Prólogo

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Un héroe.

¿Qué significaba ser héroe exactamente?

¿Qué es lo que impulsa a estos individuos con dones a realizar actos de buena fe?

¿Prestigio?, ¿la satisfacción de golpear a tipos malos o acaso las recompensas por sus buenas acciones?

¿Hay algo más que eso...?

• ▪ • ▪ •

Viernes. El tan esperado día había llegado. Las clases habían concluido y todos (o mayor parte de ellos) se preparaban para volver a los dormitorios de la clase 1-A. Todoroki tenía prisa, o eso demostraba su manera descuidado y apresurada de guardar sus útiles en el interior de su maletín.

-¿Todoroki-kun? -Escucho su nombre salir de la boca de uno de sus compañeros, y ahora amigo.

-¿Si? -Respondió sin dejar de ordenar sus pertenecías.

-¿A que se debe tanta prisa? -Midoriya como siempre mostraba preocupación ante el comportamiento de sus compañeros, y más aún si se trataba de un amigo. - ¡Oh! ¿Irás a visitar a tu madre?

-Así es. -Dio por concluido su labor ubicando su maletín en el costado de uno de sus brazos.

Aunque era poco visible, Todoroki se encontraba muy contento. Acostumbraba ir de visita al hospital y ver a su madre cada que podía. Desde el festival deportivo, las cosas parecían ir de bien en mejor; ahora aceptaba el poder que heredo de su padre siendo capaz de usarlo teniendo muy presente que era una habilidad propia y, no algo que había sido incrustado en él como una repugnante marca del egoísmo de su progenitor, además había logrado poco a poco reconstruir una nueva y más fuerte relación con su madre, y los resultados de su paciencia y sinceridad eran más que satisfactorios. Se giro hacia Izuku, y le mostró una de sus leves, sinceras e inusuales sonrisas. Gracias a él, su vida había cambiado.

-Gracias Midoriya.

-¿Eh? -Estaba estupefacto, ante la radiante expresión de su amigo y la genuina gratitud en sus palabras. No le dio tiempo de decir más, Todoroki ya había salido por la puerta.

• ▪ • ▪ •

Le dio una mirada al reloj de su muñeca, faltaban aproximadamente tres horas para que el sol se ocultará. Iba a buen tiempo, por lo que decidió tomar algo en una máquina expendedora en la esquina de una de las calles. Los gritos de emoción de los niños eran la melodía en el calmado ambiente en esa zona. Dos niños y una pequeña de rizos castaños, jugaban con una pelota en el parque situado a unos metros de la maquina en la que había comprado una lata de refresco caliente. El clima era la comprobación de que navidad ya estaba a la vuelta de la esquina.

-¡Nami-chan, ve por ella! -La pelota se había desviado hasta rebotar a la calle, la pequeña asintió y corrió tras ella.

Lo que sucedió a continuación fue demasiado rápido.

Un camión frenando con brusquedad a centímetros de arrollarla. Parálisis a causa del miedo, gritos, Todoroki haciendo un intento fallido por correr hacia ella para socorrerla y...

¿Ojos?

Dos grandes y hermosos ojos violeta. Experimento algo indescriptible al hacer contacto visual con esos ojos. Algo en su interior había dado un vuelco. Le pertenecían a una chica. Lo suficientemente cerca (a diferencia del de cabello bicolor) como para hacer algo al respecto. Se lanzó sin dudar, empujando a la niña fuera del peligro.

Lovely girl | Finalizado [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora