- ____, ¿qué vas a hacer con Nash?- Me preguntó Taylor.
- Yo me encargo, no te preocupes. Vosotros dos seguir disfrutando.- Le guiñé un ojo y reí. Él también rió.
- Gracias.
- Ni darlas.- Le respondí. Busqué a Nash por todo el club de playa hasta que lo vi con otra copa en la mano apoyado en la valla que tiene unas vistas preciosas de la playa.
- ¿Qué estás haciendo aquí?- Le pregunté quitándole el vaso para beber yo. No había bebido en toda la noche y así me lo acababa yo, no él, que ya había bebido bastante.
- Estaba esperando a que vinieras preciosa.- Dijo sin apartar la vista del frente. ¿Cómo? No sonaba a que estuviera borracho.
- ¿Nash tú no estabas ebrio?
- Sé que soy buen actor.- Contestó girando a verme.
- Me lo podrías haber dicho.- Enserio tengo muchas ganas de que llegue mañana e ignorarle.
- ¿Y perderme las caras que has estado poniendo para no reírte y luego cuando me veías darle besos a Denise?- Dijo riendo.
- Supuestamente tú hace un rato me querías con todo tu corazón, ¿y ahora me dices eso?- Era la excusa perfecta para dejar de hablarle.
- No, _____, yo... Era porque me parecías muy mona.
- No quieras arreglarlo ahora Grier.- Tenía ganas de perderlo de vista, pero había otra pequeña parte dentro de mí que quería intentarlo...
- Enserio _____...- Le di el vaso bruscamente, me di media vuelta y comencé a andar lo más rápido posible sin salir corriendo.
- ¿_____ qué ha pasado?- Me preguntó cerca de la puerta Alex. Me giré y vi como Nash venía andando rápidamente.
- Que te lo cuente el aprendiz de Romeo.- Le contesté y salí por la puerta. Seguí andando, con mis pies ya bastante doloridos, hasta la parada de taxis más cercana y uno me llevó de vuelta a casa. Subí en ascensor y cuando llegué a la puerta me di cuenta de que no tenía mis llaves y que me las había dejado en casa de Alex. Me senté en el suelo, saqué mi móvil y miré la hora. Eran las dos y siete de la mañana. Decidí llamar a Alex después de un rato de razonar si debería aguarle la fiesta y de pasar por el interrogatorio que me esperaría.
- ¿_____?- Seguía en el club porque se oía claramente la música de fondo.
- Siento llamarte ahora, pero es que mis llaves están en tu casa.- Rió.
- No te disculpes, porque no te ibas a quedar sin entrar en tu casa por no llamarme. En media hora estoy allí.
- Muchas gracias.
- De nada cabeza loca.- Reímos y colgué. Esperé sentada encima de mi alfombrilla, pasando frío la media hora y bajé. En muy pocos minutos llegó Alex sola en el coche.
- Hola.- Le saludé acercándome al coche.
- Hola, toma tus cosas.- Por la ventanilla del coche me pasó mi mochila y mi ropa en una bosa.
- Gracias Alex.- Le agradecí sonriendo. Me di la vuelta y empecé a andar con los ojos cerrados deseando que no me dijera nada.
- ¡_____! ¿No olvidas algo?
- Ah, sí. Hasta mañana.- Le dediqué una sonrisa de oreja a oreja.
- _____.- Me replicó alargando la última letra.- Sabes que no es eso.
- ¿Él te lo ha explicado?
- Sí.
- Pues que te lo haya contado bien o mal no es mi problema. Adiós.- Me despedí y me fui. Una vez dentro de mi casa por fin, me puse una compresa, me cambié para ponerme mi camiseta de "Ramones" y unos calcetines y me quité el maquillaje. Me tiré encima de la cama y así me quedé dormida hasta el otro día.
// ¡_____! ¡Ábreme! ¡Soy Alex! ¿Qué coño haces para no abrirme? ¡_____!// Sonó una voz con golpes en la puerta. Di un salto en la cama y fui corriendo a abrir.
- _____, ¿estás en pijama todavía? ¿Pero sabes qué hora es?- Negué con la cabeza.- ¡Son las nueve menos cinco! ¡Tienes que ir a trabajar!- Cuando gritó eso mi cuerpo reaccionó y salí corriendo a mi habitación. Me puse corriendo unos vaqueros negros rotos, una camiseta de tirantas gris y unos tenis blancos con cuña. Me lavé la cara y los dientes mientras que Alex me quitaba el recogido de ayer. Cogí mi móvil, mi pistola, mi placa y mis llaves. Alex cogió, no sé por qué, una funda de la caja y me la puso en el móvil. Salimos corriendo del edificio y nos montamos en su coche. Miré la funda que había cogido Alex, era negra y con letras blancas ponía "I love the sound you make when you shut up."
- ¿Por qué te entretuviste en ponerme esta funda?- Le pregunté haciéndome una cola baja para disimular que no me había peinado.
- Como no quieres hablarle pues le enseñas la funda y ya.- Me respondió riéndose.
- Estás loca.- Reímos. Llegamos al parking de la comisaría y como no podía faltar, Nash estaba bajándose de su coche y ahora tendríamos que subir con él. - ¿Podemos tardar un poco más en bajar del coche?
- ¿Por qué?- Preguntó Alex cogiendo su bolso del asiento de atrás y miró por la ventana.- _____, estáis en el mismo caso, tienes que enfrentarte a tus miedos.
- No me da miedo, ni que me fuera a matar, pero no quiero tener que subir con él en el ascensor en un silencio bastante incómodo.- Alex salió del coche sin hablar y tuve que salir también para que cerrara éste.
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[FBI] || Nash Grier y tú
Fanfiction_____ Scott de 19 años. Pelo castaño claro, ojos marrones miel y buen cuerpo. Nada del otro mundo. Es agente del FBI en Califonia gracias a un proyecto de éste. Un día normal llega a la comisaría y le dicen que tiene un nuevo compañero para el caso...