-¿Alonso es tu novio? - dijo el pelinegro.
-¡NO!- dije antes que Bryan -Yo lo conocí esta mañana, me ayudo a encontrar el salón de Panadería- me sentía nervioso, por la pregunta de Jos.
-Tal vez en un futuro- dijo Bryan -Alonso tiene pinta de ser una buena esposa -dijo con una sonrisa y colgando uno de sus brazos en mis hombros.
Alan comenzó a reír. secunde su risa para que se entendiera que era un simple juego de Bryan, al menos eso espero.
-No te preocupes, yo ya tengo a alguien- comento Bryan rompiendo la tensión entre él y Jos -No me gustan los chaparritos- me dedico una sonrisa acompañada de un guiño.
Bryan esperaría a su novio, nos despedimos de él y seguimos nuestro camino hacia la salida, cruzamos la puerta, era momento de despedirnos.
-Buenos chicos, tengo que irme, mi hermana quiere que la acompañe a comprar ropa -dijo Alan acompañado de una mueca de fastidio -Nos vemos mañana - dijo mientras cruzaba la calle y desaparecía a través de un parque.
mi vista volvió a Jos y antes de decir algo mi teléfono comenzó a sonar, revise la pantalla y era mi madre.
-¿Qué paso má?- pregunte sosteniendo el teléfono en mi oído.
-¿Chefcito, no podré ir por ti, tengo una reunión urgente en el trabajo y tu padre fue con tu hermanito a un museo - dijo mi madre con un tono de voz ancioso -¿Me perdonas?, te prometo que te compensaré cuando llegué -dijo mientras escuchaba como bajaba de su auto.
-No te preocupes má, nos vemos en casa, te amo-
-También te amo chefcito- dijo dando por terminada la llamada.
guarde mi teléfono en el bolsillo trasero de mi pantalón mientras dirigía mi vista a Jos.
-Lo siento mi mamá iba a pasar por mí pero tuvo un inconveniente -dije apenandome un poco, tenía casi 19 años y mi madre aun me llevaba a la escuela.
-No te preocupes, las mamás son así de protectoras - dijo dedicándome una sonrisa.
-Bueno... nos vemos mañana Jos- dije mientras me despedía y comenzaba a caminar en dirección hacia la estación de trenes.
De repente sentí que alguien tomo mi brazo.
-Alonso espera- dijo con cierto tono de nerviosismo.
volteé a verlo, estaba rascando su nuca y con un ligero rubor en las mejillas.
-¿Qué pasa? - dije curioso.
-Es que... creo que tú...- dijo mientras bajaba su vista hacia sus zapatos
Mi corazón volvía a acelerarse, ¡¿él intentaba invitarme a salir?!.
ESTÁS LEYENDO
Príncipe de Chocolate.
Fanfic"El chocolate posee un auténtico don para arreglar problemas. Unos instantes de tristeza, una jornada estresante, una discusión, una recompensa, un placer secreto... El chocolate siempre nos brinda una respuesta" - Trish Deseine.