ϟ Things #1

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¿Cómo se conocieron?

Harry
Era la hora del desayuno. Harry tomó un lugar en la mesa de Gryffindor frente a su mejor amiga, sumergida en el ejemplar más reciente de El Profeta, se sirvió jugo de calabaza en una copa y suspiró fastidiado. Estaba distraído, tenía en mente las cientos de cuartillas que Snape les había dejado como deberes para esa tarde, tomó la copa y la llevó a sus labios para darle un trago. Miró a Hermione por el rabillo del ojo sonreír y saludar a alguien tras él, giró sólo un poco la cabeza para ver quién robaba la atención de su amiga, quedando deslumbrado por la bonita chica que le devolvía el saludo a Hermione.

—Hola Scar, ¿quieres sentarte? —le preguntó Hermione.

—Hola Herms, me encantaría. La mesa de Ravenclaw está llena.

Harry atrajo la mirada de la chica al no quitarle los ojos de encima; ella le sonrió amablemente y las mejillas del muchacho se tornaron color carmesí. Le devolvió el gesto, olvidando por completo que no había tragado del todo el líquido que había estado bebiendo.

Scarlet rió, y Harry rogó desaparecer de la faz de la tierra

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Scarlet rió, y Harry rogó desaparecer de la faz de la tierra

—Oh, Harry, ella es Scarlet Maxwell —le dijo Hermione, sin ocultar el desagrado en su rostro—. ¿Por qué no dejas que se siente a tu lado?

—¿Cómo estás, Harry? —lo miró divertida, aún con rastros de risa en su tenue voz—. Creo que olvidaste que el jugo de calabaza debe tragarse.

—¿Darás tutoría por créditos extra de nuevo? —inquirió Hermione, interrumpiendo el momento incódomo.

—No lo sé, aún no consigo alguien que la necesite... por lo visto este año nadie necesita ayuda en pociones.

Harry volvió a mirarla y estudió sus labios rojos pronunciar aquellas palabras. Hermione tardó menos en notarlo que su cerebro en formular una brillante idea. Seguramente su amigo le agradecería después, pues era obvio que esa manera de mirarla significaba algo. Era la primera vez que Harry Potter actuaba así en presencia de una chica. Y además, en verdad necesitaba ayuda en pociones.

—Harry, me habías dicho que buscarías a alguien que te ayudara en pociones, ¿cierto? —Hermione volvió a tomarlo por sorpresa y una vez más, Scarlet lo pilló observándola.

Harry asintió para no quedar como un completo idiota.

—Sería un placer, ¿te parece si empezamos hoy después de clases?

Asintió nuevamente, aún aturdido.

—Te veré en la biblioteca —dicho eso se puso en pie. Se despidió de su amiga con un ademán y caminó fuera del comedor.

La joven castaña de la mesa de Gryffindor sonrió victoriosa. Harry la miró partir con una sonrisa soñadora en los labios.


Draco
Llevabas una gran pila de libros entre los brazos mientras buscabas una mesa libre en la biblioteca. Tenías una reducida vista del frente, por lo que no te percataste de que un chico distraído caminaba en tu dirección. Sentiste un golpe y en un segundo todos los libros que cargabas estaban esparcidos por el suelo; muerta de vergüenza, te apresuraste a recogerlos al tiempo que pedías perdón una y otra vez.

Harry Potter: Things Donde viven las historias. Descúbrelo ahora