Jimin despertó por los rayos del sol desconcertado al encontrarse sobre aquel techo. Se levantó de golpe revisando sus bolsillos para asegurarse de que no le habían robado nada. Su cabeza se sentía como una bomba de tiempo y no tardó mucho en recordar lo que había vivido la tarde y noche anterior. Tomó el diario del suelo y bajó con cuidado para caminar un poco y recuperar el equilibrio mientras buscaba algún sitio donde desayunar.
En cambio Zephyra, había pegado tres veces los ojos en toda la noche por periodos cortos de 20 minutos pensando en donde podría encontrarse Jimin. No estaban en Nueva York, no tenía idea de dónde buscarlo. "A lo mejor se reunió con unos amigos y fue de fiesta" pensó, pero no fue lo suficiente para mantener la calma.
Jimin fue al hotel sigilosamente tratando de no encontrarse con Zephyra. Tomó una ducha y se lanzó en la cama para dormir propiamente antes de la cena. Estaba agobiado y aturdido. ¿Con qué excusa le iría a Zephyra que no tiene la culpa de nada y sin embargo, debe pagar? ¿Le estaría mintiendo, rompería con ella definitivamente o le diría la verdad y la haría esperar? La segunda opción, obviamente.
Hye Lee iba siguiendo a Zephyra desde el lobby hasta una pequeña área verde que estaba cerca de la piscina principal para asegurarse de que estuviera completamente sola. Bingo fue lo que pensó al verla pensativa y solitaria.
Carraspeó tres veces y Zephyra giró su cuerpo con delicadeza.
–¿Interrumpo algo?
–No, solo pensaba. ¿Quieres algo?
–Solo quiero hablar –dijo sentándose a su lado.
–¿De?
–De Jimin –soltó, algo que totalmente tensó a Zephyra porque cuando Hye Lee hablaba de Jimin o viceversa, no evitaba sentir que era como una amenaza.
–Adelante, te escucho.
–¿Ha bablado contigo ya? –Zephyra la miró preguntándose qué podría él hablarle –está bien, le ahorraré el habla. Se acabó, ¿entendido? El jueguito de ambos se acabó.
–¿De qué estás hablando? No soy adivina.
–Volvimos, algo más serio esta vez. Nos comprometeremos y no quisiera que te tome por sorpresa. ¿No lo has notado distante contigo hoy? –Ni siquiera lo he visto pensó. –Esa es la respuesta, tarde o temprano pasaría. Ha sido muy difícil poder superarnos a pesar de los años, debiste haber sido muy tonta si crees que estaba cayendo por ti.
–Debiste haber sido muy tonta tú por haber perdido a alguien tan maraviloso por una puta ambición –Zephyra se puso de pie con enojo y los puños apretados. Sentía que se le cortaba la respiración debido a la rabia que se acumulaba dentro de ella, siempre estuvo preparada para que algo así pasara porque nunca sacó de su mente el hecho de que Jimin seguía queriendo a Hye Lee, pero no pensó que le molestaría tanto...
–Está bien, Hye Lee. Esto no tiene sentido, de la nada y de un día para otro. Sé que hablar contigo vale de nada pero él me lo explicará mejor independientemente de que quieras o no quieras que hable con él. Pero te lo advierto, no me importa si tengo que luchar contigo para tenerlo de vuelta a mí, no permitiré que le hagas daño otra vez.
Huyó hasta la habitación y trató de desahogar sus emociones mientras caminaba. No lo entendía y no quería entenderlo. Tal vez todo dolía más porque se estaba enamorando de él. Antes de introducir el código de su dormitorio, se detuvo en la puerta de la habitación de Jimin con el puño cerrado por varios segundos hasta que se decidió a tocar con fuerza tres veces. No respondió a los primeros 5 minutos, pero justo cuando se iba a rendir la puerta se abrió de golpe y un Jimin soñoliento y molesto apareció frente a ella.
–¿Por qué? –preguntó Zephyra en un grito ahogado. Jimin no sabía qué palabras decir primero, solo la miraba tratando de no abrazarla. Sería mejor evitar las emociones para poder resistirse. Al menos podía controlar eso.
–Ya te lo dijo –respondió él imaginándoselo.
–No lo suficientemente claro, fue más una reclamación.
–¿Qué quieres saber? ¿No te lo dijo ya? Volvimos, es cierto.
–¿Y qué pasa con nosotros? ¿Esto termina aquí?
–¿Cómo terminar algo que no hemos empezado? –ouch.
–¿Por qué demonios de repente eres tan estupido conmigo? Si estabas tan confundido no debiste hacerme creer que hacías el intento de olvidarla.
–Estabas advertida.
–Ya –fue lo único que pudo decir, no se sabía defender. Sentía que la había desarmado y era humillante que ella solo quería insistir pero de todos modos, lo haría. –Pero sé que me quieres, y yo te quiero. En tan poco tiempo sabes que hemos estado despertando sentimientos el uno al otro y sé que te olvidaste de ella mientras estuviste conmigo. No te dejaré ir así tan fácil, ¿sabes? Sé que hay una razón por la cual has cambiado tan radicalmente de la noche a la mañana y no te dejaré en paz hasta descubrirla y hacer que recapacites.
Jimin sentía su corazón estrujarse al escuchar sus palabras porque era exactamente lo que estaba pasando. Aunque quisiera a Hye Lee, no quería dejar a Zephyra porque poco a poco ella lo estaba ayudando a pisotear lo que sentía por aquella mujer.
–¿Dónde estuviste? –preguntó Zephyra pasando a su habitación sin importarle que él no la había invitado a pasar.
–No es de importancia –cerró la puerta y la siguió hasta la mitad de la habitación.
–Quiero saber.
Jimin suspiró.
–Me fui a tomar unas copas –en una azotea.
–Me pasó por la mente, pero no quería suponer tan rápido –Zephyra observó la cama desordenada preguntándose si había dormido bien o si había pasado la noche mal como ella. –¿Has dormido bien?
–No del todo, me despertaste.
–Es un asco que no pueda echarme a dormir en tus brazos y despertar mañana si es posible –no pudo haber dicho algo peor para golpear a Jimin tan duro. Tragó fuertemente mientras recordaba cómo dormía junto a ella. A partir de hoy tal vez no lo haría nunca más.
–Basta.
–Te dejo en paz por hoy, para que descanses. Pero esto no se acaba aquí –de repente se sintió desgastada y absurda, encarcelada en su propio cuerpo. Quería abrazarlo y se preguntaba si él le respondería el abrazo en caso de que se atreviera, más no lo hizo porque pensó que ya era suficiente humillación por un día.
De repente sus ojos empezaron a pesar, ya era hora de que también descansara un poco.
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perfume || park jimin [editando]
Fanfiction«Nunca lo diré, pero espero que ella siempre note el perfume de él en mí, al igual que el mío en él.» »Totalmente de mi autoría. »Heterosexual »No copias ni adaptaciones.