Una vez dentro de la habitación, Zephyra fue quien no resistió un segundo más cerca de Jimin sin abrazarlo, sin besarlo. Lo tomó de la camiseta y lo miró fijamente a los ojos por varios segundos.
—No eres el único. Yo también te he extrañado mucho y cada día que pasa es un infierno al pensar que estarás más lejos de mi de lo que ya lo estás.
—Te juro que no quiero que llegue el día —su voz se quebró mientras dejaba su barbilla descansar sobre la frente de Zephyra.
—¿Por qué no me dejas ayudarte?
—Porque no podrías.
—¡No me dejas intentarlo! —Zephyra sentía como poco a poco la furia se acumulaba dentro de ella. ¿Cómo podría ayudarlo si él no se dejaba ayudar? —¿Acaso de verdad quieres hacerlo?
—¿Casarme con ella?
—Sí.
—Por supuesto que no —volvió a mirarla a los ojos, los puños de ella cada vez eran mas firmes sobre su pecho.
—¡Mentira! ¡La quieres aún y es por ello que no objetas sobre esto! No sé qué hago insistiendo, pero no puedo parar —pensar que Jimin aún perdía la cabeza por Hye Lee la angustiaba. Sabía que lo estaba perdiendo pero no quería pelear por él en vano.
—Las cosas no son así, Zephyra —recalcó. Era mucho más de lo que ella podría imaginar.
—Sí lo son. Si no son así, entonces has perdido tu confianza en mí.
—Confío en ti más de lo que crees. Te he dicho que algún día te lo diré, pero debes ser paciente.
—¿Cuándo? ¿Cuando todo esté perdido?
—Lo siento tanto.
—No sientas quererla, no es como si pudieras controlar tus sentimientos de todas formas —fue lo suficiente para volver a lloriquear ante él. ¿Por qué era tan difícil dejarle ir?
—¡No la quiero! —gritó frustrado —¡Ya no le quiero, te juro que ya no la quiero! La odio, no la soporto. De verdad no lo hago. Sé que hasta un tiempo reciente aún seguía sintiendo algo por ella pero las cosas se pueden superar, yo lo he hecho.
—No quieres cancelar la boda, ¿qué quieres que piense? Es la única preocupación que ronda en mi cabeza.
—Lo único que debe rondar en tu cabeza sobre mí es que estoy loco por ti y que te amo. Te amo, estoy demasiado seguro de ello. Y es cierto, no he hecho nada que evite que me case con Hye Lee pero es porque aún no le he encontrado solución. Pero tengo fe de que algo me hará salir de esta y podré estar contigo.
—¿De verdad me amas?
—No he estado tan seguro de algo en tanto tiempo — sus ojos brotaron dos lágrimas más que estrujaron el corazón de Jimin, él no soportó verla así. Limpió sus mejillas y repartió cálidos besos cargados de amor y ternura sobre toda su cara. —Odio verte llorar.
—No puedo evitarlo, me agobia no poder hacer nada. Estoy llena de impotencia y lo único que logro para calmarme es llorar.
—¿Puedo hacer que te olvides de esto?
—Aunque sea por un momento.
Jimin.
Hice que Zephyra envolviera sus brazos alrededor de mi cuello y uní nuestros labios. Los primeros segundos, ella no pudo evitar seguir sollozando. Luego se concentró totalmente en el beso. Era tierno, calmante. Moví mi boca a ese ritmo tan especial y tranquilo. Sentí como una de sus manos se apoyaba en mi mejilla. La rodeé firmemente con mis dos brazos, mientras la acercaba hacia mí evitando todo tipo de distancia entra nosotros. De un momento a otro, Zephyra me empujaba hasta que choqué con el borde de la cama. Me lanzó a estas y luego ella llegó hasta mí desesperada buscando de mis labios. Se subió a horcajadas sobre mi abdomen, jadeé levemente al sentir el tibio contacto de sus manos debajo de mi camiseta. Se alejó apenas de mi boca y me miró agitada.
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perfume || park jimin [editando]
Fanfiction«Nunca lo diré, pero espero que ella siempre note el perfume de él en mí, al igual que el mío en él.» »Totalmente de mi autoría. »Heterosexual »No copias ni adaptaciones.