34.-"Incorpora los ingredientes secos poco a poco en la mezcla"

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Nos adentramos a su auto para conversar.
Después de un largo silencio incómodo Jos comenzó a hablar.
-He hablado con Rebeca- dijo serio y mirando hacia el volante del auto.
-¿sobre qué? - me dediqué a mirar mi pequeño estómago, había crecido un poco gracias a la cantidad de dulces que probamos día con día.
-Le dije de mis sentimientos hacia ella y hacia ti- su mano derecha se acercaba poco a poco a la mía.
No sabía que le dijo exactamente a Rebeca, pero tenía una idea, pero yo estaba con Abraham, no quería lastimarlo, él era tan dulce conmigo.
-¿Entonces ya aclaraste tu mente? - la mano de Jos ya estaba acariciando la mía.
-Si- volteo a mirarme, acercaba su rostro al mío hasta tener nuestras frentes juntas. -Te amo a ti Alon.
Ceŕre los ojos al instante, quería decirle que también lo amaba, pero no podía, no ahora.

-Jos, no puedo, no ahora- un nudo se formaba en mi garganta.
El ojimiel separó nuestras frentes y me vio directo a los ojos.
-¿Ya no quieres estar conmigo?.
-Claro que si Jos -tome sus manos- pero estoy con Abraham y no sería justo para él.
Mi teléfono comenzó a sonar, lo saque de mi mochila, era Freddy.

-Alonso, es super importante que vengas al dormitorio de Abraham, se encerró y sólo quiere hablar contigo- el rizado soñaba muy preocupado.
-¿Qué sucedio?.
-Su solicitud de intercambio no fue aprobada del todo, el pasaporte de Abraham está vencido y tiene que regresar hoy por la noche a Europa.

Conté inmediatamente.
-¿Para qué llamo Freddy?- pregunto el ojimiel.
-Jos- tome sus mejillas y lo bese, extrañaba el sabor de sus labios, después de unos segundos separamos nuestros labios para volver a juntar nuestras frentes.
-Yo tengo que irme, tengo que- sentía su mirada fija, ese contacto visual que me hacía querer besarlo por más y más tiempo - estaremos juntos Jos, te amo y no dejaré que te vuelvas a apartar de mi- un Casto beso y baje del auto camino a los dormitorios de la Universidad.

Llamé a Freddy para saber el número de habitación de Abraham, condominio C, Departamento 9.

Llegué y vi al rizado tocando la puerta de la habitación.
-¿No ha salido?.
-No último que gritó fue "sólo andaré con Alonso, los demás podéis cagar en vuestros muertos", el decano dijo que le habían avisado desde el almuerzo.
Entonces recordé, la profesora que nos encontramos en el pasillo no llevo a la dirección; golpee la puerta.
-Abraham, soy yo Alonso- dije detrás de la puerta.
Escuchamos los seguros de la puerta quitarse.
-¡sólo Alonso!- grito el español.
-Convencelo de tomar el avión está noche o lo deportaran- susurro Freddy en mi oído.
Asentí mientras giraba la perilla y me adentraba a la habitación, cerre la puerta e inmediatamente sentí a Abraham sobre mi.
-¡No me quiero ir Alonso, no quiero!-Estaba abrazandome entre sollozos y lágrimas.
-Pero tienes que, sino serás deportado y podrían prohibirte regresar a México- dije tratando de confortarlo, acariciando su espalda.
El español dejo de llorar para separarse de nuestro agarre.

-¿tu quieres que me vaya?- sorbio su nariz e intentaba limpiar las lágrimas de sus ojos.
-Yo quiero que estés bien, sin problemas con embajadas y esas cosas- dije limpiado una pequeña lágrima de su mejilla.
-Alonso, yo te quiero muchísimo, te extrañaría demasiado - volvió a abrazarme.
-Yo también te quiero Abraham y claro que te extrañare- dije mientras devolvía el abrazo.

Estuvimos así unos minutos hasta que el español nos atrajo hasta su cama, aún en nuestro abrazo.
-¿Eso significa que terminamos? - su voz sonaba rota 
Las relaciones a distancia son difíciles de llevar- me ti, sabía que tenía que decirle a Abraham que quería estar con jos , pero no ayudaría en este momento.
El español puso su frente con la mía, intentando no soltar más sollozos.
-Alon, quieropedirte algo...- tomó mis manos.
-Lo que sea- dije con una sonrisa.
-Quiero estar contigo- dijo con un pequeño sonrojo en sus mejillas.
-¿A que te refiere...- me vi interrumpido por el choque de sus labios con los míos, era un beso demasiado pasional.
-Abraham esto es...- intentaba separar nuestros labios.
-Quiero ser tuyo Alonso- se levantó de la cama y desabrochaba su camiza.

Príncipe de Chocolate.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora