Narra Bradley.
Después de esa corta "conversación" con mi mamá volví a la habitación con Nohemí y Marta, supongo que mi querida prima se había vestido ya, así que entre sin tocar. Lo primero que recibí fue un chancletazo en las bolas, me doble sobre mis piernas mirando el suelo y me lleve las manos a mi parte más vulnerable mientras escuchaba la risa endemoniada de mi prima después de ver donde había dado aquel fusil.
-Lo siento, que pena.- dijo Marta y río nerviosamente, nunca había oído una risa más hermosa.- juro que fue un accidente, le quería dar a..., -Nohemí la interrumpió tapandole la boca. ¿A qué le quería dar Marta? ¿y por qué mierda Nohemí no la dejo terminar de hablar?, pero me daba igual, me dolían horrible las bolas en ese momento.
-Creo que Marta ya dijo mucho.- dijo Nohemí y río endemoniadamente mientras yo me acomodaba sobre su cama y veía la cara de Marta sonrojada sofocando una risa, yo no aguante más sus caras y empece a reírme en conjunto, Marta me quedo mirando sorprendida y soltó una carcajada.
-Ya pues, se están riendo de ese pequeño accidente como si no hubiera un mañana.- logré decir entre risas.
Nohemí me miro y sigo riendo como una loca.
Marta interrumpió su hermosa risa y dijo: -¿pequeño accidente? casi te dejo sin hijos.- y reímos de nuevo.
La pequeña Yamiliana también se estaba riendo confusa, porque estaba tan metida en la comiquita que estaba mirando que seguramente no vio lo que acababa de suceder a su alrededor hacía solo segundos.
-Sus risas se escuchan en la avenida.- nos interrumpió mi tío Bernardo y todos lo miramos divertidos por aquella situación.- ¿Que pasa aquí?.- preguntó mi tío ladeando la cabeza divertido.
-Marta casi deja a Brad sin su único atractivo para las mujeres.- dijo indiscretamente Nohemí e hizo sonrojar a Marta.
-¿Estas loca?.- grito Yamiliana.- mi primito Brad es hermoso y de grande yo me voy a casar con él; ni que le hubiera pegado en la cara.- nos interrumpió la pequeña Yamiliana con una sonrisa triunfante mientras corría a sentarse en mis piernas.- ¿verdad que sí Brad?.- me miro con una mirada tierna haciendo puchero, ese era el tipo de cosas a las que nunca podía resistirme con aquella pequeña traviesa.
-Claro que sí mi pequeña princesa.- le dije con mi mejor sonrisa.
-Si si como no, aquí todos sabemos que nunca te vas a casar querido primo,-dijo Nohemí a lo que Marta enarco una ceja interesada.- ¿o se te olvida que yo ya te barrí los pies?.
Me reí, ésta era la mejor parte de estar en ésta casa con ésta familia, todo era siempre una mamadera de gallo sin importar de que o quien se tratara.
Nohemí siempre se reía de todo, era como que tu le decías "oye Nohe, pudin" y ella primero te decía "tu eres marico, loco" y después se echaba a reír como endemoniada, aunque Marta, wow a Marta era difícil hacerla reír.
Sonó el teléfono de Nohemí y ella respondió con su sonrisa brillante interrumpiendo su carcajada: -Ja, aloh.
Y luego la cara le cambio a seria mirándonos a todos en la habitación, algo malo había pasado a Nohemí difícilmente la hacía poner triste o seria.
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Hola mis niños hermosos, espero les este gustando hasta ahora la novela<3 lo hago con todo el amor del mundo.
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Relatos De Un Venezolano.
RandomEsta es la historia de Marta, una muchacha Venezolana que todos los días tiene que enfrentarse a la inseguridad que hay en su país, se despierta cada miércoles a las cinco de la mañana, cuándo le toca a su número de cédula para ir al supermercado a...