eres tú su prometida sino del otro príncipe, decía el gigantesco rey con preocupación.

Mientras tanto:

¿Qué estará pasando?, decía Lunch.

Muero de curiosidad, decía Marón.