"Mi corazón chocolate por ti"

411 59 16
                                    

Jos.

Hoy iniciaba un nuevo semestre, iba en camino al campus revisando mi teléfono para buscar noticias sobre Alonso, pero al parecer me había desaparecido de su vida, no sé nada sobre él desde el día que terminamos mediante una llamada telefónica, sé que no fue la mejor forma pero no quiero quitarle esa oportunidad de que alguien más pueda amarlo, mucho mejor de lo que yo lo hago, alguien que no sea tan egoísta...

Revise mi horario en búsqueda de mi primera clase, "Pastelería", al leer aquello fue inevitable recordar al rubio, pensar que gracias a él puedo estar aquí y ahora dejé de existir en su mundo. Al llegar al laboratorio pude ver a Abraham en una de las estaciones, somos los mejores amienemigos y me alegra conocer a alguien del grupo, un segundo, el enano no esta solo, hay un copeton a su lado, ¡es Alan!

-¡JOS!- grito el copeton, llamando la atención de todo el alumnado. 

-¡JIRAFON!- me acerque a darle un gran abrazo.

-¡No puedo creer que estemos en el mismo grupo!

-Ni yo, pero ¿cuándo llegaste?-

 -Llegamos hace unos días- dijo el copeton mirando al español.

-¿llegamos?- dije confundido. 

-Navarro, quiere por favor sentarse, empecemos bien el semestre por favor. 

El copeton hizo una mueca de fastidio al ver al Chef y tomo asiento junto a Abraham. Yo al ver al Chef comencé a caminar a la estación del rincón, la única con asientos libres. 

-Usted, ¿cuál es su nombre?- dijo el Chef señalándome directamente.

-José Miguel Canela- respondí nervioso, antes de poder sentarme.

El Chef mostró una sonrisa y soltó una gran carcajada.

-¿Usted fue uno de los alumnos de intercambio de México verdad?

Me limité a asentir, su rostro se me hacia conocido. 

Siéntese Canela, necesito continuar mi clase - El Chef comenzó a escribir algunas cosas en el pizarrón. 

Una vez sentado empecé a sacar algunos bolígrafos de mi mochila, uno de ellos cayó bajo la mesa, mientras me agachaba a recogerlo un gran portazo se escucho por todo el laboratorio, al querer ver quién hizo tal ruido, note unos enormes estantes llenos de productos de limpieza que impedían mi vista hacia la puerta. 

-¡Lo siento!, yo no quería, pero estaba atascada la puerta y...

Esa voz...

-Parece que este semestre el Ogro seguirá comiendo Hadas- dijo el Chef acompañado de una gran carcajada. 

-Es muy gracioso Chef Torreblanca... ¡Mi nombre es Alonso, pero pueden llamarme Alón, compañeritos!- grito. 

Mi corazón comenzó a acelerarse, no podría ser cierto, esto debía ser una broma. 

-La estación del rincón tiene el mejor asiento disponible, Villalpando.

Sentía que mi corazón explotaría en cualquier momento, busque la mirada de Alan para intentar saber algo, el copeton me miro sonriente al igual que Abraham. Era él, no estaba soñando. 

-¿Cejitas, podrías hacerte a un lado?, es que ese es mi lugar

Esa sonrisa

-Alón...

N/A: ¡Por fin!, ha terminado Príncipe de Chocolate, siéndoles sincero, este no es el final que planeaba, la mayoría de momentos ya los tenía planeados y escritos en borradores, pero desde el capitulo donde Jos habla a la estación de radio, no sé que me paso que mi corazón me pedía mantener juntos a estos dos chocolatosos enamorados. 

Espero que les haya gustado, mil gracias por 7.5 vistas y 1.6 votos hasta el día de hoy, 03 de Marzo del 2017 a las 3:42 am (Me voy a arrepentir cuando tenga que levantarme para ir a la escuela), pero en verdad, gracias, por seguir al tanto la historia, por los comentarios, por absolutamente todo.  

Si necesitan un epilogo por si no logran entender cómo es que Alonso llega a España, pídanlo y se les será concedido. 

¡Ya tengo planes para una próxima historia!, esperen noticias en unos días. 

 ¡bye!



Príncipe de Chocolate.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora