Príncipe de Chocolate.

15.- "Tempera el Chocolate"

Llegamos a la tienda, cada uno tomamos una canastilla y nos dirigimos al área de moldes; durante el verano estuve practicando chocolatería, tenía varios moldes, para la clase de mañana sólo necesitaría chocolate  Jos estaba mirando algunos moldes de silicon.

-Alon- dijo para llamar mi atención.

-Dime- dije mientras me acercaba a él.

-¿Cuál será tu relleno?-dijo mientras tomaba unos pequeños capacillos blancos y los colocaba en su canastilla.

-Tengo en mente hacer varios rellenos, té verde, licor de café, mermelada de naranja y chabacano- dije contando algunos dedos de mi mano.

-Wow, si que amas esto- dijo mientras caminábamos hacia el área de chocolates.

Jos quedo impresionado con la gran gama de colores que había en las estanterías, se quedo quieto unos segundos y eligió algunos, yo sólo tome blanco y negro.

-¿Cuál crees que es el mejor relleno?- dijo mientras me seguía para llegar a la caja a pagar.

-¡Crema de malvavisco!- dije emocionado, mire la expresión de Jos, se notaba que no tenía idea de lo que hablaba -Es una crema algo difícil de hacer, podrías rellenarlos de cerezas o de dulce de leche- dije tratando de alentarlo.

Llegamos a la caja y note que Jos estaba viendo su teléfono, termine de pagar mis ingredientes y era el turno de Jos.

-¡olvide el boleto del estacionamiento en el auto! - dijo preocupado -¿Podrías ir por él?- dijo ofreciéndome las llaves de su auto.

-Claro- dí media vuelta y camine a paso rápido hacia el estacionamiento, llegue al auto de Jos y comencé a buscar el boleto de estacionamiento, hasta que recordé algo -Este es un estacionamiento publico- me extraño que Jos no recordará eso. Fui de regreso a la caja y vi que Jos ya tenía sus bolsas de compras.

-Jos aquí no cobran el estacionamiento- dije mientras le entregaba las llaves.

-Sí, me lo dijo la cajera cuando te fuiste, lo siento, esto de los chocolates me tiene algo distraído- dijo con una pequeña risa.

Llegamos al auto y de inmediato tome mi mochila para buscar mi teléfono, olvide avisarle a mi madre que llegaría tarde de nuevo, lo primero que vi al desbloquear mi celular fue el aviso de 13 llamadas perdidas de mi madre, esta vez seguro va a matarme, Jos encendía el auto mientras yo seguía viendo con horror mi teléfono.

-No te preocupes, llegaremos pronto- dijo ofreciéndome una sonrisa y tomando rumbo hacia mi casa.

No tardamos ni 15 minutos, después de que estaciono el auto frente a la puerta, comenzó a sonar mi teléfono, leí la pantalla y era mi mamá de nuevo.

-¿Ho-hola?- dije con nerviosismo.

-Hola amorcito, ¿ya vienes para la casa?- dijo con tono dulce, pero sabía que era una trampa.

-Estoy aquí afuera con Jos, tenía que comprar unos ingredientes para una clase- dije mientras miraba al ojimiel. 

-¿Jos? - dijo con gran duda- ¡Ah, tu novio!- dijo con gran alegría.

-Te veo en un minuto mami- dije con sarcasmo y termine la llamada.

-Gracias por traerme a casa de nuevo- dije con una sonrisa.

-No fue nada a comparación de lo que hiciste por mí hoy- en segundos saco su teléfono y me lo ofreció -¿Me podrías dar tu numero?, charlar por las noches me ayuda a conciliar el sueño- dijo un poco apenado.

-Claro- dije mientras tomaba el celular y tocaba la pantalla para registrar mi número, se lo devolví a Jos y tome mi mochila y bolsa de compras.

-Charlamos más tarde Alon- dijo con una sonrisa.

Asentí y baje del auto, rebusque las llaves de la puerta en mi mochila pero no fue necesario porque Braulio la abrió.

-Mamá me mando a buscarte por si estabas besándote con el chico cejudo- dijo en susurros. 

Puse los ojos en blanco y di media vuelta para darle una seña de despedida a Jos, él sólo sonrió y puso en marcha su auto.