Narra Marta.
Nunca había pasado por una situación parecida a la cual estaba pasando ahora, ¿nunca les ha pasado que quieren salir corriendo a esconderse en su cama como si su cama fuera una cueva donde nadie los va a encontrar jamás? Pues me estaba sintiendo así mismo en este momento.
No debí permitirle al primo de Nohemí que me besara pero fue muy rápido apenas me dio tiempo de hablar cuando ya el había chocado contra mis labios, ni siquiera fue amable, aunque tuviera unos labios tan gruesos y suaves que tuve que hacer una lucha mental para separarme de aquel personaje.
Y ahora no podía parar de pensar en aquel sujeto de ojos verdes intensos, no podía evitar sentir ganas de ir corriendo a besarlo nuevamente.
-Pero yo sé que esto se me va a pasar.- me digo a mí misma mientras me dirijo a tocar la puerta de mi casa.
- ¡¿QUIEN ES?!.- escucho a mi hermana gritar desde adentro.
-YO PUES QUIEN MAS. -le grito desde afuera y escucho sus pasos hacia la puerta.
Entro y me dirijo de una vez a mi cuarto sin ver a los lados viendo solo a mi celular. Y escucho la voz de alguien a quien tenía mucho tiempo sin ver.
-¿No me vas a saludar, estúpida?. -Volteo y mi boca se abre en una o mayúscula.
-MI AMOOORRRRR. -corro y la abrazo mientras ella hace lo mismo. -cuanto tiempo ¿cómo estás? ¿y está sorpresa Britany?. -la abrazo y la beso nuevamente, me hacía mucha falta ver a mi mejor amiga.
-Te extrañaba demasiado, y aproveché que hoy no trabajaba en el puesto de perros calientes de mi tía para venir. -dice y la abrazo más fuerte, siento mojada mi chemise y aparto su cara de mi pecho.
-¿Que paso? ¿que tienes?. niega ligeramente con la cabeza y la apretujo más fuerte, quiero que sepa que está aquí conmigo y que yo nunca le voy a fallar aunque ella no quiera decirme que le está pasando. -Ven, ¿ya comiste? ¿quieres algo? vamos a mi cuarto allí te vas a sentir más cómoda.
Habían pasado muchas cosas hoy, primero me encuentro con mi ex, luego conozco a un chico lindo que creo que jamás volveré a ver, luego Nohemí recibe una extraña llamada y sale de su cuarto tratando de no llorar, luego me besa aquel chico al que no creí volver a ver y ahora Britany llorando, ella era llorona pero no creí que llegaría a mi casa un día llorando.
-Es que, no sé como contart... -la interrumpo y la abrazo.
-Llora princesa sé que no puedes hablar ahora y te entiendo, solo quiero que sepas que cuentas conmigo para lo que sea, ¿para eso somos mejores amigas o no?. -le digo con una sonrisa brillante mientras la acerco a mi y empiezo a acariciarle el cabello torpemente.
Pasa la noche y por lo menos ya no está sollozando descontroladamente, la escucho más calmada y empieza a contarme.
-Estuve... -decía con voz aún ronca- quiero decir tu me debes entender, es que no sé por donde empezar.. -hizo una pequeña pausa. -tuve relaciones sexuales, fue mi primera vez pero no fue con la persona correcta, yo creía que era el indicado, tanto el chico como el momento, pero me equivoque de chico, una vez te hablé de él, era súper atento conmigo o eso creía yo, creí que él valoraría eso, le entregué mi virginidad y él hoy me termino. -dijo y concluyo era mi turno de hablar y de aconsejarla.
Pero no sin antes darle un sermón de madre sobre-protectora con sintomas de asesina; era mi mejor, sí, la quería también si, pero eso no la salvaba de mi carácter.
-No puedo creer que después de tantos consejos que te di, tú me salgas con esto, osea, eres mi amiga, y tal vez seas un año mayor que yo, pero este acto tuyo habla mal de tu madurez. -la regañé- ¿sera que no podías venir a decirme lo que planeabas hacer? por favor dime que te cuidaste. -hice un silencio y ella calló- no puedo creerlo Britany, ¿que tal si te contagió una enfermedad venerea? ¿cuanto tiempo tenían de novios? ¿un mes? me parece grave y estúpido lo que hiciste. Mañana mismo vamos a hablar con ese condenado hijo de puta y si tu te niegas a llevarme, encontraré su casa así sea gritando su nombre en toda la maldita ciudad. -dije y finalice, para ver como Britany me miraba con respeto y miedo oculto a la vez.
-Está bien, te llevaré, pero promete que te vas a calmar. -dijo mirandome firme a los ojos a lo que sólo asenti y suspiré sonoramente.
Mañana mismo ese maldito iba enterarse de con quien se había metido.
Y con ustedes Bradley :G
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Relatos De Un Venezolano.
RandomEsta es la historia de Marta, una muchacha Venezolana que todos los días tiene que enfrentarse a la inseguridad que hay en su país, se despierta cada miércoles a las cinco de la mañana, cuándo le toca a su número de cédula para ir al supermercado a...